~18~

1.4K 121 13
                                    

Se quedaron observando con profundidad en sus miradas el uno al otro mientras sus iris se expandian y una sonrisa involuntaria se dibujaba en sus rostros.

Chris: Hola! - Dijo él para romper el hielo.

Dulce: Hola- Respondió ella sonriendo mientras separaba un mechón de cabello de su rostro.

Sofía: Vamos!- Interrumpió entusiasmada, tomó a cada uno con su diminuta mano y partieron hacia aquel lugar.

Como lo prometió Christopher era quien conducía,  Dulce iba de copiloto y Sofía en la parte trasera. Casi no hablaban se sentían tímidos. Él recibía indicaciones de Dulce hasta qué decidieron parar.

Dulce: Hasta aquí llegas,  ahora conduzco yo.

ucker: De ninguna manera,  quiero ser un caballero,  por lo tanto yo conduzco.

Dulce: De ninguna manera! - Dijo ella imitándolo -  yo también puedo conducir,  es una sorpresa, no puedes verlo antes de tiempo.
Ahora atrás con Sofía- Le ordena.

Observa la parte trasera y Sofía tiene una cara angelical, los ojos parece que le bailaran y la sonrisa expresaba su alegría,  le indicó con la mirada una cinta que  llevaba en su mano.

Ucker: Es enserio? - preguntó incrédulo.

Sofía: Muy enselio! - mientras se le escapaba una risita. Acélcate.

Levanto los hombros y ordenó lo que pedían las damas. Una vez junto a Sofía, la niña le tapó los ojos con aquel trozo de tela,  los tres se divertian y reían.

Ella observaba por el espejo retrovisor a ese hombre a ciegas,  tan indefensmente sexy, su atención se posaba en sus labios de color carmín y esa sonrisa...Suspiró y al ver a su pequeña princesa tan feliz junto a él,  sentía una sensaión inexpicable, como si su corazón quisiera escapar de su pecho. Quería saber más sobre aquel desconocido que logró ganarse el corazón de un niño,  algo debía tener.
Despegó la mirada de ese par.

Dulce: Ahora sí estamos listos.
Se concentró en el volante.

Anduvieron en la carretera buen trozo de camino.

Ucker: Era ¿Almuerzo o cena?

Dulce: Ya casi llegamos además hasta ahora son las 2 de la tarde. No te quejes tanto.

Sofía: Sí tienes hamble te puedo dal de mis galletitas. Cielto mami?

Dulce: Aja.

Ucker: No es necesario.

Sofía: Sí Chlis!, quielo jugal a que tu elas mi bebé y yo te daba de comel. - Exclamó emocionada.

Ucker: Jaja- Sonrío inseguro. Mejor no.

Dulce: Deberías de jugar así se te hace el camino más corto. - Dijo riendo.

Sofía: Sí,  bebé sí. Polfis!  Polfis!

Ucker: Ay!,  ustedes me van a enloquecer.

Dulce: Ahora estas en nuestras manos,  te tenemos secuestrado,  tú solo disfruta.

Sofía: Bebé toma tu comida no seas malo.. El avioncito... El avioncito.. Able.. Able... Atelizó!,blavo bebé bonito- Le llenó de besos las mejillas y la ropa de galletas.

Y así pasaron el rato...

Dulce: Estamos llegando...

Por fin el carro paró.

Dulce: Listo,  aquí es! Bajen!

Aún tenía sus ojos vendados,  las dos mujeres estaban que no cabian de la risa.

Sofía: Poblecito mami,  quitemosle la venda- Le dijo por lo bajo.

Dulce: Ya casi.

Se sentía un poco mareado. Avanzaron un poco más.

Dulce: Bueno.  Listo.

Le quita la venda y lo que vió enseguida fue maravilloso.
Parecía un parque acuático,  pero era mucho más, escuchar el sonido del agua al caer por esa gran cascada era relajante,  en una parte habían delfines y lobos marinos.
En otro lugar todos los animales eran terrestres, se admiraron al observar una jirafa a lo lejos.

Sofía:¡Chlis quielo que vayamos con los delfines!

Ucker: Me encantaría hermosa pero no traje vestido de baño.

Sofía: Pelo nosotlas si te lo tlajimos complamos uno pala ti!

Dulce: Mujer precavida vale por dos! Pero por ahora vamos a comer que tengo hambre.

Ucker: ¿Quieres ser una bebé? ,  aún quedan galletitas.- Dijo con una sonrisa vengativa.

Dulce: Jajaja, no.

Ucker: Ah,  verdad que no - Sonreía.

Caminaban por aquel lugar,  una parte era agua,  la otra tierra,  paredes de un color diferente en cada rincón,  pasto muy verde,  fuentes de agua,  el sonido de las aves,  el ambiente campestre,  el aire puro.
Bajaron unos escalones de varios metros de profundidad hasta llegar a ver algo extraordinario un restaurante muy elegante pero eso no era lo que llamaba la atención sino su temática,  con solo alzar la mirada se sentía como si estuvieran sumergidos en el océano,  rodeados de gran cantidad de criaturas del mar,  peces de diferentes tamaños y colores hasta uno que otro tiburón melodeaba por el lugar.

Sofía: Te gusta Chlis? - Le toma el rostro para que la mire ya que él la llevaba cargada para que pudiera admirar mejor el panorama.

Ucker: Esto es genial- Con gesto de admiración y alegría.

Dulce: Es maravilloso.

Pidieron una mesa donde se podía apreciar bien la vista,  la mesa estaba decorada con velas lo que hacia el sitio mas armonioso.

Clavaban un momento sus miradas, disfrutaban de su compañía,  Christopher que no creía en el amor y Dulce que pensó que nunca se volvería a enamorar. Poco ha sido el tiempo compartido pero la atracción es evidente aunque traten de disimular.

Una vez terminaron de cenar Sofía los llevó corriendo a vestirse para nadar junto a los delfines.

Dulce llevaba un traje de dos piezas muy provocativo para él. Christopher quedaba extremadamente sexy con él traje de baño que llevaba. Era inevitable no querer mirar más.

Sofía:!¡Vamos! - Corrió hacia los delfines y los tres nadaron junto a ellos. Se tomaron una foto para el recuerdo, parecían la familia perfecta.

Luego de divertirse en el agua,caminaron hasta casi secarse,  tomaban unos helados mientras disfrutaban del paisaje. Una gran jirafa estaba cerca.

Sofía: Qué bonita la puedo tocar?

Ucker: Ven te acerco.

Dulce: Cuidado.

Pasaron junto a los gorilas, aves,  tortugas y todos los animales que habían allí.

Terminaron agotados pero todo valió la alegría por la que pasaron, Sofía cayó rendida.

Christopher las llevó hasta el departamento de ellas. Subió a Sofía y la dejó en la habitación. Dulce lo esperaba en la sala con una taza de café.

...............................
😚😚😚😚😚😚
~DM~

Destinos Cruzados © (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora