Capítulo 30

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     - Carroll, pase a la pizarra a resolver el ejercicio.

Chester camina al pizarrón a resolver el ejercicio, el profesor lo mira con desaprobación, no porque quiere que Chester resuelva mal el ejercicio, sino porque aún no tolera la forma en la que el joven usa el uniforme.

El profesor le entrega el marcador al estudiante, éste escribe algunos números y se detiene, no por el hecho de no saber cómo resolver el ejercicio. El profesor lo sigue viendo con desaprobación.

    - Profesor Vélez.

    - Dígame.

    - Es incomodo hacer el ejercicio si está mirándome así – dice Chester.

En el fondo se escuchan las risas de algunos estudiantes.

    - Lo miro así porque sigo considerando inapropiado su forma de vestir – dice el profesor -. Está arruinando la imagen de la institución al usar así el uniforme.

    - Lo sé, me lo ha dicho todo el año escolar – Chester mete su mano dentro de la chemise y saca un libro de bolsillo -. Pero en el reglamento que usted me dio no dice nada. Es un vacio legal.

De nuevo se vuelven a escuchar algunas risas en el fondo del salón.

    - Le di ese manual para que se adaptara a las normas del colegio – el profesor lo mira sosteniendo el manual -, y el disparo termino saliéndome por la culata – susurra para que sus alumnos no lo escuchen.

El timbre suena, anunciando que la clase a terminando.

    - Jóvenes, doy por terminada mi asignatura – comunica el profesor -. Que tengan un buen día.

El profesor Vélez se acerca al escritorio para tomar su maletín y retirarse, Chester se le acerca y le entrega el marcador. El profesor lo guarda en su bolsillo, vuelve a repasar la vestimenta de Chester, y con una sonrisa melancólica sale del aula, dejando solos a los alumnos.

Chester se devuelve a su pupitre.

    - Sólo eres un bobo – dice alguien.

Chester se detiene y le da una corta mirada a la chica que lo acaba de insultar. Le responde con una sonrisa y continua su camino.

    - ¡No me ignores! – chilla la chica.

    - Lintper, déjalo, no le prestes atención – le sugiero un compañero.

    - Te haces el divertido burlándote de los profesores con tu manera de infringir las reglas, pero eres patético usando ese suéter por debajo. Estás sudando y aun así no te lo quitas, que patético.

    - Uso el suéter porque me gusta, no para burlarme de nadie – dice Chester, seriamente. Levanta la mirada en dirección a su agresora -. Las burlas y humillaciones se las dejo a los de mente pequeña – sonríe.

Lintper aprieta los dientes con furia, camina hacia Chester para seguir insultándolo.

    - ¿Te crees superior sólo por qué lograste burlar las reglas? Sólo eres un arrogante ingenuo…

    - ¡Aquí la única que es una arrogante que busca dejar en ridículo a los demás eres tú!

Todos en el salón se impresionan de la actitud de Chester.

    - Crees que eres la más inteligente y te basas en eso para burlarte de los demás – Rei le hace gestos a Chester para que se detenga -. Pero si vamos más allá, a nosotros nos evalúan sobre 25 puntos, mientras que en las universidades lo hacen sobre 50, por eso eres la mitad de inteligente que un estudiante universitario. Estás a nivel de alguien que hace el más mínimo esfuerzo para aprobar un examen.

    - Chester, ven acá, por favor – pide Rei.

    - Un momento – le indica -. En otros países evalúan sobre 100 puntos, eso quiere decir que tú eres una cuarta parte de inteligente de lo que son esas personas. Y más allá está la gente de la NASA y más allá los extraterrestres. Con eso veras que, no eres tan inteligente como crees, y no eres un pez grande en un estanque pequeño, porque Rei te supera – concluye Chester.

Antes de que la discusión pueda continuar, el siguiente profesor entra pidiendo que todos los alumnos tomen su lugar.

Todos los del club escuchan atentamente a Rei narrando lo sucedido en el salón de clases.

    - Carroll, no sabia que tenias ese lado tan cruel – dice Morrison.

Chester se limita a sonreír.

    - Para rematar, concluye diciendo que yo soy más inteligente que ella – Rei resopla penosamente.

    - Eso debió enfurecerla mucho más – comenta Alemán.

    - Debiste ver su cara, pensé que se lanzaría sobre mí.

    - Fue muy mala idea lo que hiciste – interviene Stinson.

    - ¡Si que lo fue! – exclama Rei -. Ella me odio y con eso…

    - No me refiero a eso – le interrumpe -. Recuerden quién es el novio de esa chica – dice Stinson mirando a otra parte -. Creo que no importa, ahí viene.

Junto a Lintper se acerca un chico alto, fornido y piel algo tostada.

    - Así que éste es el chico que se burlo de mi novia – sus ojos reparan en Chester -. Nadie se burla de mi novia.

    - Ella comenzó – dice Chester.

    - ¡Eso no me importa! – vocifera el chico -. Te burlaste de mi novia y no permito que nadie lo haga. Nos vemos en la salida para resolverlo como hombres.

Chester se levanta de la banca y se acerca a Lintper y su novio.

    - Estoy en contra de la violencia y me gustaría que esto se resolviera civilizadamente y no como animales – les dice -. Pero estoy aun más en contra de aquellos que buscan humillar a los demás.

    - Entonces nos vemos a la salida.

Dibujando SonrisasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora