— ¡FELIZ CUMPLEAÑOS, CAROL! —chillaron en coro los presentes de Maid Latte al terminar de cantar la tradicional canción.
—Estoy muy agradecida por lo que han hecho. Muchas gracias —comenté con una sonrisa al inclinarme levemente y al ser precavida para que las orejitas de gato no se deslizara sobre mi cabeza.
—Carol, te trajimos un regalo —mencionó Archer junto a Henderson y Rodríguez al entregarme una pequeña muñeca de cera inspirada en mí, no obstante antes de entregarla a mis manos, la cabeza de cera rodó por el suelo. —Demonios, ¡La cabeza!
— ¿Gracias? —susurré al tratar de ignorar amablemente a los tres idiotas y concentrarme en recibir los otros regalos.
—El cumpleaños de Carol, ¿no es el 29? —inquirió Kendall con confusión debido a que era 28 de septiembre.
—Sí, pero ella pidió el día libre. Así que lo estamos celebrando hoy —explicó la gerente con un chillido de felicidad. —Así que celebrémoslo al máximo.
El resto de la noche fue amena, compartí una pequeña comida con las chicas del trabajo, y quizás fue necesario y relajante, pues nuevamente pude tomar un suspiro para continuar con lo que restaba del día y posiblemente de la semana.
—Feliz cumpleaños, Carol —chillaron al unísono al entregarme unos paquetes elaboradamente decorados con moños y cintas de colores.
—Esto es mío —señaló Stella una bolsa color magenta con decoraciones de purpurina. —El de allá es de Beth. El de al lado es el de Gwen, y el otro el de Lauren.
—Son muchos —susurré al recibir los presentes.
—No me vengas con que no los quieres —intervino Lauren cruzando sus brazos. —Sé que hemos tenido diferencias, pero de cierta manera eres una gran persona y te lo mereces.
— ¿Gracias? —susurré indecisa ante el innovador cumplido por parte de la pelinegra.
—Lo que quiere decir Lauren es que es una prueba de nuestro cariño —explicó Gwen con una maternal sonrisa. —Así que, ¿podrías aceptarlos?
—Gracias. Muchas gracias.
...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-
— ¿Lista? —mencionó Marshall apoyado en el muro al frente de Maid Latte en espera que terminara de despedirme de ellas.
—Sí. Y aunque la gerente lo haya dicho, está bien. Puedo ir sola —musité al recordar que Beth le había pedido a Marshall que me acompañara a casa debido a que era tarde.
—Aún si ella no lo dijera, tenía intenciones de acompañarte a casa —explicó al despojarme serenamente de las bolsas que cargaba.
—Gracias —musité observando el pavimento a dirección de mi morada.
ESTÁS LEYENDO
GUARDA MI SECRETO, POR FAVOR *completa*
Teen FictionCaroline Stone es la ruda presidenta del consejo estudiantil, lo que ha hecho que se gane entre los alumnos varones una mala fama por otorgar mayor preferencia hacia las mujeres de la escuela. Sin embargo, a pesar de su apariencia ruda, Caroline tra...