《Treinta y Siete》

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Antes de comenzar el capítulo me gustaría decirles a las personas que se vieron afectadas por el temblor, que estoy con ustedes, en verdad.

Espero que todos estén bien💞






Acomode un mechón de cabello detrás de mi oreja, y mordi mi rojizo labio inferior con algo de nerviosismo.

--- ¿Entonces, que piensas cariño? ---cuestionó mí padre desde el otro lado de la línea, seguramente bebiendo un buen Vodka en Amsterdam.

Una severa punzada estallaba en mi pecho con cada latido, mientras que mi mente estallaba en preguntas.

Mi padre había llamado, como cada mes lo hace. Es extraño verlo en casa, pero que puedo decir, su trabajo es así.

Llamó diciendo que había conseguido un lugar para mi en una prestigiosa institución de Inglaterra, donde estudiaría lo que siempre quise. Pero eso estaba muy, muy lejos de aquí.

De inmediato había pensado en Jos, en cómo la noticia seguramente lo devastaria. Porque... realmente quería hacerlo. Estudiar en Inglaterra.

¿Porqué no hacerlo?

Quizás si... sólo un año.

--- ¿Aún estás ahí? ---rió un poco mi padre, con su gruesa voz.

Rápidamente trague salvia y toci un poco, aclarando mi garganta.

--- Si, lo siento. ---dije enseguida.

--- ¿Y? ¿Qué dices? ¿Estudiaras en Inglaterra? ---preguntó impaciente.

--- Yo... no estoy muy segura, digo me encantaría pero...

--- No quieres abandonar a tu querido amigo, Jos. ---inquirió, terminando lo que no podía lograr sacar de mi boca.

Amigo Jos, ahora recuerdo que mi padre aún no sabe nada sobre nosotros. Esto se vuelve más y más incómodo.

--- Si... ---solté en un pesado suspiro.

--- Escucha, cariño. No vas a perder a Jos, ¿Bien? Lo que te estoy diciendo va más allá de una amistad de la infancia.

Y lo que yo te estoy diciendo, dejó de ser sólo una amistad de la infancia.

--- Entiendo. ---dije rendida.--- Lo pensaré, ¿vale?

--- Esperó que decidas con sabiduría, princesa. Recuerda que las clases comienzan en dos meses. ---dijo mi padre.

--- Bien, lo pensaré. ---insistí, deseando finalizar la llamada pronto.

--- Cuídate, _______. Dile a tu madre que la amo. ---dijo, me despedí y entonces, pude colgar.

Pegué el móvil a mi pecho, cerrando los ojos, y tomando una enorme bocanada de aire.

¿Ahora que?

¿Debía dejar a Jos por mis estudios? Dios, dejar, esa palabra suena como la mismísima mierda.

Yo no dejaría a Jos, sólo... no lo vería por un tiempo, pero seguiríamos juntos... ¿Estamos juntos? Esto es confuso.

Mi mayor incógnita en este momento era si debía decírselo a Jos o no, quiero decir, quizás no me iría y así puedo ahorrarle el momento de sufrimiento. Pero si se lo digo... lo destrozaria, y estamos tan bien ahora. No quiero arruinar eso.

Supongo que con el tiempo, se lo diré, mientras tanto, agregare otro secreto a mi sucia conciencia.

--- Oye, castaña. ---me llamó Jos desde atrás y yo me volví para mirarle.--- ¿Aún quieres aprender a besar? Porque creo que podría conseguirte una lección gratis. ---dijo con una media sonrisa, mientras apoyaba su torso en la pared.

¿Cómo Aprender A Besar? © #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora