Decisiones

Capítulo 9

Habían pasado dos semanas desde que Michael se había ido, no había contestado ninguna de mis llamadas, ni mensajes, nada. Había desaparecido completamente. 

Sólo lo vi en televisión, asistiendo a la premiere de su película, "Shame", sonriendo, posando como si nada hubiese pasado, y es que tal vez para el en realidad nada había pasado. 

Lloré un poco al ver su rostro sonriente en la televisión, por suerte las grabaciones de "The Avengers" finalmente habían terminado, y aún mejor, me habían envíado un contrato para cuatro películas más. 

-Victoria ¡te llegó un paquete! Y tienes visitas. 

Gritó Jennifer.

Me limpié las lágrimas antes de que ella entrara en mi habitación, acomodé un poco mi cabello en un intento de disimular el encierro y la falta de cuidado que había tenido con este en los últimos días. 

-Ya voy. 

Me limpié un poco la cara y salí, ahí estaba Tom, con una botella de vino y unos chocolates. 

-Hola. 

Dije con una sonrisa, el me sonrió, iluminando la habitación por completo y mi pecho también. En estas dos semanas él había estado conmigo todo el tiempo, ya fuera en el set escuchando a Feist y llorando por un largo rato, hasta viendo películas rómanticas en casa abrazados, hasta que al final yo comenzaba a llorar. 

-Hola. 

Respondió él, lo abracé con fuerza y el besó mi frente. 

-Hola Jenn. 

-Hola Tom, ten tu paquete. 

Me dio un sobre amarillo un poco pesado, y beso mi mejilla. 

-Gracias. 

-Tengo que irme o mi vuelo se irá. Victoria, sabes que no tienes por qué irte. 

-Lo sé, pero debo hacerlo. 

-Bien, de todos modos prometiste ir a la premiere de "The Hunger Games" conmigo. 

-Te veré ahí. 

-Te extrañaré. 

-Yo también

Nos abrazamos con fuerza y ella se fue. 

-¿Te vas?

Me pregunto el con un tono lleno de decepción. Asentí sin mirarlo. 

-Necesito estar sola, además, no sé que haré ahora. 

-¿No hay propuestas en puerta? 

-La verdad es que ni siquiera me he fijado. 

-Victoria esto no puede seguir así. 

Moví los hombros con un poco de indiferencia, ya habría tiempo después, siempre hay películas que hacer. 

Se sentó en el sofá y yo me recosté sobre su pecho mientras comía chocolate. 

-¿Y tú qué harás? 

-Pues, tengo unos cuantos proyectos. 

-Habláme de ellos. 

Comenzó a hablar de las películas que estaba a punto de hacer, y de nuevo sentí su pasión hacia todo esto, una pasión un tanto contagiosa que me hizo recordar porque me había convertido en actriz.

-¿Y a dónde piensas mudarte? 

-En realidad aún no lo sé. 

Comenzó a hacer círculos en mis manos, sus dedos se sentían suaves en mi piel.

-Yo... volveré a Inglaterra en una semana. 

-¿QUÉ? 

Me levanté de golpe ¿Qué tenía de bueno Inglaterra? ¿La reina Isabel? ¿Kate Moss? 

-Aún falta una semana, y volveré, para promocionar nuestra película, sólo me iré un mes, y yo...

-Bien Tom, te veré en un mes entonces. 

Caminé hasta mi habitación y cerré de un portazo. Sabía que mi reacción era irracional, pero no pude evitarlo.

-Victoria. 

Lo escuche decir al otro lado de la puerta, intenté no llorar pero las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos. En estos últimos días, se había convertido en mi lugar seguro, mi persona favorita. Y ahora sentía que lo perdería.

-Victoria, lo último que quiero es hacerte daño, yo quería... que vinieras a Inglaterra conmigo. 

Abrí la puerta y el se cayó, me agaché para ayudarlo a levantarse. 

-Lo siento ¿qué dijiste?

Pregunté aún llorando

-Dije que quiero que vengas a Inglaterra a estar conmigo, si tu lo deseas. 

Me limpió las lágrimas del rostro.

-Pero yo...

-Como amigos, en lo que consigues otro trabajo y un lugar para vivir, tómalo como unas vacaciones, sólo un mes, hasta que tengamos que volver para la promoción. 

Lo abracé con fuerza y el me abrazó. 

-¿Tomo eso como un sí? 

Asentí aún con lágrimas en los ojos. 

-Sí. 

-Nos vamos a Inglaterra entonces.