Una ganadora, cien oportunidades de ganar. Siete billones de personas en el mundo, del cual 15% competirá contra ti. Beyond the scene. Bangtan ha publicado un sorteo mediante su cuenta de twitter, una fan de cualquier lado del mundo podrá vivir con...
Después de esa noche tan hermosa nos sentamos sobre el pasto admirando las estrellas y al parecer me quedé dormida pues cuando me despertaron ya me encontraba sobre mi cama con un sonriente JungKook a mi lado.
-¡Buenos días bestia durmiente!.
-Es "bella" Jeon.
-No, no es así, yo me desperté hace media hora.
-Temo decirte JungKookie que te han mentido durante mucho tiempo, eres más feo que un dibujo de suga..- agaché mi rostro en señal solemne a lo que él hizo un puchero.
-Eres malvada ____.- colocó su mano derecha sobre su corazón haciendo un gesto de dolor a lo que yo reí.
-Sabes que miento JungKook~ah, dime ¿Qué tengo que ponerme hoy?.
-Algo sencillo, esos pantalones con esos tenis y aquella blusa -Dijo mientras señalaba la ya vacía cama de Tae- la chaqueta está sobre la manija de la puerta y ponte un poco de maquillaje, te hace ver muchísimo mas linda- se acercó a la puerta y antes de salir volteó - y planchaté de nuevo tu cabello linda. -me giñó un ojo y salió.
Me paré con una sonrisa en la cara, y miré con detenimiento la ropa: pantalones negros rasgados, blusa de manga corta a rayas y unos adidas, la chaqueta era de mezclilla, nada del otro mundo.
Hice lo mismo de las veces anteriores, me duché vestí y peiné, solo agregando el maquillaje con el cual me tardé más pues no quería que mis pestañas parecieran patas de arañas como las típicas chicas que se ponen un rímel por cada ojo.
Al salir me encontré con Tae sentado en el sofá tomándose fotos con caras raras, no pude evitar reír llamando su atención, me sonrió y se paró de un brinco.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
–Estás hermosa _____.
–Tu estás muy guapo Tae Tae.
–¡Subamos una actualización juntos a Twitter!.– desbloqueó su móvil y abrió snow para tomarnos una foto con caras raras, mientras nos reíamos por las caras del otro.
Después salimos corriendo por que según Tae se hacia tarde para lo que tenía planeado, incluso cuando estábamos dentro del auto tiró las llaves de la prisa.
El camino fue rápido, duró poco más de cuarenta minutos. Mi sorpresa fue notoria al ver las luces que adornaban la atmósfera del lugar, el sonido de los niños riendo y la típica musica de feria, era increíble. Sonreí como niña y miré a Tae con ansía, incluso se me hizo una eternidad el tiempo en que tardo en estacionarse. Fui la primera en salir, brincaba en mi lugar de la emoción y una vez que puso el seguro lo tomé de la mano llevándolo dentro.
