Cumpleaños 3/3

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-¡Papá! -grito Umi al ver a Naruto, entrar en la sala. El Uzumaki se agacho y la pequeña pelirroja, corrió a los brazos de su padre. Naruto la abrazo para después cargarla.

-Feliz cumpleaños, pequeña -mencionó él.

-Llegaste... tarde -pronunció ella, el rubio comenzó a caminar hacía donde se encontraba el pastel de su hija.

-Lo sé, no volverá a pasar -se disculpó él y su hija asintió.

Mientras caminaba, pudo ver a varios de sus amigos con sus hijos. Su mirada chocó con la de Dai, el niño se acerco más a su madre y Naruto; no le miró más. No queria problemas en estos momentos.

El rubio camino hasta poder estar en frente de todos sus invitados. Las luces de la habitación, se apagaron. Naruto sujeto mejor a Umi, una pequeña llama se vio pasar entre la multitud; era el pastel de la pequeña. La silueta de su esposa se vio, caminaba a ambos con el pastel en manos. Sintió como su pequeña hija, se sujetaba de él; como si no quisiera dejarlo. Beso la cabeza de ella, como la amaba.

Karin dejo el pastel adelante de ambos, todos comenzaron a cantar. Umi se acurrucaba más a Naruto, estaba nerviosa. Era gracioso, siempre pasaba lo mismo en sus cumpleaños.

-Pide tus deseos -le dijo el rubio, una vez que la canción finalizo, Umi asintió. Todos quedaron en silencio por un rato, luego Umi se estiró un poco y soplo las velas. El cuarto se inundo de aplausos, cuando las velas se apagaron. Umi abrazo a Naruto y escondio su rostro en el hueco de su cuello; la escena fue muy adorable.

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-Llego justo a tiempo -una voz sobresalto a la pelirroja, era Sakura. Karin asintió.

-Sí, de caso contrario; llevaría mi plan B a cabo -mencionó ella, Sakura río.

-Creo que hubiera sido una mala idea usar un doble-respondió. La pelirroja alzo una ceja.

-¿Porqué? -pregunto con algo de intriga.

-Hace unos días, cuando Umi jugaba con Dai. Me di cuenta de algo -ambas se miraron- Umi siempre lo encontraba cuando jugaban a las escondidas y Dai, siempre perdía. Ella puede detectar el chakra como tú -le mencionó, Karin abrió los ojos. ¿Cómo no se dio cuenta?

-Ella se habría dado cuenta del engaño -la pelirroja sonrió. Ambas se quedaron en silencio, observando como el rubio jugaba con los niños.

-Es un buen padre -dijo la pelirosa, Karin asintió.

-Lo es- sonrió.

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-Papi -la voz de su hija, lo despertó de sus pensamientos.

-¿Qué paso? -pregunto el rubio un tanto desconcertado. Umi se cruzo de brazos.

-Te quedaste quieto y perdimos -dijo un poco enojada, sus cachetes se tornaron rojizas. Era tan adorable.

-Perdón -pidió el rubio avergonzado. Vio como la silueta de su esposa, se acerco a la escena.

-¿Estás bien? -pregunto ella, Naruto asintió.

-Sí, creo que estoy cansado -respondió, no dejaba de pensar en aquel niño. Después de tantos años, había vuelto a ver a uno de los Uzumaki con los que se enfrentó.

-Bien... -dijo la pelirroja, seguro ya se dio cuenta que Naruto mentía. El rubio sonrió y tomó a Umi en brazos.

-Tenemos que hablar -mencionó y miró a los niños. Todos lucían agotados. -Creo que es hora de que todos se vayan. Karin, dile a Kakashi-sensei que necesito hablar con él -la pelirroja asintió, sin entender completamente.

Luego de unos minutos, sus amigos comenzaron a tomar a sus hijos y despedirse del rubio y la cumpleañera.
Umi bostezo, Naruto la miró.

-¿Cansada? -pregunto y ella negó.

-Aún puedo jugar -dijo abrazando a su padre, el rubio sonrio.

-Claro que puedes -mencionó él y la pequeña pelirroja asintió. Naruto comenzó a morverse lentamente de un lado a otro. Se despidió del resto de sus amigos con un ademán y comenzo a caminar hacia la habitación de su pequeña hija.

Llegaron al cuarto de Umi y Naruto la recostó en la cama, con sumo cuidado de no despertarla; pues ya estaba dormida. Le quito sus zapatitos y la cubrió, suspiro y acaricio la mejilla de su pequeña hija. Ser padre había sido una experiencia que le había cambiado la vida.

Mirar a Umi, era poder recordar sus primeras pláticas con Karin. Los momentos que compartían juntos como amigos, el momento en que pudieron estar juntos como novios.
Ya no podía imaginar la vida sin aquellas dos mujeres.
Beso la frente de Umi y se levanto, ya que estaba en cuclillas frente a la cama de su hija, se dirigió a la puerta y apago la luz antes de salir de la habitación.

Siempre había deseado una familia, poder terminar una misión y llegar a casa; sabiendo que estarían esperando por él.
Solo le faltaba lograr ser Hokage y tendría todo lo que alguna vez soñó.













Creo que wattpad me hizo una mala jugada :/

Ya elimine el capítulo que no se veía.
Actualicen la novela:
Lo más conveniente es que la borren de su biblioteca y vuelvan a añadirla.
Eso sería más eficiente :'D

Ya hasta un Fanart puse xD

Espero que se haya solucionado el problema, perdonen la demora. Estoy un poco ocupada.
Saludos.

Cualquier problema, haganmelo saber en los comentarios :)

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