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-Daré tutorías de Matemática a un estudiante de segundo año que vive en el edificio de junto...- Anunció Joshua durante la cena el lunes.- Su familia se trasladó hace poco. Cuesta mucho adaptarse al ritmo y exigencia del Instituto...

-¿Nuevos vecinos?- Preguntó su padre.- No me enteré de ello.

Mingyu levantó la cabeza de su bol de arroz y presta atención por primera vez en mucho a la charla. Si se trataba de alguien que se mudó reciéntemente, ¿podría ser?

-Yo tampoco.- Respondió Joshua, cada vez más emocionado.- Y es increíble, ¡finalmente tendré un alumno!

-No alardees, Jisoo...- Le reprende su madre.- El chico necesita tu ayuda y es natural que te hayan seleccionado, tu nombre está en la lista de tutores hace meses... Deberías agradecer al profesor Cha que te tuvo en cuenta.

-¿Darás clases aquí?

Joshua miró a Mingyu de reojo antes de contestarle a su padre.- Bueno... No lo se... Quizá una cafetería abierta a las seis, ¡o la biblioteca!

-No tengo problema.- Dijo Mingyu. Todos los que estaban sentados a la mesa dejaron de comer y le vieron extrañados. Hacía bastante que no participaba activamente en las conversaciones.- Puede venir aquí, puedes darle clases aquí... Yo estaré en mi habitación, como siempre.

-Bueno... ¡Genial!- Joshua palmea su espalda con una sonrisa.- ¡Me voy a ahorrar dinero gracias a ti!

Las clases de tutorías iban a empezar ése miércoles a las 6 de la tarde, sin embargo, Sol Blanco no lo mencionó en sus recientes mensajes. Hablaba como siempre de sus sueños, del futuro, de los miedos y de lo que le hacía feliz.

¿Más de un vecino se mudó recientemente al edificio de junto? ¿Era o no era Sol Blanco el estudiante de las tutorías? ¿Planeaba aparecerse en su casa de sopetón sin avisarle? ¿Y si preguntaba acerca de él a Joshua?

-Hey, ¡qué bien se te da dibujar rostros!

La mañana del miércoles, Mingyu preparaba un dibujo para Sol Blanco frente a su escritorio, se lo regalaría en cuanto comience a tocar el violín. Estaba tan concentrado en su tarea que no notó la llegada de su entrometido hermano.

-¿Por qué diablos entras en mi habitación sin golpear, Joshua?- Mingyu tapó el dibujo con sus brazos lo más que pudo.

-Déjame verlo, ¿por favor?- Pidió el chico, haciendo morros.- Es un dibujo increíble... ¿Son personas?

Mingyu echó aire por la boca y habla más calmado.- The Beatles...- Susurró.

-¿Tey Becker?

-Los Beatles, idiota...- Mingyu aparta los brazos y le muestra el dibujo, donde aparecían los cuatro integrantes originales.- Es la banda inglesa más legendaria que ha existido nunca...

-¿Y desde cuando te gusta a ti la música inglesa?

En realidad, a Mingyu nunca le interesó mucho la música. Si otros tipos de arte, como el dibujo, la danza y la literatura. Pero Sol Blanco sólo tocaba canciones de The Beatles con el violín, era fanático de la banda, por éso pensó en dibujar algo especial y mandárselo en un mensaje.

-¿Acaso no me puede gustar de pronto una cosa nueva sin motivo alguno?

-Algo ha cambiado en ti, ¿verdad?- Señala el muchacho, con una cálida sonrisa.- Aunque es cierto que no hablas como antes, tus ojos están más "vivos"...

-¿Más vivos?

Su hermano le revolvió el cabello con fuerza y salió corriendo de la habitación.- ¡Dile gracias de mi parte a los Beatles!


Sol Blanco [JiGyu/GyuZi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora