Sign (GOT7 - Markjin)

Capítulo 25

Capítulo 25

— ¡Te dije que no quiero hablar de eso! — Grito Mark desde la habitación de Jinyoung.

— ¡Debemos hablar de ello! ¡No podemos dejar las cosas así! — Respondió el pelinegro.

— ¡¿Para qué?! ¡Ya se lo que me dirás! ¡Tú no me amas!

— ¡Mierda Mark! ¡No me vengas con eso!

— Solo eres capaz de decirme que me amas mientras te la estoy chupando...

— ¡¿Qué?! Mark...

— No me amas Jinyoung...

— No digas eso...

Entonces Mark lo tomó por los hombros y lo arrojó a la cama, se colocó sobre él y creo un vaivén con sus caderas sobre la entre pierna del menor.

— Mark...

— Solo amas tener sexo...

— Cualquiera ama tener sexo... —Ahora molesto por lo que hacía.

— ¡Eres un imbécil Jinyoung! — Se acercó y beso sus labios desesperadamente. Jinyoung contrariado, correspondió al beso.

— Mark... — Repite su nombre con la voz ronca, llevando sus manos a su cintura acariciándola por debajo de su camiseta. El mayor vuelve el movimiento más rápido y lleva las manos a su pantalón para desabrocharlo y bajarlo, tomando el miembro de Jinyoung por encima de la delgada tela de su ropa interior y comienza a acariciarlo.

— Te odio... — Muerde con fuerza su labio inferior y sus ojos se llenan de lágrimas.

— ¿Por qué haces esto? — Liberando un pequeño gemido.

— Porque te necesito Jinyoung, y si no puedes amarme, debo conseguir lo que quiero de alguna forma... — Mete la mano debajo del bóxer y lo masturba lentamente.

— Mark... —Cierra los ojos.

— Deja de decir mi nombre pedazo de idiota... —Pega su frente a la de él y suelta un bajo sollozo.

— No llores por favor... —Toma su rostro y limpia sus lágrimas. — Sabes que detesto verte llorar.

— Tu no me quieres...

— Claro que te quiero Mark...

— ¡Mientes! —Lo masturba con más rapidez.

— Ahh... — Se arquea y lo abraza por el cuello acercándolo a su cuerpo. —No... N-No hagamos esto ahora... Hay que hablar...

El Angelino se separa de Jinyoung y se desliza hacia abajo.

— Mark...

— Detenme si no quieres que lo haga... Detenme si no es solo por sexo que me quieres... —Baja las prendas hasta la mitad de su muslo y libera la erección del menor, tomándola con una mano, mientras se acerca a probarla. El pelinegro ahogo un gemido y cerró los ojos, disfrutando de esa boca que le regalaba tanto placer.

— Mierda Mark... — Gime y acaricia su cabello.

— ¡Lo sabía! — Muerde la punta del pene de Jinyoung y se separa por completo. El menor pega un gritito de dolor y lleva ambas manos a su miembro adolorido.

— ¡¿Por qué hiciste eso?!

— ¡Solo quieres que te la chupe! — Se levanta acomodando su ropa. — Consíguete tu propia puta... — Sale de la habitación cabreado.

Jinyoung hecho un verdadero desastre, sintiendo dolor en su pene, no solo porque Mark le había abandonado en plena tarea, sino porque también tenía una quijada fuerte. Por supuesto, lo que más le molestaba a Jinyoung, no era el hecho de que Mark mordiera su parte sensible, sino que se cansara del juego que él mismo inicio, después de que le advirtiera como eran las cosas, porque, aunque Jinyoung pudiera llegar a sentir algo por su hyung, este le dijo, que, si era sexo lo que quería, sexo era lo que le daría, sin involucrar sentimientos de su parte, a menos que estuviese completamente convencido de ello.