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La impronta estival se esfumó gradualmente por las incesantes lluvias que arreciaban en la ciudad. Pero el clima era húmedo y pesado, aún se podía dormir con el aire acondicionado encendido. La señora Kim tampoco cambió el menú en la cena, siempre era arroz con guarnición o sopa picante, o fideos fríos.

Mingyu se enteró que Jihoon salió de la clínica una semana después que él haya ido a visitarle, Joshua le contó que iban a organizar una fiesta de bienvenida y preguntó si quería ir. Trató de no mencionar el hecho de que odiaba las fiestas, en principio; luego rechazó la invitación, alegando que le dolía el estómago. Además, la fiesta seguro iba a ser en el armario de Jihoon o algo así, era incapaz de imaginarlo.

Por supuesto, su hermano incisivo y meticuloso, no pudo ser engañado fácilmente. Pero lo dejó pasar.

Mingyu se deshizo de los dibujos de Jihoon y los Beatles (ésos estaban casi siempre apilados en su escritorio). Cortó el hilo que conectaba su departamento con el del otro edificio. Su ventana permanecía cerrada todo el día y él sólo investigaba asuntos de arquitectura en Internet.

Pensó en volver a la escuela.

No sería extraño hacerlo, al menos el último año. Quizá conozca gente nueva y tenga experiencias distintas, era mejor plan que quedarse en casa a lamentarse. Además, allí dentro. Su habitación, su armario, su ventana, su sala, las barras laterales, hasta el más insondable rincón le recordaba a él.

Comenzó el régimen impuesto por el especialista. Si podía aguantar dos años de rehabilitación y levantarse para comenzar la Universidad en pie, cumpliría uno de sus objetivos.

-¿Por qué no quieres hablar por teléfono con Jihoon?

Joshua se sentó al pie de su cama y le lanzó una almohada para que le preste atención. Mingyu leía un comic en ése momento, por lo que no le oyó llegar.

-No tengo ganas...- Respondió, continuando su lectura.

-¿Es porque Seokmin te gritó el día que vino aquí? Él sólo estaba preocupado por su hermano mayor, nunca antes se escapó. Pero tú le caes bien, ¿sabes? A Seokmin...

Mingyu todavía tenía su cara tras la revista pero éso último le llamó la atención.
-¿Le caigo bien?

-Pues... eres mi hermano. Además, Jihoon le habla mucho de ti y no cree que seas malo... Aunque ahora, no está muy feliz. Jihoon quiere hablar contigo y pareciera que lo evitas...

-Mh...

Joshua se asomó por encima de la revista y su hermano tuvo que mirarle.- Te gusta Jihoon... ¿Es éso? ¿Crees que no le gustas y te da vergüenza el rechazo?

-No.

-¿No te gusta?

-Me gusta.- Admitió Mingyu. Dejó la revista sobre su mesita de noche y enfrentó al mayor con la verdad.- Pero... Yo descubrí que Jihoon... hizo algo que no puedo olvidar.

-¿Qué hizo?

Mingyu sacudió la cabeza y se miró las manos. Sintió la humedad quemar tras sus pestañas.
-Él me arruinó la vida...

Sol Blanco [JiGyu/GyuZi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora