¿Tú Eres Mí Luna? (Editando)

capitulo 32

Todo negro, abrí mis ojos de golpe ¿donde estaba? La habitación no era mía eso estaba claro era de colores grises negros y blancos. Trate de levantarme pero alguien abrió la puerta.

- Victoria despertaste.

Alex se trató de acercar a mi pero yo no lo permití me sentía rara aunque por dentro quería que me abrazara pero ese secreto no me dejaba acercarme a él.

- Victoria.

- No té acerques a mi.

En sus ojos pude ver el dolor el enseguida los volteó y se alejó de mi.

- Victoria yo....

- No quiero escucharte.

- Victoria.

Su tono sonaba suplicante y dolido.

- No quiero hablar contigo.

Mí cerebro no conectaba con mi boca si quería escuchar su historia pero a la vez me daba miedo.

- Victoria yo no.......

- !TÉ DIJE QUE NO QUERÍA HABLAR CONTIGO!

Se acerco a mí y me tomo con fuerza de los brazos para que no me soltara.

- !CREES QUE YO QUIERO SER ASÍ, CREES QUE YO QUIERO SER UN MONSTRUO AL QUE TODOS TEMEN, CREES QUE YO PEDÍ NACER ASÍ. YO QUIERO........

Su voz se apagó y Su agarré se suavizo quería consolarlo pero si estuvieran en mi lugar no podrían, tome una de sus mejillas con mi mano el la tomo con la suya mi cuerpo entero se tenso y sus ojos me miraron llenos de dolor.

- Quiero irme a casa.

Quito la mano de su cara.

- No.

- ¿Como que no?

- Tu Victoria Collims eres mía y té quedarás a mi lado aunque tenga que amarrarte.

- !QUE! !YO NO QUIERO ESTAR CON...

Me callé cuando vi su mirada de furia y dolor.

- !TERMINA VICTORIA, NO QUIERES ESTAR CON UN MONSTRUO COMO YO!

- Por favor Alex.

Las lágrimas empezaban a acumularse en mis ojos.

- Pero té digo que gatita, en este mundo nunca tenemos no que queremos.

- Alex.

- Ahora me perteneces, eres mía ¿entendiste? !MÍA! Y yo té quiero a mi lado así que a mi lado té quedarás y aprenderás a quererme o si no sufrirás.

Se fue dando un portazo, lo habia lastimado donde se había ido el chico ojos azules que con sus estupideces me hacía reír, ahora estaba este..... tenía mucho que procesar y sólo el me daría respuesta y para eso tenía que  esperar que se le pasará la furia, me senté sobre la cama a mirar por la ventana de piso a techo frente a mi, el bosque solo servía para darme cuenta de que estaba perdida.

No se cuantas horas o minutos estuve sentada en la enorme cama que olía a él, me levanté trate de abrir la puerta pero estaba asegurada.

- !ALEX ABREME LA PUERTA!

Empecé a golpear la puerta quería irme .

- !ALEX!

La puerta se abrió de golpe, dejando ver a Alex con un bocxer puesto.

- ¿!QUE QUIERES!?

Sus ojos estaban negros y todo su cuerpo estaba tenso.

- Alex quiero irme.

Mis ojos empezaron a humedecerse.

- No.

Se acercó a mí yo por instinto retrocedí me encontré con la pared el me acorralo.

- Victoria.

Sus ojos se volvieron de nuevo azules.

- No quiero perderte, té necesito tanto que ni té imaginas.

Mí cuerpo respondía hacia el de una manera extraña lo necesitaba pero a la vez quería alejarme de el.

- Alex no entiendo nada sobre tu mundo.

- Preguntame lo que quieras yo responderé a todas tus dudas, pero por favor no me abandones.

- Necesito pensar.

- Se que huiras.

- ¿Que té hace estar tan seguro?

- No quiero que té vallas, ese maldito chupa sangre esta suelto.

- ¿Chu- chupa sangre?

- Vampiro Victoria en mí mundo existen cosas que ni té imaginarás que existen.

- Necesito pensar. Dije cansada.

- Té dejaré pensar, pero no té irás de aquí.

- ¿Que?

- Como lo oíste, ahora me perteneces Victoria puedo hacer contigo lo que yo quiera.

Se acercó a mis labios yo retrocedí

- Eres MÍA.

Se alejó de mí y se sentó en la cama.

- Que acaso té vas a quedar hay. Son las diez de la noche y necesitas dormir.

Me quedé estática en mí sitio viendo a Alex.

- Victoria o vienes a las buenas o iré a las malas.

No me moví, no se por que no me movía quería hacerlo pero mí cuerpo no respondía.

- 3.

Reaccione y me dirigí a la cama, el sé levantó.

- Victoria té explicaré todo lo que quieras pero por favor no me abandones.

Sus palabras resonaron en mí cabeza, esto era complicado me acababa de enterar que mi novio era un hombre lobo.

- Alex yo.......

- Acuestate.

Yo le hice caso, el sé acostó a mi lado y me rodeo con un abrazo todo mi cuerpo se tenso.

- Me da igual que todas las personas me traten como un monstruo, pero Victoria tu no lo hagas por favor no sabes lo que se sufre cuando tu mate té rechaza o té depreda.

Metió su cabeza en mi cuello, no entendía que era mate, su respiración se fue calmando y se quedó dormido, me solté de su agarré y gracias a Dios no se despertó salí de la habitación.

La enorme mansión estaba vacía y oscura, camine a tientas bajando tres pisos hasta que encontré la sala principal y con ella la salida salí sin hacer ruido pero lo que mis ojos vieron me sorprendió, un pueblo como los de la edad media estaba frente a mí ¿que demonios era es esto? ¿donde estoy?

Baje las pequeñas escaleras y salí corriendo, me adentre al enorme bosque tenía que salir de aquí no se como pero tenía que hacerlo, pronto escuche aullidos y gruñidos empecé a correr más fuerte, tenía que salir tenía que salir hasta que me tomo por sorpresa.