La tarde ya había caído. Fera caminaba por la planicie que daba a la montaña cuando vio una figura familiar que se encontraba al pie de la misma. Camino un poco más rápido para saludar a Gallon, quien se veía realmente cansado ¿acaso Drake lo había hecho entrenar desde la mañana hasta ahora? Volvía a entrar en duda acerca de si era buena idea dejar que el cazador los entrenara.
-Fera al fin llegas, creí que salías más temprano- dijo en un ligero tono de reproche con una sonrisa
-Tuve que hacer un par de cosas-dijo ligeramente irritada- te ves terrible, ¿acaso Drake te hizo entrenar sin descanso?
-No- respondió rápidamente- pero su entrenamiento si es un tanto duro, aunque tenía razón, es algo que no hemos intentado y creo que en verdad nos ayudara
-¿Qué es lo que te hizo hacer?
-Destrozar una roca
-¿Qué no eso ya lo habías hecho?
-No era cualquier roca- dijo riendo- yo también caí en la finta. La roca que estuve intentando romper es mineral de Aranía, una roca que absorbe impactos y realmente difícil de romper.
-¿te puso a romper una roca virtualmente irrompible?-pregunto irritada- como si...
-Sí, si puede, rompió una del mismo tamaño sin problema-Respondió prediciendo lo que diría- me explico la como era posible romperla, pero dijo que yo tenía que encontrar por mí mismo la forma
-Bueno, parece ser que ese cazador tiene una idea de lo que hace- respondió aun de manera irritada- iré a ver qué deberé de hacer yo.
Ambos se separaron y Fera se dirigió montaña arriba, no tardó mucho en encontrarse a Drake. Al parecer el lugar había sido preparado y lo que antes recordaba como un lado de la tranquila montaña ahora se había convertido en una cueva lo suficientemente grande para que cupiera ahí una casa. Drake se encontraba trayendo unos blancos junto con un hombre con mechones purpura en el pelo.
-Por fin apareces- dijo Drake sin siquiera voltear a verla- Acércate, te diré que es lo que harás.
Se acercó al espacio destinado, tratando de imaginar que es lo que tendría que hacer.
-Te presento a un camarada mío, él se encargara de entrenarte-dijo mientras se preparaba para irse- haz caso de lo que él te diga y aprenderás de la magia al punto en que podrías enseñarle a profesionales.
- Espera- dijo intrigada- ¿No me entrenaras tú?
-Conozco y la aplico con maestría, sin embargo no hago tanto uso de ella a diferencia de mi colega- volteo a verlos tranquilamente- Es mejor que alguien con más dominio te enseñe, pues mi punto era darles entrenamiento, no quiere decir que yo sea el que les enseñe todo.
Drake se fue dando una ligera seña de despedida con la mano. Fera volteo a ver a su compañero. La luz no era suficiente para ver con claridad, aun así la ligera luz que se colaba por la entrada le permitió ver un poco a su maestro. Parecía unos años mayor, tal vez uno o dos más que Gallon, sus ojos eran color purpura y mantenía una ligera sonrisa. Venia vestido como si fuese un oficinista, aunque lo más seguro es que fuese otro cazador.
-Bueno, creo que será mejor que comencemos Fera- dijo mientras se sentaba en una roca- Puedes decirme Willer, Drake siempre se burla de mi apodo así que con eso bastara- rio levemente
-¿Por qué?-dijo sintiéndose un poco más relajada- Willer me parece un apodo normal
-Oh, ese no es mi apodo, ese es mi nombre real
-¿Cuál es tu apodo entonces?
-No seas tan curiosa- dijo riendo- dejémoslo así
Fera se sintió más tranquila, el parecía ser más tranquilo y más amable que Drake, aun si era un cazador, él no le parecía mala persona.
ESTÁS LEYENDO
Beast Soul
FantasyYrien, un mundo lejano donde la gente se encuentra dividida por una gran guerra sucedida en el pasado. Tras miles de años una nueva guerra podria estallar y el unico que lo sabe es nada menos que un mercenario con una gran recompensa por su cabeza...