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–claro que sí frankie– gerard lo besó y ambos durmieron acurrucados y con una visible sonrisa en los labios.

–claro que sí frankie– gerard lo besó y ambos durmieron acurrucados y con una visible sonrisa en los labios

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3 días después

–frank, hablé con mi mamá, ella quiere tener una cena conmigo y mikey hoy, y me dijo que lleve a bert, y le dije que ya no hay bert, e-entonces me dijo que te t-traiga a ti, mi nuevo novio.

frank no pudo evitar poner una sonrisa muy boba. miró a su novio que estaba sentado al frente suyo en la mesa.
era sábado por la mañana y estaban desayunando.

–e-eh, está b-bien– frank tenía miedo de conocer a la familia de su novio.

–ah y, frankie...

–¿si, bebé?

–¿me pasas la mostaza?–gerard sonrió, sus pequeños dientes le dieron tanta ternura a frank que se levantó para pasarle la mostaza. –¿y las uvas por favor?

frank miró a gerard extrañado.

–hey, sólo estoy complaciendo al bebé.

entonces frank rió y le pasó la mostaza.

//

–¿frank, me traes yogurt?

–gerard, almorzamos hace cuarenta minutos.

gerard bajó el volumen de la televisión, y jaló la manta que tenían ambos sobre ellos para que sólo él la disfrute.

–a ver señorito francis anthony thomas iero priccolo, tú no me vas a decir A MÍ– gerard gritó esa parte– cuando como y cuando no, ¿entendes? estoy llevando un ENGENDRO– de nuevo gritó– dentro mío que salió de TUS– ya saben, gritos– PELOTAS, así que a mí no me vas a decir que RECIÉN COMIMOS porque ya lo sé.

frank contó hasta diez para no enojarse, y para su suerte, funcionó.
se paró y fue hasta la cocina, sacó un yogurt y se lo llevó con mucho amor.
se volvió a sentar a su lado y esta vez —después de que le entregó el yogurt— gerard compartió la manta.
el menor se empezó a acercar un poco.

–¿sabes qué? el bebé– gerard decía, mientras le metía la mano dentro de la camisa y acercaba sus labios a su cuello. –me desordena las hormonas, mi amor.

gerard empezó a bajar su mano hasta que llegó donde empezaba su pantalón provocando que frank de un pequeño jadeo.

–m-mi amor, creo que no es el momento adecuado.

una vez frank dijo eso, gerard le dio la espalda y empezó a llorar.

–no mi amor, no llores.

–¿es porque estoy hinchado, no? es porque ahora tengo pancita que antes no tenía, eh?

frank abrazó a gerard por detrás, le parecía tan tierno.

–bebé, simplemente me parece que no es el momento adecuado, tenemos que ir donde tu mamá en cuarenta minutos.

–como si fuéramos a tardar más de veinte– frank rió un poco.

–vamos mi amor, quiero dar una buena impresión. debo bañarme. no quiero dejarte sólo– frank se empezó a levantar.

–puedo bañarme contigo– gerard se paró y trató de poner una cara sexy, pero no le salió; porque al pararse tan rápido le dio náuseas y corrió al baño a vomitar.

frank corrió tras él y le sobó la espalda mientras el pelirrojo vomitaba.

–tus encantos son poderosos, way.

y gerard lo pateó.
y después de que frank se sobó, sonrió, lo quería mucho.

No se emocionen, estoy de vacaciones así que tengo tiempo de actualizar, pero desde la próxima semana acaba :(.
Gracias por leer

xovcky.

boss; frerardDonde viven las historias. Descúbrelo ahora