"Capítulo 3"

1.3K 39 1
                                    

Sentí como me movían.

—¡Vamos, Noemi! —gritó Alina.

Me moví para estar boca arriba para después mirarla y enseñarle el dedo.

Rió.

—¡Vamos a desayunar!

Me levanté y bostecé. Las dos fuimos al baño e hicimos nuestras cosas. A continuación, desayunamos un vaso de leche con tostadas y un zumo de naranja.

Oímos como tocaron la puerta y la miré frunciendo el ceño.

—Mira a ver quién es, que tú hablas francés —me dijo Alina empujándome para la puerta.

Miré por la mirilla y eran donde chicos, como de nuestra edad. Abrí la puerta.

Buenos días —dijo uno de pelo negro y ojos verdes—. Yo me llamo Alan, y él se llama Guillaume.

Hola. Yo me llamo Noemi y ella se llama Alina. Somos españolas. Ella no habla francés, yo sí.

¿Españolas? —sonrió Guillaume.

Sí. Vamos a estar dos meses aquí, y después volvemos a España.

Vacaciones en Marsella —murmuró Alan.

Asentí.

¿Dónde vivís?

Vivimos un piso más abajo.

Asentí.

¿Vais a la playa?

Sí. Nos vamos a vestir ahora y nos iremos para allá.

¿Quedamos dentro de quince minutos en el portal?

Asentí.

Hasta luego —sonreí cerrando la puerta.

—¿Qué han dicho?

—El de pelo negro y ojos verdes se llama...

—Sí, Alan. Hasta ahí llego, ¿qué han dicho?

—Pues que nos esperan en quince minutos en el portal.

Pegó saltitos y corrió hacia su habitación. Reí.

Fui a mi habitación y cogí un bikini, para ponérmelo y después, un vestido veraniego.

Caminé al baño, donde estaba Alina metida. Llamé a la puerta.

—Alina, hemos quedado en quince minutos.

—¡Ya lo sé!

A los cinco minutos, Alina salió. Entré y me lavé la cara para después hacerme una coleta.

—Bien, ya estoy.

—¡Yo también!

—¿¡Toallas!? —grité entrando en mi habitación.

—¡Sí! ¡¿Crema solar?!

La busqué por la maleta y la encontré.

—¡Sí!

A los minutos, ya teníamos la bolsa preparada. Cogimos las llaves de la casa y salimos afuera.

Ellos ya estaban abajo.

¿Habéis esperado mucho?

Negaron los dos.

¿Sabéis hablar inglés? —pregunté.

Sí.

Pues hablemos en inglés, que o sino Alina no se entera.

Asintieron.

Desde que te conocíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora