Sol Blanco [JiGyu/GyuZi]

🎻 91 - Final

-¿Sabes cual es mi canción favorita de Los Beatles?

-¿For no one?

-Al principio sí... Ahora, mi favorita es In my Life...

-¿Por qué?

-Porque alguien puede amar mucho los lugares a los que fue, pero ellos siguen allí. Son las personas, en cambio, quienes se mueven, llegan, se van. Las personas necesitan ser amadas. Y las personas que te aman te mantendrán vivo para siempre...

🎻

En 2008, el ex baterista de Los Beatles, Ringo Starr pidió a sus fanáticos que dejen de enviarle cartas y mails porque ya casi no tenía tiempo para responder todo. Sin embargo, Mingyu tenía que hacer la prueba, un esfuerzo en memoria al ser que marcó su destino desde que apareció.

-Mingyu, ¿duermes?

Wonwoo le había quitado uno de los auriculares y Mingyu tuvo que abrir los ojos. El otro lo estudia detenidamente.

-¿Qué?

-Regresaremos a Londes antes de las seis, ¿verdad? Los accionistas quieren reunir a todos los modelos y no podemos negarles una fotografía... Mingyu, ¿me oyes? Hay que...

Mingyu deja que le de un sermón mientras observa por la ventana del taxi.
Comprendía la incomodidad del otro. Días atrás le confirmó que no iba a renovar su contrato con Clap. El desfile en la London Fashion Week iba a ser uno de sus últimos eventos como modelo profesional, porque tampoco firmaría con otra agencia. Decidió dejar de ser modelo.

Liverpool se presentaba ahora ante él como un conjunto de fachadas monstruosas e imponentes. La arquitectura clásica, tanto en lo que saltaba a la vista como en los detalles más encantadores, abrumaron a Mingyu; quien cayó allí por casualidad y se encontró disfrutando del paisaje urbano. Disfrutando en serio, como si Jihoon lo hubiese planeado así.
Ir directamente a Liverpool apenas bajaron del avión, fue su idea. Wonwoo aceptó acompañarlo, porque seguro pediría algo a cambio, formaba parte de su naturaleza.

El más joven agradeció en silencio que no le haya preguntado porqué fueron Liverpool apenas arribaron a Inglaterra, el mayor era plenamente consciente que hablar de ciertos temas lo movilizaban y nunca fue experto en lidiar con la tristeza ajena.

A las cuatro de la tarde, el taxi dobló por una angosta calle adoquinada y de un solo sentido, hasta que se detuvo en Cavern Club. Mingyu y Wonwoo bajaron del vehículo.

-Los Beatles, ¿eh?- Comentó Wonwoo en voz baja, observando unas imágenes pegadas contra el cartel de entrada.

Por ser sábado, la puerta de en frente se hallaba atestada de gente. Había turistas hablando en idiomas desconocidos, jovencitas sacándose fotografías, niños gritando y corriendo con la cara cubierta de comida. La inesperada frivolidad del sitio hizo que Mingyu sufra nauseas.

¿Por qué Jihoon quiso ir a ése sitio en primer lugar? Ni siquiera alguien como él, que nunca cuestionaba a las personas, lo hubiese aprobado.

De alguna dolorosa manera, le alegró que Jihoon no haya ido. No quería que ésa gente lo mire como un bicho raro. Así iba a ser.

Mingyu entiende que fue inútil visitar Cavern Club.

Creyó estúpidamente que se sentiría más cerca de él en Liverpool, la cuna de Los Beatles, pero se equivocó. Ése no era el espíritu de Los Beatles. No le daba esperanza, no alcanzaba su alma, no le calentaba el corazón.

Los Beatles no eran una fotografía en el sombrío Club donde tocaron por primera vez. Los Beatles no eran un vinilo colgado en la pared. Los Beatles no eran una guitarra firmada o una batería solitaria al fondo de un pasillo oscuro y frío.

Ellos eran la palabra justa en el momento indicado. El beso más cálido. Las notas de un pájaro por la mañana. Ellos eran un mensaje. Una llovizna. Un laxo cuerpo contra el suyo. Eran la ironía del primer amor.

Un 'te quiero'.

Un 'te necesito'.

Un 'te extraño'.

Eran dar sin pedir nada a cambio.

Ellos no eran un lugar, sino una persona. 

-¿No vamos a entrar?- Le pregunta Wonwoo, señalando la larga fila frente a la puerta principal.- ¿Interesado en hacer turismo?

-No...- Contesta Mingyu.- Volvamos a Londres.

Wonwoo paró otro taxi de regreso y ambos subieron. El mayor ya no le sermonea, seguro porque presintió que algo extraño le pasaba. Ya sentado en el asiento trasero del taxi, a Mingyu se le ocurre sacar de su mochila un CD. Dibujó la tapa con esmero, dos palabras podían leerse en la misma. 

-¿Sol Blanco?- Leyó Wonwoo, espiándole.

Mingyu le tendió el CD.
-Pídele al taxista que lo reproduzca. 

-Está bien...

Wonwoo le habló al conductor en inglés y el hombre accede a reproducir su CD. Era el último regalo que Jihoon le dejó en la tierra, música dentro de una carpeta olvidada en su computadora portatil. 

En cuanto las primeras notas de un violín sonaron dentro de la cabina, Mingyu cerró los párpados y descansó la cabeza contra el vidrio de la puerta. La primer canción era 'In my Life'. 
El taxista dijo algo en inglés que no pudo entender porque estaba demasiado inmerso en el sonido, pero más tarde se lo preguntó a Wonwoo en privado: 'Qué milagrosa es la música', había comentado. 

Y Mingyu, no pudo estar más de acuerdo con él.