Capítulo 27.

1.7K 185 12
                                    

[...]

Nicky esperaba afuera de la clase de su hermano esperando a que salga.

El timbre finalmente sonó.

—Ya era hora... —murmuró.

Todos salieron del salón, excepto por el único que esperaba.

Un poco desesperado decidió entrar al salón, ahí encontró a su hermano aún sentado. Se acercó a él con el ceño fruncido.

—Ricky, ¿qué te sucede? ¿porqué no sales?

—Iba hacerlo... es un momento.

—Por favor no me digas que estás posponiendo hablar con ______ solo porque tienes miedo. —se cruzó de brazos molesto.

—Ricky Harper nunca tiene miedo... pero sí lo tengo. —confesó bajando la cabeza.

—Vamos, ya repasamos lo que tienes que hacer. —él seguía igual—. Ni siquiera vas a invitarla al baile todavía.

—¡Ya lo sé! Es sencillo para ti, no tienes que hablar con ella y enfrentarte a la posibilidad de que te rechacé.

—No te va a rechazar.

—¿¡Cómo lo sabes!?

—¡Porque soy Nicky, el casamentero! ¡y porque los he espiado lo suficiente para saberlo! Así que levántate, deja de tener miedo y ve hablar con la chica que te gusta. ¿¡Oíste!?

—... Sí.

—¡No escuche!

—¡Sí!

—¡NO ESCUCHE!

—¡SÍ!—se levantó de su asiento soltando un grito.

—¡CHICOS!—gritó la profesora llamando la atención de los chicos—. No se grita en clase.

—...

[…]

Almuerzo.

Dawn se sentó frente a Dicky, mientras éste comía tranquilamente.

—Ya tengo un plan. —dijo con una sonrisa.

—Genial. —respondió sin dejar de comer.

—... ¿No vas a preguntar de qué trata?

—No, confío en ti hermana.

—No sabes de qué hablo, ¿verdad?—alzó una ceja.

—Ya sabes que no...—dejó de comer.

—¡Obviamente hablo de la casa del árbol!—exclamó mirando molesta a su hermano—. Escucha, solo tenemos una oportunidad para subir antes de que la destruyan.

—Pero no nos van a dejar...

—Ya lo sé, es por eso que debemos hacerlo cuando no haya nadie para vernos.

—Eso será complicado. Siempre hay alguien en la casa de ______, su padre o su tía... incluso la misma ______.

—En algún momento dejarán la casa sola, ahí aprovecharemos para subir y cumplir nuestro sueño.

—Tu sueño, mi sueño es bañarme en una tina llena de queso... —comentó con una sonrisa.

—Al menos mis sueños son normales... Cómo sea, intentaré hablar con ______ para-...—la miró entrar—. ¡Oh, mira ahí esta!—se acercó a ella.

—... Mis sueños son normales. —dijo para si mismo.

—¡Hola ______! Cuanto tiempo. —la saludo con una gran sonrisa al acercarse.

La Casa del Árbol ✧ Ricky y Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora