Enamorate (adaptada)

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Le costaba creer que su novia le había mentido y nuevamente le iba a mentir, al comenzar la relación se prometió tener la confianza suficiente con su novia, todo se basaba en la confianza y Ruggero hace dos años no conocía aquella palabra.

¿Ruggero Pasquarelli? -había escuchado oir- Es un mujeriego -escucho una risilla- No toma a nadie enserio, así que no se te ocurra acercartele si quieres una relación seria.

¿Aquel chico del salón 301? -muchas chicas solían hablar de él, y Ruggero hacía como si no las escuchaba, pero sin embargo era lo que siempre hacía- Es guapo, dicen que perdió la virginidad a los quince años, tiene un cuerpazo, suele coquetear con todas, así que no te creas única.

¿Pasquarelli con novia? -se burló- Debes estar confundiéndolo, el Ruggero que conozco nunca tiene novia, sólo chicas.

Y todo eso había cambiado por Michelle, ya no tenía chicas, si no una chica. Ya no era mujeriego, ni coqueto, el antiguo Ruggero había desaparecido de un día para otro y todo por una chica...que ya estaba dudando si valía la pena o no. Ella le mentía, ella le escondía algo y él lo descubriría.

Agustín -el chico se sobresaltó al escuchar a su amigo- Escuché algo.

Ruggero yo escucho todos los días y no ando asustándote por la vida -Ruggero lo miró con la ceja levantada- Ya que va ¿que has escuchado?

Escuché una conversación de Michelle y Camille, ellas -paró de hablar, al ver que su amigo se acercaba mucho a él con las piernas cruzadas- ¿Que haces?

Bueno las chicas, cuando se acercan a sus amigas y dicen, ¡tengo que contarles algo! o ¡escuché algo! -imitó una voz chillona de mujer- Las demás se acercan a ella como si quisieran comerla, taparla, tirarsele encima, no tengo ni idea pero es extraño -Ruggero sólo rió- ¡De que te ríes!

Enserio, mucha chica te ha hecho mal -notó como su amigo solo rodaba los ojos- Bueno ya, escuché que Camille le decía que tenían que ir a una fiesta en San Francisco, que estaría buenisima el fin de semana pero el problema era yo y sus padres, bueno eso dijo Michelle y Camille le aconsejaba que mintiera, a sus padres les diría que estaba conmigo y viceversa y pues -hiso una pausa, para luego volver a exclamar- ¡Michelle no se negó!

Sabía que esa chica, no era tan santa -murmuró Agustín-

Pues santa santa, claro que no -se acostó en su cama, mientras su amigo lo miraba, como diciéndole 'continua'- Me miente, y me va a mentir, eso está claro, pero también me invito a almorzar con ellas mañana y pues acepté

¡Eso es genial! pero ¿eso significa que el plan ADM ya estará en marcha?

Claro que si, ya he pensado en todo, almorzaré con ella, me haré su "amiga", le preguntaré cosas que como Ruggero ya le he preguntado, trataré de que me confíe algunos secretos y el fin de semana tendré que esperar a ver si me miente o no -suspiró fuertemente-

Aún le costaba digerir que su novia, no era tan simple hermosa y simpática como la conoció si no que era una chica que cada vez lo sorprendía más y más, con sus mentiras y actitudes.

¿Y después? -pregunto Agustín mirándolo-

Pues si sucede todo lo que te he dicho, averiguaré que esconde, terminaré con ella y nos marcharemos de aquí, de una buena vez -Dijo Ruggero mirando a su amigo para después voltear a ver el techo-

¡Dios me ha escuchado! -dramatizó su amigo- Esperemos que suceda entonces.

La maldita alarma sonó muy temprano, pero así tenía que ser. Debía levantarse más temprano que Carolina y Valentina, para hacer su no tan pequeña transformación.