♚Reyes y Peones♔ #RP2

♚11♔

Al abrir la pesada puerta de madera me doy cuenta de que ha tenido que pasar mucho tiempo desde la última vez que alguien estuvo aquí. Una leve capa de polvo flota en el aire y la madera cruje bajo nuestros pies cuando pasamos al interior. Los recuerdos se agolpan en mi cabeza y comienzo a marearme.

Resiste Alex.

Trevor cierra la puerta y se quita la chaqueta de cuero.

-Subamos, el piso de arriba estará mejor.

Le obedezco y comienzo a subir las escaleras, con cada pisada una pequeña nube de polvo se levanta. Me siento aún peor cuando veo la habitación, parece que hayan pasado siglos cuando en realidad solo han sido unos pocos meses.

Trevor lanza su chaqueta a la cama y se sienta en el suelo con la espalda contra la pared.

Le imito y todo queda en silencio, es como la paz antes de la tormenta.

-No sé que decir -confieso, he estado esperando este momento tanto tiempo que ahora me he quedado en blanco.

Genial.

-Bueno, yo no voy a empezar porque seguro que la cago -dice en un tono demasiado serio. El moratón de su nariz se sigue notando y siento un nudo en la garganta.

¿Qué te pasa Alex? ¡Tu le odias!

Bajo la vista a las cicatrices de mis muñecas que me causaron las esposas durante el secuestro para recordármelo.

-Está bien -suspiro -Necesito respuestas.

-Pregunta.

Me dejo llevar por los recuerdos del pasado y solo consigo marearme aún más pero antes de que pueda controlarlo mis labios se mueven solos.

-¿Por qué viniste a rescatarme?

Mi pregunta parece sorprenderle y se echa hacia atrás.

-¿Qué clase de pregunta es esa? Alex, necesitaba volverte a ver, no soportaba la idea de que te hicieran daño y la culpa me mataba.

-O sea que admites que fue tu culpa -enarco una ceja.

Eso parece molestarle.

-Si.

Ahora mis labios parecen hablar solos.

-¿Por qué no me dijiste que el Rey te amenazaba? Te habías reunido con él y te advirtió sobre lo que pasaría si yo sabía demasiado.

Aquí vamos.

Trevor se inclina hacia delante, mirándome fijamente a los ojos y al ver la furia en ellos un escalofrío me recorre.

-Tu también me mentiste -contesta en un tono más tranquilo de lo que me esperaba -. No me contaste que te amenazaban, porque entonces hubiera hecho algo para ayudarte ¡Pero no! -levanta los brazos -¡Alex puede con todo ella sola porque es la mejor, y si la caga, que se jodan los demás!

Me levanto del suelo totalmente herida y Trevor hace lo mismo. Su altura ya no me intimida y el valor me consume.

-¿Qué se jodan los demás? ¡Tu no estuviste encerrado en un cuarto de mierda durante semanas! -le muestro las cicatrices de las muñecas -Tu no te sentiste traicionado -añado en un tono más bajo.

Para mi sorpresa no tengo ganas de llorar solo quiero acabar ya con esto y dejar atrás mi pasado con Trevor.

-Y si. Si te quieres convencer de que todo esto también fue culpa mía, pues bien, lo admito, fue mi culpa por no avisarte de que me estaban amenazando pero no quería preocuparte con algo que seguramente era falso, si tan solo hubiese sabido que el Rey te había amenazado a ti también entonces no te lo hubiese ocultado -relajo la tensión de mis hombros cuando acabo.