La luz de medio día cubría la Sabana. Aún así la tranquilidad no estaba presente.
Drake y Danny corrían velozmente huyendo de sus persecutores. Detrás de ellos, un par de figuras encapuchadas los perseguían de cerca. Había sido así casi todas sus incursiones fuera del refugio. Aquella persona encapuchada que les había ayudado a atacar la fortaleza de Echael ahora se encontraba dándole caza.
Frente a ellos se empezó a ver la silueta de los árboles del bosque de espinas. Era el punto límite, sus persecutores no conocían las rutas para cruzar, más si estaban advertidos del peligro que representaba ese lugar. No podían seguirlos ahí, así que solo debían llegar y estarían a salvo. El agudo oído de Drake escucho una hoja desenvainar y rápidamente se lanzó contra Danny, justo a la vez que una oleada de energía pasaba cerca de ellos y un potente alarido se hacía presente. Rápidamente se pusieron de pie y continuaron, moviéndose en ligero zigzag evitando los ataques. Cada vez se acercaban más a ellos a medida que avanzaban, si seguían así no llegarían a tiempo para evitar un conflicto, y conociéndolo por experiencias pasadas, era un par con quien no quisieran enfrentarse. Drake preparó su lanza, listo para combatir cuando una lluvia de cuchillas púrpura salió de entre los árboles, dirigidas a sus persecutores. Estos se defendieron, a la vez que uno de ellos dio un salto hacia atrás justo cuando una sombra parecida a un hocico surgió del suelo en un intento de atraparlo en sus fauces.
Con esto Danny y Drake lograron llegar al bosque, logrando huir de ellos una vez más.
- Eso estuvo cerca- les comento Willer, quien estaba esperando para unirse a su huida.
- Y que lo digas- respondió Drake- no paran de ninguna manera
- Pero seguimos teniendo esto- mencionó Danny mientras mostraba la gran bolsa que cargaba consigo.
- ¿Nada se te escapa verdad?- comentó Willer
- Ni una cupra- le respondió con una pícara sonrisa mientras sacaba una Áurea de la bolsa
El trío recorrió rápidamente el camino a través del bosque y cubrió el resto del camino al refugio antes de la puesta del sol. Una vez ahí pudieron relajarse un poco. Drake se tiro momentáneamente en el sofá mientras pensaba en ese par. Desde que había vuelto al refugio no habían parado de darle caza.
La primera vez que se enfrentó a ellos iba acompañado de Willer. Ambos se lanzaron directamente al combate, siendo Drake quien combatió contra el que portaba la espada. El otro utilizaba un arma similar a una guadaña. Arrasaron con ellos, tuvo suerte en ese momento de poder escapar junto con Willer. No sabía quienes eran, pero no eran un chiste.
Escucho un grito de euforia por parte de Danny, quien se encontraba en la mesa contando su botín. Había acompañado a Danny a un poblado en donde se encontraba un banco del imperio y habían robado una buena parte de lo que se encontraba ahí. Drake también había tenido una bolsa, pero la perdió cuando se toparon con los encapuchados.
- Casi 40 platinas- exclamó alegremente- por suerte yo llevaba el dinero y tu las medallas- dijo en dirección a Drake.
- ¿Y qué cosa es lo que más vale de este lado?- respondió Drake
- Calla- dijo tratando de hacer caso omiso- de todos modos me gusta más como brillan estas monedas- se tiró en su montaña de áureas y una que otra platina.
Drake quedó estático un momento, levantó su mano suficiente y vio fijamente el anillo que ahora traía. Un anillo grabado como un dragón, en la parte superior a nivel de las alas se encontraba una gema de color verde incrustada en el.
- Iré de vuelta al bosque
- ¿Entrenamiento? - preguntó Willer
- ¿Qué otra cosa puedo hacer?
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Beast Soul
FantasyYrien, un mundo lejano donde la gente se encuentra dividida por una gran guerra sucedida en el pasado. Tras miles de años una nueva guerra podria estallar y el unico que lo sabe es nada menos que un mercenario con una gran recompensa por su cabeza...