Beast Soul

Capítulo 31: El dragón y la llama

Ya había pasado una semana desde el encuentro con La llama y tanto Fera como Gallon por fin habían sido dados de alta en el hospital. En aquel día, Syl y Fera caminaban por el centro mirando las tiendas sin cesar. Un día de ir a comprar con su amiga le ayudaría a relajarse para la rehabilitación.

Ese día se suponía que debía ir al instituto, pero aún tenía tiempo para el tratamiento, además de que todos ahí tenían ya la idea de por qué se encontraba en ese estado. Después de ver el noticiero y saber un poco de ella, descubrir que había estado presente en el ataque en el borde de Yrien era tan fácil como sumar 2 y 2. Aún así le gustaba pasar tiempo con Syl, quien decidió acompañarla mientras se recuperaba.

- Lamento que tuvieras que venir conmigo- le comento Fera a Syl con algo de culpa

- Tranquila- sonrió- no es como que me vaya a desmoronar por un descanso inesperado

Fera río, seguía siendo la misma Syl de siempre.

Continuaron caminando y mirando las tiendas en el distrito comercial de Yrien. Principalmente se dedicaban a mirar y curiosear, ya que la salida había sido imprevista y no traían mucho dinero con ellas.

Ambas se encontraban mirando los collares desde la parte exterior de una tienda cuando una persona pasó corriendo tras de ellas, chocando y derribando a Fera en el proceso. Syl inmediatamente reclamo.

- ¡Oye! - le grito furiosa- ten más cuidado con la gente- volvió a ver a Fera mientras le tendía la mano- ¿Estás bien?

El golpe le dolió más de lo que hubiera sido debido a las heridas,por lo que se quedó un momento en el suelo.

- Solo me dolió un poco- dijo sonriendo antes de volver a ver a la persona a la distancia- parece agitado.

- Y eso que- respondió- debería de fijarse en las personas, hasta parece que corre por su v...

Acto seguido una explosión a la lejanía dejó a Syl con la palabra en la boca.

Más gente comenzó a correr en pánico mientras gritaba. Otros sacaron sus teléfonos inmediatamente, algunos grabando lo que pasaba y otros llamando.

De una de las calles más abajo salieron varias personas armadas cargando con un par de sacos. Seguramente eran ladrones. Lo que llamó la atención de Fera fue la persona que salió tras de ellos. El causante de la explosión y el caos había sido nadie menos que La llama. La mirada de águila del cazador recorrió el área antes de clavarse en ella. Sonrió mientras levantaba la mano.

-Syl- dijo con pánico Fera- Una barrera ¡Pronto!

Syl quedó un momento paralizada pero hizo lo que dijo Fera al momento.

- Invoco a la coraza de Égida, bajo el elemento del viento imploro su protección ante cualquier daño- recitó mientras canalizaba su mana- ¡Barrera!

-Plumas de Ra- exclamó Fera mientras levantaba la mano y el arco aparecía en su mano.

Syl vio maravillada el arco de Fera, antes de ver calle abajo, donde una poderosa bola de fuego se dirigía contra ellas. Grito de miedo a la vez que la esfera impacto contra el arco de Fera, quien se había puesto frente al escudo, y las furiosas llamas resultantes se movían alrededor de su escudo.

- Sal de aquí Syl- le dijo Fera antes de dirigirse calle abajo.

- Y tu que planeas hacer- grito sobresaltada- no me digas que piensas enfrentarlos

Fera no dijo más, aun cuando había escuchado y entendía la preocupación de su amiga. No podía dejar que La llama y esos ladrones hicieran lo que les plazca.