POV Klaus
Verla dormir a mi lado era una de las mejores cosas que había visto en toda mi existencia. Podía admirar cada centímetro de su rostro, que permanecía en paz y sin preocupaciones. Su largo cabello anaranjado descansaba sobre la blanca almohada, creando dibujos como si fueran llamas de fuego.
Sus labios entreabiertos, largaban suspiros de a ratos, haciendo que me den ganas de besarla.
Había despertado hacía un par de minutos, como todos los días desde que nos reconciliamos. Me dedicaba a verla descansar hasta que llegaba la hora de despertarla.
Comencé a besar sus mejillas, haciendo que gruñera suavemente. Todos los días era la misma pelea a la hora del desayuno y aunque no lo crean, me encantaba. Elijah siempre se enojaba cuando llegábamos tarde y por eso intentaba despertarla antes, pero ella nunca cedía.-Es hora de despertar, cariño- le dije bajito- Elijah vendrá a buscarnos y tendré que golpear a mi hermano por verte desnuda-
Ahora sí abrió sus preciosos ojos café claro, para prevenir una intensa pelea entre hermanos.
Reí bajo por su cara de dormida, a la vez que ella me miraba algo molesta.-No es gracioso, Nick- soltó bostezando.
Se acercó y besó mis labios con ternura.
Jamás había imaginado que habría alguien hecho a mi medida. Una persona capaz de soportar mi paranoia, locura y odio por el mundo y aún así seguir a mi lado. Sin siquiera querer cambiarme, ella me amaba tal y como era.
Kira se había convertido en parte fundamental de esta familia y eso me hacía el hombre más feliz de la tierra. Hoy le borraríamos la memoria a Meredith, para luego asegurarme de que se marché al otro lado del mundo si es posible. Lejos de mi madre y de nosotros, por supuesto.
Pero todavía quedaba el tema principal, mi madre y Finn. Hacía días que no hacían ninguna aparición y eso me estaba preocupando.-¿Estás bien, amor?- preguntó su dulce voz, trayendome otra vez a la realidad.
-Ehhh, si. Sólo pensaba- dije sonriendo, hoy sería un buen día.
Tenía muchísimas cosas planeadas para hoy. Quería que se olvidara del problema con su madre, porque sabía que muy en el fondo todavía le dolía que quisiera matarla. Y esperaba que nada, ni nadie se atreviera a arruinar lo que tenía preparado.
-Tenemos que levantarnos, amor- le susurre al oído cuando vi que había cerrado sus ojos otra vez.
Antes de que pudiera responderme, la puerta de la habitación se abrió dejando ver a mi entrometida hermana menor.
-Vamos, K. Levantate que Elijah ya está insoportable- exclamó en una queja- piensa que estas haciendo cosas indebidas con su niña, Nick- agregó con una risa.
Mi pequeña novia se había puesto toda colorada. Se veía más inocente de lo normal. Besé una de sus mejillas y le sonreí para que pensara en otra cosa.
-Ya vamos, Bekah. Deja que nos pongamos algo de ropa y bajamos- le contesté a mi hermana.
En cuanto salió por la puerta, ambos nos reímos por la vergonzosa situación.
Entré a darme una rápida ducha, mientras ella se cambiaba de ropa. Al salir, casi se me caían las babas al verla. Tenía un short demasiado corto y ajustado, acompañado de un musculosa con la bandera de Estados Unidos. Era tan hermosa que aún no creía que yo merecía semejante belleza.
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Hechizados- Nicklaus Mikaelson
Fiksi PenggemarSecuela de Hechicera 6 meses después de haber escapado del infierno de Mistic Falls, la reciente pareja se encuentra disfrutando de su libertad en la bella Italia. Hasta que un día, Kira cae en coma repentinamente, algo imposible en un vampiro. Y Da...