Las Crónicas de Narnia: La Reina Maldita.

Capitulo 19

“Tienes mi corazon”

—Los últimos ataques han sido en esta región— dije señalando una parte en el mapa que estaba extendido sobre la mesa. Estaba rodeada de los reyes y Caspian a mi lado me pedía que le señalé los puntos con más ataques. —Pero los primeros han sido en esta— dije señalando otra región casi en la otra punta del mapa. —No hay un patrón, no son todos en mismo lugar — explique. Peter se llevó una mano a la barbilla.

—¿Han revisado los territorios entre medio de estos dos puntos?— preguntó. Asentí con la cabeza.

—Si, pero no hay nada, al menos nada que los lobos hayan podido rastrear— murmure.

—Aun así deberiamos hacer una expedición— dijo Edmund mientras tomaba un sorbo de jugo y miraba el mapa. —Revisar está zona a pie— dijo señalando.

Susan asintio secundandolo. —Perfecto, iremos nosotros mañana— dijo Peter mirando a los reyes Caspian y Edmund. Intercambié miradas irritadas con Lucy.

Rei —¿Disculpen? ¿Acaso nosotras estamos pintadas?— pregunté con enfado. Caspian clavo su mirada en mi mientras Peter hablaba.

—No, pero creo que deberíamos ir nosotros, ya que somos fuertes y sabemos pelear, además no quiero poner en riesgo a mis hermanas— dijo.

Suspiré —Entiendo lo de tus hermanas, pero quien dijo que yo no se pelear, ¿Eh? — pregunté. —¿Quien crees que los ayudo a ganar contra Jadis en los terrenos bajos? ¿Y contra su pueblo?— pregunté señalando con la cabeza a Caspian. Cuando este iba a hablar le interrumpi. —Mañana partiremos, pero ahora preparensen para ir a entrenar — murmure dejando la sala y yendo a cambiarme.

¿Así que no sabía pelear? Vamos a ver quien no sabe.

Omnisciente

La reina rubia salió del salón dejando a unos reyes impresionados atrás, y una reina Lucy que solo sonreí burlonamente. —Esperemos que no les dé una paliza — dijo dirigiéndose a Caspian y Peter. El pelinegro sonrió levemente y el rubio solo rodo los ojos.

—¿Cómo Amina podría darme una paliza? Por favor Lucy. — murmuró. —Mejor vayan a cambiarse—dijo antes de salir del lugar. Caspian río

—¿Y tú crees? — el rey le pregunto a Susan —¿Nos va a dar una paliza?— pregunto. Susan sonrió.

—No lo sé, esperemos que no. — murmuró por lo bajo y salió de allí junto con Lucy, la cual,no paraba de reírse.

Los dos pelinegros que quedaban en la sala intercambiaron miradas y el más chico hablo —Definitivamente va a darnos una paliza— murmuró causando la risa del mayor.

††

Guly dirigió a los reyes a las afueras del castillo, donde se extendía un claro que raramente tenía césped, a pesar del clima. Todos estaban con ropa de entrenamiento. Amina vio como se dirigían hacia ella, y arreglo un poco su uniforme de combate. No tenía cosas de pesadas ni nada en el, solo una pechera de lo que parecía ser cuero duro, unas mallas flexibles, botas y el pelo atado, además de una camiseta debajo de la pechera.

—¿No te pondrás protección?— pregunto Edmund cuando llego a su lado, pegándose en la pechera de metal que el traía puesta. La reina sonrio

—Ya la tengo puesta— murmuró. Peter negó con la cabeza y con una media sonrisa agarró una espada de las que había allí.

—Bueno, ¿Con que quieren empezar?— pregunto amina. Peter balanceo la espada entre sus dedos mientras Edmund miraba a Caspian elegir una

—Nosotros practicaremos combate, tú puedes ir con las chicas a que te enseñen a usar el arco y los cuchillos— murmuró Peter. Un abismo de burla aparecio en su sonrisa.

—Ire más tarde, ya sé hacer eso, pero Susan podría darme algunos consejos— dijo la reina —Entrenare con ustedes— murmuró agarrando su espada.

Caspian arqueo una ceja viendo de reojo a Peter, se pondría interesante. — ¿En serio? No lo creo, podrías salir lastimada, nosotros no tenemos piedad aunque seas una chica — dijo este. Amina sonrió.

—Cada vez me sorprende más tu machismo, como sea. ¿Puedo practicar contigo primero Caspian?— pregunto al rey pelinegro. Este asintió algo sorprendido.

Ambos se pararon uno frente al otro, poniendo en posición de defensa, y luego de una pequeña cuenta, chocaron espadas. Caspian se sorprendió ante la fuerza con que la reina manejaba la espada, así que el siguiente golpe lo lanzó con más fuerza. Estocada tras estocada, golpe tras golpe, hasta que en un medio giro y un golpe la reina logro derribar la espada del rey. Amina sonrió y Caspian la miro sorprendido para luego hacer una pequeña reverencia. —Buenos movimientos— murmuró el joven. Lucy y Susan aplaudieron. Peter trago saliva.

—Gracias— respondio amina luego de tomar agua. —¿Quien sigue?— pregunto mirando a Edmund, este levantó los brazos en señal de derrota.

—Prefiero no pelear. Soldado que no pelea sirve para otra guerra— murmuró riendo levemente. Amina le sonrió. Peter se puso delante de ella.

—Vamos. Te aviso que no seré facil— dijo el rubio acomodando su pelo y poniéndose en posición de ataque. Amina sonrió burlona.

—no te pedí que lo fueras— murmuró para lanzar el primer ataque con un rey desprevenido. —Deberias estar atento en todo momento Pet— dijo la reina. Peter se distrajo un segundo, ¿Cómo le había dicho?
La reina le pego con la mango de la espada en el estómago, pero el se recompuso lanzando otros golpes. Parecian que iban a matarse.

—No estoy distraído— murmuró el rey mientas hacia fuerza para lanzar otro golpe. La reina se desestabilizo por un momento, casi cayendo al piso, pero aprovecho esto para enredar sus piernas a las de Peter y obligarlo a caer.

Enseguida lo inmovilizo y puso su espada muy cerca de su cuello. Peter podía ver muy de cerca la belleza de la joven y la gota de sudor que bajaba por su frente. Estaba agitados pero sonrientes —Jaque mate— dijo en un susurro la reina.

Peter solo río, aunque tenía el ego un poco herido. Una chica, una chica que era Amina acababa de ganarle.