Curse || editando.

Capítulo 17: No más mentiras.

En el momento en el que esas palabras salieron de su boca, quede impactada. Quería golpearlo, y mandarlo muy lejos, pero al mismo tiempo lo quería a lado de mí. Sus labios sabian tan dulces, tan... suaves.

Cerre los ojos, nuestras frentes seguían juntas.

—¿Qué me has hecho bambie?— Murmuró.

Bufé.

—No te atrevas a hacerme esto Lodge.— Hablé mientras abria los ojos y me encontraba con los de él. Mirándome. —No te atrevas decirme que ahora te gusto, porque te juro que...—

Me interrumpió, cuando una sonrisita de lado se posaba en su rostro. Apretó levemente mi cintura impidiendo que me alejara de él.

—¿Qué me haras bambie?— Murmuró con voz ronca. Oh no. Como siempre, mis palabras las tomó con otro sentido.

Pusé las palmas de las manos sobre su pecho, y me separé levemente de él.

—No me refería a eso imbécil.— Murmuré.

—Yo sí bambie.—

Y ahi iba otra vez, su actitud narcisita y egocentrica. Y no se porqué me sorpendia de su actitud, con Trevor siempre era así: En un segundo, estaba en la cima de todo, el me hacía volar, y al otro, caía de vuelta a la realidad provocando que el impacto causara en mi alguna clase de dolor casi instantaneo y mas o menos permanente. Trevor... Mi mas grande delirio, y mi veneno personal.

—¿Sabes?— Habló. —Siempre quise callarte con un beso Lena.—

Traté que la sorpresa no se reflejara en mi rostro. Claro, eso era. Me estaba impactando que Trevor fuera tan... dulce, sólo quería hacerme callar con un estúpido beso. Me separe de él, tratando de recobrar toda la dignidad posible, mientras pensaba una excusa que darle sobre el beso.

—Para tú información Trevor, no me callaste con un beso.— Hice comillas en el aire en la palabra callaste. —Lo que paso fue que... Uhm, me tomaste desprevenida, eso fue todo.— Traté de sonar segura.

Él sólo dejó salir una risa burlona.

— ¿Por qué mierda no puedes ser una chica normal?—Preguntó. —Simplemente limitate a darme las gracias por salvarte del jodido Max y besáme de nuevo.—

Me crucé de brazos a modo de respuesta y alcé una ceja, mirándolo.

—No me digas que hacer ¿Oiste? Y si sólo quieres que te bese por salvarme de Max, estas realmente mal. Mejor ve y consiguete a alguien para que lo haga, porque yo no.— Terminé mi discursó mientras ponía un mechon suelto detras de mi oreja. —Y ahora, sólo quiero que te vayas y me dejes en paz, no quiero ir a la fiesta.— Sí, lo acepto, había sonado un poco chillón y malcriado no querer ir a la fiesta, pero era completamente la verdad, y con Trevor no se podía lidiar politicámente.

—Lástima, te vez tan bien con ese vestido.— Me alagó mientras paseaba su mirada por todo mi cuerpo, lo cual hizó que me sonrojara ligeramente. —Vamos a la fiesta bambie. ¿Tú crees que conduje hasta aquí para que declinaras la invitación?—

Pusé los ojos en blanco.

—Vives justo en frente tonto.— Señalé su casa.

Él dejo salir una risa tonta.

—Claro que sé eso bambie. Esta casa no la uso mucho, uso más la que compre al sur de la ciudad.— Me explicó. —Si no quieres ír a la fiesta bambie, vamos a cenar, hay un lugar al cual quiero llevarte.—

Arrugué el ceño con confusión mientras me pensaba su oferta de ír a cenar

—Entonces ¿para que compraste esta casa si no la usas?"