Decisiones

Capítulo 22.

Respire profundo mientras me veía en el espejo con el hermoso vestido color blanco que tenía puesto, quería parecer una princesa nórdica y parecía que lo había logrado, me mire de nuevo en el espejo, sonreí sin poder creer lo que estaba a punto de pasar. 

-Te ves... yo... wow.

Dijo Tom detrás de mi, mientras intentaba acomodarse la corbata, sonreí aún más y me acerque a él. 

-Acepto ese cumplido.

Dije mientras le acomodaba la corbata. 

Me tomo de la cintura y beso mi cuello hasta llegar a mis labios, me dio un beso tierno y salió de la habitación para hablar con Luke, Anne entró detrás de él.

-Vicky, cariño, no puedo creerlo ¡Mira en donde estamos! 

-¡Lo sé! 

La abracé con fuerza, estaba muy agradecida por todo lo que había hecho por mi, me miro y note algo extraño en su mirada.

-¿Qué pasa Anne? 

Miro hacia la puerta y se apresuro a cerrarla. 

-¿Puedo hablarte con la verdad, Victoria? 

-Pues claro, para eso te pago. 

Anne rio un poco. 

-No, no, como amigas. 

Asentí confundida.

-Me gustaba más la pareja que hacías con Michael 

-¡ANNE!

Grite y ella me tapo la boca. 

-Lo siento cariño, sé que Tom ha sido muy lindo contigo y que en cierta manera lo amas...

-No Anne, no en cierta manera, yo amo a Tom. 

-Lo sé, pero cuando estas con Tom, eres tan tímida, tan fragil, como si te pareciera bien estar detrás de él, no a su lado.

-Pero... 

-Y recuerdo bien el día de tu sesión de fotos, cuando bailabas para él, Dios Victoria, había ahí una conexión tan fuerte que calentaba por completo la habitación y cuando estas con Michael eres...

-¿Listas chicas? 

Preguntó Tom del otro lado de la puerta. 

-Hablamos de esto más tarde, primero el trabajo. 

¿Cuando estaba con Michael era como? ¿CÓMO? Me pregunté todo el trayecto del hotel hasta la alfombra roja

-¿Lista?

Pregunto Tom mientras yo veía por la ventana y escuchaba a la multitud gritando desesperada, asentí levemente y sentí su mano tomar la mía con fuerza. 

-Gracias. 

Dije en voz baja, sentía que tenía que agradecerle por calmar mis nervios de aquella manera, me sonrio, tomo mi rostro en sus manos, froto mi nariz con la suya y me dio un beso en la frente. ¿Cómo no volverme frágil ante aquellas muestras de afecto?

-Vamos. 

La puerta del auto se abrió y escuché la locura total. Sentí el flash de las cámaras directo en mi rostro y de inmediato Tom me atrajo hacia él para que nos tomaran fotos juntos, sentir su mano en mi cintura me hizo sonreír de manera más verdadera, recorrimos toda la alfombra juntos hasta que llego la hora en la que debían decir el nombre de cada uno. 

Estaba ahí, parada esperando a que dijeran mi nombre y no podía dejar de mover el pie nerviosa, cuando mencionaron el nombre de Tom pude escuchar a la gente volverse completamente loca, y sonreí, aquél era el hombre que me daba besos cada mañana y era lo primero que veía al despertar -claro, cuando ninguno de los dos estabamos de viaje-. De pronto un nerviosismo más grande ataco mi cuerpo. 

-¿Qué tal que nadie se emociona o regresa a verme cuando digan mi nombre? 

Le pregunte a Chris E. que estaba justo detrás de mi. 

-¿Estas loca? Ya eres una de nosotros, claro que gritaran en cuanto digan tu nombre. 

Dijeron el nombre de Chris y gritaron de nuevo, finalmente era mi turno. 

-¡Victoria Lardner! 

Escuche y salí hacia la alfombra, escuche gritos, sonreí de puro orgullo y felicidad, levante la mano para saludar a la gente, mire en dirección a Chris quien me vio y levanto su caracteristica ceja, comenzó a aplaudir con una expresión de te lo dije en el rostro. Me sentía en casa, sentía que al fin había encontrado el lugar al que pertenecía, sabía que aquél era el lugar en donde debía estar. En las sesiones de fotos quede justo en medio de Chris E. y Chris H. por lo que al sentir sus enormes brazos sobre mis hombros sentí que cargaba una tonelada de músculos en cada hombro. 

-¡Dios, ya dejen de comer tanto! 

Ambos rieron. 

-No queremos que Tom se ponga celoso si ponemos las manos en tu cintura, puede que comience a besarte en público otra vez, y no queremos que nos roben la atención. 

Dijo Chris H. y Chris E, asintió. 

-Tontos. 

Bufé. 

-Los fans los esperan de aquél lado. 

Asentí y me acerqué hasta ellos tímidamente, cuando de pronto comenzaron a gritar mi nombre, wuo, no podía creer que todos ellos supieran mi nombre y tuvieran fotografías con mi cara en ellas. Firme la mayor cantidad de autografos que pude con aquella firma que había practicado durante meses. Al finalizar sentía la muñeca algo entumecida. 

Cuando finalmente entramos a la sala de cine y la pelicula comenzo, recargue la cabeza sobre el hombro de Tom, veíamos la película y por primera vez no me había perdido en el rostro de Tom porque estaba demasiado entusiasmada viendo el mío más de 5 minutos en la pantalla. La película termino y todos se pusieron de pie aplaudiendo. 

-¡Ya es hora de celebrar!

Grito Robert. ¡No podía estar más de acuerdo! Necesitaba de una noche más con los Avengers para olvidar todo lo que se refiriera a Michael Fassbender.