¿Tú Eres Mí Luna? (Editando)

capitulo 12.

El me miraba con curiosidad.

- James ¿crees que soy fácil? Mí pregunta lo tomo por sorpresa.

- Vic yo no.......

Solté un gran suspiro, podía sentir la incomodidad de James.

- No me digas nada.

Baje la cabeza haciendo que el rodeara mis hombros.

- Ve a dormir y antes de que me digas que sí a mí novia le molesta. No.  Le caíste  bien.

- Gracias

-  Y Vic no eres fácil por lo que me e podido dar cuenta. Me dio una de sus sonrisas mientras yo me levantaba del sillón. - tercera puerta a tu derecha. Buenas noches

- Té debo una.

- Para eso son los amigos.

Entre a la puerta que me indicó me tire en la cama y todo oscuro. Me desperté por un sonido mire mí teléfono tenía muchas llamadas perdidas y mensajes de Zac me arreglé y salí de la habitación.

- Buenos días. Mire a viví quien estaba en la cocina -¿por que te vas tan temprano?

- Mí primo esta preocupado.

- Té hice el desayuno y sopa para que no te resfries.

- Pero......

- Siéntate.

Puede que sea bajita pero si quería dar miedo sí podía, tenía los brazos tatuados se veía una letra cursiva en el hueso de su cadera tenía un pircieng en su labio y otro en su nariz yo empecé a comer, la sopa estaba deliciosa mí teléfono empezó a sonar, lo tome.

#Zac#

# Victoria lo siento por decirte lo que te dije pero por favor me tienes muy preocupado#

# Estoy en casa de James ya voy#

Mire a Viví.

- Me tengo que ir gracias por todo.

- Las llaves de la motocicleta de James están en la mesa de la sala.

- No creo que.....

- Tomalas estas de afán.

- Gracias y la comida té quedó deliciosa.

- Estudio gastronomía. Me guiño un ojo y se volteó tome las llaves y me fui a casa recordando tenía que buscar apartamento.

- Zac.

Grite cuando llegue a la casa pero no había nadie, preocupado mí trasero  no decidí darle más vueltas al tema y me tomé una ducha me puse a ver películas no se sí les a pasado que sienten ese sentimiento de sentirse solos cuando las lágrimas querían salir el timbre sonó me levanté.

- Hola mal agradecida ladrona de motos.

- Hola James.

- Vamos que no recuerdas que hoy tenemos clase de baile.

- Mierda. Salí corriendo me puse decente y salí de verdad necesitaba esto no había una mejor forma de liberar mí cuerpo que bailando.
James conducía como un maníaco la moto en menos de dos minutos ya habiamos llegado.

- Pareces una niña en una dulceria.

- Es que necesito liberarme de todo el estrés.

Entramos al salón mí cuerpo empezó a moverse al ritmo de la música con los demás.

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No había visto a Victoria ayer que la fui a ver dormir no estaba en su habitación no tenía ni idea de donde podía estar estaba sentado en una cafetería cuando la vi llegar con ese tal James puede que tenga novia pero todavía me daban ganas de romperle el cuello.