Desde que te conocí

"Capítulo 13" Parte 2

Llegamos y entramos. Nos sentamos en un sitio escondido, para que no lo reconocieran mucho.

Cogí un papel para apuntar las que cosas que queríamos.

—¿De beber? —dije mientras lo apuntaba.

—Nestea.

Cogió la carta y comenzó a decir.

—¿Para qué sirven estos números?

—Hay que apuntarlos y decírselo a la chica.

Asintió.

—¿Cuánto es el tamaño de los montaditos?

—Es pequeño, pedimos dos cada uno.

Asintió.

—Quiero una ensalada.

—¿Cuál? —le miré.

—La campechana tiene buena pinta. Atún, aceitunas —asintió de una forma graciosa y reí.

Lo apunté.

—Quiero el 36. Perrito caliente con mostaza y ketchup.

—¿Tú no tienes que seguir una dieta? —reí.

Me miró y alzó las cejas.

—Mañana a dieta —le avisé.

Rió.

—Apúntalo.

Lo apunté y después, apunté lo mío. Era un montado de tortilla con ali oli.

—Voy a llevarlo.

Asintió. Me levanté y se lo dije a la chica.

—Un Nestea sin hielo, por favor —avisé.

Asintió. Me puso las bebidas y las llevé a la mesa. Él estaba rodeado de personas.

—Lo siento —dije.

Un chico me dejó pasar y me senté.

Bebí y saqué mi móvil. E hice una foto para las historias de Instagram. De texto puse: "Cuando te das cuenta que hay chicos guapos del Atleti".

Lo subí e hice otro haciendo un puchero. Y puse: "Pero no se fijan en ti".

Esperé a que terminara con un niño pequeño.

—Eres el mejor —dijo el padre del niño.

Lucas sonrió y cogí el móvil para hacerle una foto. Me pilló.

—Borra esa foto —me dijo.

Se la enseñé.

—¿Quieres que la borre? Estás guapo —hice pucheros.

Rió.

—Te la paso.

Le pasé la foto y cogió una cosa roja.

—¿Esto para qué es?

—Para saber cuando los pedidos están hechos.

Asintió.

—¿Tu padre era importante para ti? —preguntó.

—¿A qué viene eso ahora?

—No sé. Me pareces un enigma. Parezco que estoy cerca de conocerte pero estoy cada vez más lejos.

Reí.

—Mi vida era perfecta. Tenía todo lo que necesitaba. Mi mejor amiga, mis padres y estaba estudiando lo que yo quería.

—¿Has superado su muerte?

—No. Es como un peso que tienes que llevar en tu hombros. Pero cuando llega su día, te quitas el peso y al día siguiente, lo tienes que volver a poner.