《Veinticinco》

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Jos

Uno, dos, tres, ¡Lanza!

La pelota golpeó la cesta, y justo cuando creí que estaba por encestar, ésta rebotó alejándose de mi objetivo.

Derecha, derecha, izquierda, esquiva, izquierda, ¡Quítate Forbes!, abajo, ¡Lanza!

La pelota golpeó el tablero. Y yo gruñi.

Una gota gorda resbaló por mi nariz. Mi rostro estaba empapado en sudor, algunos cabellos oscuros estaban pegados a mi rostro. Limpié mi cara con mi camiseta del equipo.

--- ¡Canela! ---gritó enfadado mi entrenador. Era la quinta vez que fallaba un tiro.

Me hizo una señal para que abandonará el juego y fuera con él. Maldeci por dentro.

Esto no podía empeorar.

--- ¿Qué pasa contigo, Miguel? ---comenzó y bufe agotado de sus sermones.

--- Nada, entrenador. ---mentí desinteresado. Era obvio que algo me pasaba, y mi problema tenia un nombre, _________.

--- ¿Nada? ---cuestionó con una sonrisa falsa.--- A la banca, pestañitas.

¿Dije que esto no podía empeorar? Bueno pues al parecer ¡Estaba muy equivocado!

Mi ceño se fruncio y mi boca se abrió de golpe, mostrando mi gran sorpresa.

--- ¡No puede hacer eso! ---exclame.

--- Claro que puedo, soy el entrenador. ---habló comenzando a alejarse.

--- ¡Pero mañana es el juego! ---exclame una vez más.

--- Y si sigues así, no jugaras. ---finalizó.

Entonces una enorme palabrota se escuchó por todo el gimnasio del Instituto.

Patee una pelota lejos de mi camino con gran furia.

De inmediato fui hasta las bancas metálicas y busque con desesperación mi botella con agua.

Aparece maldita. Ahí estás... ¡Estás vacía, maldita hija de...!

Arroje bruscamente la botella vacía lejos de mi y gruñi molesto. Mi día cada vez iba empeorando.

No podía concentrarme, sólo podía pensar en la maldita sanguijuela chupasangre de Logan. Él había ganado, tenía a _______ en sus manos.

De tan sólo imaginar a MI _______ besar a Logan, yo simplemente... ¡Agh! ¡Lo mataré!

Golpee mi mochila y la arroje lo más lejos posible de mi. Estaba como un loco. Y sin duda, estaba dispuesto a lanzar todo lo que se me atravesará por el camino.

--- Wow, tranquilizate Hulk.

Me volví para encontrarme con el mismo lindo par de ojos cafés con los que no dejaba de pensar. Su pequeña sonrisa me hizo sentir tan malditamente especial, que tuve que mirar hacia otro lado para evitar sonreír.

--- ¿No deberías estar practicando tus besos para mañana? ---pregunté molesto. ______ rodó los ojos.

--- Eres un idiota, pestañitas bonitas. ---se quejó la morena con una pequeña risita en el rostro.

¿Pestañitas bonitas? ¡No, de nuevo esa maldita sensación!

Tomé mi botella vacía y comencé a caminar, ignorando a la chica. Ella comenzó a seguirme, y eso de alguna forma me gustaba.

--- ¿Qué quieres? ---preguntó deteniendome de golpe, sentí como ______ chocaba torpemente contra mi espalda al no alcanzar a detenerse. Sonreí levemente.

¿Cómo Aprender A Besar? © #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora