Un Nuevo Comienzo

Derrota

La Haruno entrecerró los ojos con aquel ataque, retrocediendo un poco. Un poco de polvo inundo la escena y luego Kiba, la miró.

-¡No debes distraerte! -le grito él y ella se avergonzó. ¿Cómo dejo que las palabras de aquel chico, le afectaran?

-No volverá a ocurrir- pronuncio ella ajustando su guante. Luego, la pelirosa pudo ver un brillo en su banda.

-Es la señal, demonios -bufo el castaño al notar el resplandor. No tenía otra alternativa.

-Hagámoslo, Kiba-dijo ella y el castaño asintió.

Tadashi, no lograba entender que decían aquellos dos. Había fallado en su golpe y aunque, quisiera concentrarse; su mente estaba ocupada en su hermano. Había visto como aquel pelinegro, lo había golpeado y odio aquello. Debía acabar esta batalla y socorrer a su imprudente hermano menor.

Sakura corrió hacia él, haciendo que este retrocediera y la pelirosa; impacte su golpe en el suelo, quebrandolo. Detrás de ella apareció el castaño con el doble colmillo de lobo. Tadashi se vio obligado a esquivar el ataque, retrocediendo más. No entendía lo que estos dos planeaban, hasta que sintió su cuerpo inmóvil.

Por otro lado, Seiichi tuvo el tiempo suficiente para recuperar chakra y hacer nuevamente su jutsu. Naruto se había dado cuenta de aquello, sabía que si lo tocaba por tercera vez; sería su fin. Ni siquiera ahora, era capaz de utilizar todo su chakra; además también se sentía cansado. El rubio trataba de no dejarse tocar por el pelirrojo, mientras retrocedía.

El plan salía tal como lo había dicho Shikamaru, pudo escuchar el ruído de un árbol partiendose y supo que todo estaba preparado. El pelirrojo estaba concentrado en darle al rubio, quería deshacerse de él. El rubio detuvo sus movimientos y él, sonrió. Iba a acabar con él, pero todo cambió, cuando vio al rubio sonreír de forma burlesca. Hizo una mueca y salto hacía su dirección.

-Idiota -dijo el rubio y desapareció con una gran bola de humo. ¿Un clon? ¿Qué demonios? ¿En qué momento tuvo tiempo? Busco en sus recuerdos,  había sido cuando bajo de aquel sapo. El humo vino contra su cara, era tarde para detenerse. Aunque no le veía el propósito a su movimiento. Cuando recuperó la visión, todo tuvo sentido cuando vió a Tadashi inmóvil. No se movía y cuando miró al suelo, vio su sombra atrapada. Les habían tendido una trampa, bufo y trato de desviar su ataque pero tal como lo pensó, ya era tarde para detenerse. Trato de desviarlo, de todas formas, tocó al pelirrojo. Y su último ataque había sido en vano. Tadashi gruñó al momento de haber sido tocado. Había absorbido el ataque en su máxima expresión debido a su jutsu. Shikamaru deshizo el jutsu del pelirrojo, mientras suspiraba. No iba a aguantar más, ya que Tadashi le estaba robando el chakra. Por suerte, todo salió como lo había planeado.

Todos se quedaron quietos mirándose, estaban agotados. Era malo para los Uzumaki's, ninguno estaba en estado de seguir peleando. Seiichi intento incorporarse pero su cuerpo voló lejos cuando Sakura impactó contra él. Sus compañeros abrieron los ojos y el pelirrojo, escupió sangre. Saori tenía en sus brazos, al inconsciente de Shitou. Sasuke estaba con su equipo, al lado de Karin. Hideki, se había levantado una vez más. Estaba demasiado dañado, la sangre aumentaba con cada golpe que le daba Lee. Fue arrojado hacia un árbol y miro a su hermano. Cuando se dio cuenta de la situación actual, era tarde. El puño de Lee impacto contra su estómago, haciendo que caiga al suelo.

-Oban...-pronunció débilmente. Tenía que admitirlo, habían perdido esta batalla. El gran mono, se encontraba peleando con el sapo cuando sintió el llamado de su amigo.

-Lamento postergar nuestra lucha, Gamakichi -pronunció él sorprendiendo al sapo. De un rápido, movimiento; tomo el cuerpo del anfibio y lo lanzo lejos. Gamakichi se quedo sorprendido y aterrizo, unos cuantos pasos atrás.

El mono comenzó a correr sorprendiendo a todos, bloqueo uno de los ataques de Lee contra Hideki, con su mano. Tomó al anarajando y se lo metió a la boca. Todos abrieron los ojos ante lo que vieron, el mono corrió hacia Saori y Shitou. Sasuke intento detenerlo pero en cuanto lo toco, retrocedió. Su pelaje comenzó a desprender un olor nauseabundo, tanto que lo hizo marearse. Oban tomo a ambos chicos y se los metió a la boca, ignorando los gritos de la castaña.

Kiba y Akamaru, se cubrieron la nariz. Era horrible, querían arrancarse el sentido del olfato. El castaño, se subió encima de Akamaru y ambos corrieron lejos. Los ninja de la hoja comenzaron a sentir el olor, era muy fuerte. Todos se cubrieron la nariz, el olor era tan fuerte que sintieron sus ojos picar. ¿Qué demonios pasaba?

Oban, corrió hacía los pelirrojos, tomandolos y metiéndoles a su boca. Dio un gran grito mientras golpeaba su pecho y acto seguido, desapareció. Dejando al resto confundidos, pero con la victoria de haber ganado la batalla.