¿Cómo es ser padre?

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El día era relajado, Karin se encontraba leyendo un libro mientras comía una manzana. Era increíble como el tiempo había pasado para ella. Ahora tenía 8 meses y unas cuentas semanas. Ya estaba preparada para dar a luz, por el contrario...

-¿Naruto? —pregunto ella al oír un gran estruendo en la habitación. La pelirroja dejo el libro y la manzana, se levantó de donde estaba sentada y se dirigió a la habitación de ambos con cuidado.

-Buenos días Karin-chan —sonrio el rubio, estaba en el suelo y algunas cosas estaban sobre él.

-Naruto... —resoplo la pelirroja y se acerco a ayudarlo.

-¡No! —grito Naruto antes de que Karin se agachase a ayudarlo— No te esfuerces, Sakura-chan dijo que es malo —mencionó él y rápidamente invocó a unos clones para que lo ayudaran. Segundos después, el ojiazul se encontraba libre. Karin se cruzo de brazos.

-¿Qué planeabas hacer? —le pregunto ella y Naruto sonrió, como todo niño travieso.

-Bueno, compramos esta cuna y quería armarla; no pensé que sería tan complicado —se encogió de hombros, la pelirroja sonrió.

-¿No podías pedirme ayuda? —le pregunto y él negó.

-No, debes cuidarte —suspiro Naruto y la abrazo por detrás, colocando sus manos sobre su, gran, abultado vientre.

Karin no respondió, sus mejillas estaban un poco rojas. Adoraba que Naruto le diese tanto afecto.



-Bien, puedes irte —menciono la pelirroja, Naruto solto un bufido.

-¿No puedo entrar contigo? —le pregunto y ella negó.

-Te dije que es una reunión de chicas, de todas formas; los chicos estan comiendo costillitas en la casa de Chouji.

-Esta bien... —el rubio no parecía contento, Karin lo tomó de la camisa y lo hizo agacharse un poco. Beso su mejilla, él sonrió.

-Nos vemos.

-Cuidate —ella asintió y Naruto se marchó. Karin tocó la puerta de la casa de Hinata, no tuvo que esperar mucho. Le abrieron la puerta.

-Karin-chan, pasa —menciono la peliazul, estaba con un bebé pelinegro en brazos.

-Tsuyoshi esta cada vez más grande —mencionó ella, el pequeño bebé abrio los ojos. Karin río un poco — es un mini-Sasuke.

-Sí —respondió Hinata y ambas rieron. La pelirroja y la peliazul pasaron a la sala principal. Todas ya se encontraban ahí, incluso Sakura que había dado a luz hace unas semanas.

-Es tan lindo —mencionó la pelirroja al ver al pequeño bebé que Sakura tenía en brazos.

-Lo sé, me dio muchos problemas pero al fin esta conmigo -dijo ella contenta.

-Ahora solo faltas tú —mencionó Ino, quien sostenía a un rubio que dormía en sus brazos. La pelirroja sonrió.

-Bueno, alguien lo esta tomando con calma —respondió ella y puso una de sus manos sobre su vientre. Las chicas rieron.

Era verdad, de todas ellas; solo Karin seguía embarazada. Hinata ya dio a luz a Tsuyoshi; Sakura a Dai; Tenten a Metal; Lea a Midori; Ino a Inojin; Karui a Chouchou; Temari a Shikadai, finalmente; Nayi a Matsuda.

Solo ella seguía embarazada, era un poco agotador.

-¡Naruto-kun! —dijo Lee al verlo llegar. Naruto sonrió. Todos los chicos andaban ahí, le alegraba pasar tiempo con ellos. En especial porque podría preguntarles muchas cosas.


-Oigan —llamo la atención el rubio, todos tenían sus platos de costillita; Chouji tenía un plato más grande.

-¿Qué pasa? —pregunto Kiba, un tanto curioso.

-Bueno, la mayoría ya son padres y...

-¿Estas nervioso? —pregunto Sai, interumpiendolo— Puedo prestarte un libro que me esta ayudando.

-Eh, no —sonrió él y se encogió de hombros. No le agradaba la idea de tener que leer— Solo quisiera saber como será mi vida cuando mi bebé nazca.

De pronto, todos los chicos intercambiaron, menos Suigetsu y Shino, aquellos dos no tenían planes de formar una familia.

-Naruto-kun... —comenzó Lee. Todos prestaron atención en ellos dos— Tener un hijo, es un hermoso regalo y nos indica que seguimos siendo jóvenes...—la voz de Lee sonaba cada vez más fuerte pero fue interrumpido.

-Callate Lee—mencionó Kiba—Naruto, ser padre es agotador y en especial cuando tu esposa; es una manipuladora... —hablo el castaño, Chouji puso una mano sobre su hombro.

-Naruto—comenzó Chouji— es algo hermoso. Ver a tu pequeña bebé, es muy bello. Sobre todo, cuando notas que heredó tu físico —sonrió Chouji y volvió a comer. Shikamaru nego con la cabeza.

-Es molesto —dijo Nara— lloran mucho, duermen la mayor parte del día y solo se levantan a comer y defecar —soltó un suspiro, las ojeras bajos sus ojos demostraban que estaba muy agotado.

-Bueno, Naruto. Yo creo que puede ser muy cansador pero...

-No me interesa tu opinión —interrumpió Naruto a Makoto, este puso una mala cara.

-Entonces no pidas consejos, idiota.

-No pedi el tuyo —respondió él.

-Calmense, no vinimos a pelear —mencionó Shikamaru y ambos se cruzaron de brazos.

-Yo creo que es una gran etapa de tu vida. No lo he visto tan agotador —dijo el pelinaranja. Todos voltearon a verlo.

-O la diferencia es que tu esposa es un verdadero ángel. Tú y Sasuke estan muy bien. No se nota que sufren. —dijo Kiba.

-Bueno, es cierto que Nayi prefiere ocuparse de la mayoría de las cosas a pesar de que le ofrezco mi ayuda. —respondió Juugo, Sasuke permanecía callado. Una pequeña batalla comenzó, todos hablaban de sus experiencias como padres.

El rubio se dio cuenta de algo, fue un error pedirles un consejo cuando todos tienen una forma distinta de verlo.
Soltó un suspiro, había pasado tanto tiempo cerca de Karin; que ya la extrañaba a ella y su pancita. El ojiazul tomo una costillita y siguio comiendo, mientras sus amigos aún debatían de sus experiencias como padres.








VOLVI GENTE

Perdonen la ausencia, esta vez me pase.
Estuve muy ocupada y si no fuera poco, perdi el celular.
En fin, ya volvi
Justo para las fiestas :'D
Espero la esten pasando bien.

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