-¿¡Hablas en serio!?- se reía sin parar
-Yo también esperaría que no fuera así- respondió Drake.
El formal joven con ojos morados y Drake caminaban por la montaña donde se hallaba su escondite. El hombre había ocupado el mismo lugar que Drake, y él le había acompañado por algunas cosas que necesitaba.
-Willer, ¿Crees que estoy haciendo lo que debería?- pregunto Drake
-¿Willer?- pregunto el hombre- yo te llamo por tu alias, deberías hacer lo mismo
-Otra vez a lo mismo- respondió ligeramente irritado- es más sencillo decirte así.
-En ese caso yo te también te llamare por tu nombre
-No
Ambos siguieron así, parecían dos buenos amigos en una caminata nocturna por la montaña hasta la entrada de la cueva. Adentro se veía el reacondicionamiento que le había hecho Willer. Ahora la cueva se dividía en galerías talladas por el propio individuo, creando así una casa dentro de la montaña. Mueblería tallada de la piedra que había sido extraída decoraba el interior. Mesas, sillas, estanterías, una bañera, cama, etc.
-No crees que es demasiado solo para pasar un par de semanas- pregunto Drake
-Tal vez- respondió Willer- Pero no me importa, nunca está de mal tener un pequeño lujo en casa, aun cuando vives en una roca.
Drake se arrojó al sillón más cercano. Una ligera capa de tela le cubría, tal vez para evitar ensuciarse con la fina y suave capa de polvo que tenía debajo.
-¿Quieres que te prepare una cama?- pregunto Willer mientras se dirigía a la cocina
-No pasare la noche aquí
-Ah, cierto- respondió en la entrada de la cocina- Olvidaba que ya te conseguiste una novia
-¿Es en serio?- dijo Drake sin dar reacción alguna ante el comentario- ¿qué tan infantil eres?
-Solo quería molestarte un poco, pero parece que no dio frutos-respondió ligeramente sonriente-Aunque ciertamente parece que le importas- Willer volvía de la cocina con un par de tarros espumeantes, algo de comida en un plato y uno portafolio que le entrego a Drake.
-No tengo tiempo para esto Willer- dijo Drake con un tono ligeramente irritado- Tengo más de que preocuparme, como en que hare con ese par.
-Una interesante pareja ¿no?- Dijo con una misteriosa sonrisa mientras bebía- La chica ya en si tiene un alma rara, y el otro no es un alma normal, no se veía igual que la de un Golem común.
Drake pudo notar el destellante ojo izquierdo de Willer. Una porción del cuarto se oscureció durante un momento, antes de que dicha oscuridad saliera disparada por la entrada. Momentos después un ligero grito de agonía se escuchó por afuera.
-Ya era hora de que ese espía apareciera- dijo Willer con su natural sonrisa- dos blancos de esta posición en el mismo lugar, realmente llama la atención de los interesados.
-Me tienen harto, tengo que desaparecer totalmente para poder moverme con libertad.- respondió Drake mientras tomaba un trozo de carne del plato- asegúrate de limpiar eso.
-Nunca dejo nada pendiente
-Tal vez es hora de que me vaya- se dirigió a la entrada- aun debo de pensar claramente en que hare con ese par.
-Vale- dijo Willer mientras lo acompañaba- Limpiare esto de camino
Drake salió y fue recibido por la brillante luz de la luna en su rostro, y el aroma metálico de la sangre derramada recientemente. Tal vez no debía preocuparse tanto con Willer cubriéndole la espalda. Se encamino a la ciudad avanzando velozmente mientras se sumergía en sus pensamientos
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Beast Soul
FantasyYrien, un mundo lejano donde la gente se encuentra dividida por una gran guerra sucedida en el pasado. Tras miles de años una nueva guerra podria estallar y el unico que lo sabe es nada menos que un mercenario con una gran recompensa por su cabeza...