One Shots (Camren G!P)

La chica del chat (Sin g!p)

Hace meses le confesé a mi familia que era gay, quería  vivir  mi vida sin tener que esconderme. Al parece lo tomaron bien, quería conocer chicas pero jamás encontraba alguna que me gustará o qué viviera fuera sin esconderse, mi mejor amiga me recomendó una página donde conocería a chicas, al principio no quería pero un día que estaba aburrida me hice un perfil, y fue lo mejor que pude hacer.

Llevaba semanas chateando con una chica, desde que ví su foto me pareció lo más hermoso del mundo, y al platicar con ella me di que no solo era hermosa también muy inteligente e interesante, y teníamos bastante en común, al principio solo era una charla para conocernos, dos o tres veces a la semana, hasta que esas charla fueron diarias, nos pasamos nuestros números y esas charlas se extendieron de diarias a todas horas, prácticamente nos conocíamos,  después confiábamos tanto la una en la otra que nuestras platicas comenzaban a subir de tono, nos enviamos fotos en ropa interior, charlas muy calientes, que ambas teníamos tantas ganas de conocernos, y ese día llego, nos veríamos en un café cerca de su casa.

Iba un poco tarde, al entrar al café comencé a observar a las personas hasta que di con ella, no podía equivocarme, cabellera larga y negra, labios perfectos, ojos marrones con un brillo especial, toda ella era hermosa y perfecta, camine hasta ella.

- Camila?.- le dije al acercarme, me miró y pude sentir como mi corazón se aceleraba, en la foto se veía hermosa y de lejos, pero a escasos centímetros era más que hermosa y perfecta, su sonrisa hizo que me pusiera nerviosa como si eso fuera posible.

- Enviándote por semanas fotos mías y aún lo dudas.- ví como se levantaba y se acercaba, me dió un abrazo y sin soltarme me dijo.- Que bueno es poder conocerte en persona, eres muy hermosa.- iba a alejarse pero se lo impedí, quería sentirla un poco más.- Tú eres más hermosa, casi estoy por tener un infarto.- comenzó a reir.- Al menos moriremos juntas.- reí con ella y me senté a su lado.

Teníamos casi tres horas platicando, y era increíble, ella era increíble, su sonrisa, sus ojos y sus labios, no dejaba de verlos, tenía tantas ganas de besarla que era insoportable ya, sin pensarlo se lo dije.

- Camila, tengo tantas ganas de besarte ahora mismo.- me miró a los ojos y sonrió.- Y porque no lo haces.- me dijo, sonreí y me acerque hasta que nuestras narices rozaron, nos miramos hasta que los unimos, la abrace del cuello y ella puso una de sus manos en mi cadera la otra en mi nuca, sentí su lengua en mi labio inferior y abrí la boca, al entra en mi boca comencé a excitarme bastante, el beso subió de tono que salió un pequeño gemido, sonreímos entre el beso antes de alejarnos.

- Eso fue...- termine su frase.- Increíble.- sonrió, aún sentía la excitación entre mis piernas, recordé cada mensaje, foto, llamada y se lo dije.- Camila, quiero salir de aquí.- me miró y se puso de pie, ví como caminaba al mostrador y después regresó.- Vámonos.- extendió su mano y la tomé, caminamos hasta llegar aún auto, abrió la puerta y subí.- A dónde quieres ir?.- me dijo al subir, era atrevido pero no aguantaba más.- A tú casa.- se giró y me sonrió.- Será un placer.- condujo unos 20 minutos, los cuales seguíamos charlando como si nos conociéramos de años, nada era incómodo con ella.

Llegamos y me abrió la puerta del coche.- Y llegamos.- me sonrió, la casa era bastante moderna y bastante grande también, abrió y adentro era igual, todo era blanco con colores café y terminados de madera.- Muy bonita.- le dije.- Lo mejor de mi casa es mi cuarto pero ya abra tiempo.- me sonroje y me agache.- Que hermosa te ves sonrojada.- se acercó y me abrazó.- No sabes lo mucho que quería abrazarte y conocerte.- me colgué de su cuello, me aleje y la bese, caminamos así hasta su sofá, la senté y me senté sobre ella.

Hizo mi cabello aún lado y acercó su nariz a mi cuello.- Hueles tan bien Lauren.- me abrazó y me pegó más a ella, chupo de mi oreja a la parte baja de mandíbula, y volvimos a besarnos, nuestras lenguas jugaban y se rosaban como si lo hicieran todo el tiempo, sentí bajar sus manos y tomo mi trasero y lo apretó, gemí entre el beso y ella sonrió.

Subió mi blusa hasta sacarla.- Lindas.- me dijo y volví a besarla.- Y son todas tuya.- le dije, bajo una tira de mi sostén hasta liberar mi pecho izquierdo, se lo metió a la boca, chupaba, mordía, me hacía perder la cabeza, dejo de hacerlo solo para quitar por completo el sostén y meterse el otro a la boca, sin pensarlo comencé a moverme sobre ella, comenzábamos a gemir bajo, le quite la blusa y pude ver los pechos más perfectos, subí las manos y se los apreté, ella seguía apretándome el trasero, me levanto de ella y bajo mi pantalón junto con mis bragas.- Cuando creo que no puedes ser más perfecta me callas la boca.- sonreí ante lo que dijo, se levantó y me sentó en el sillón, abrió mis piernas y acercó su cara a mi centro que por el previo juego ya estaba muy mojado, pasó su lengua de mi clítoris a mi centro.

- Dios Camila.- ya estaba algo desesperada.- Acaba con esto ya.- me sonrió y se levantó, se quitó la ropa, pude apreciar el buen cuerpo que tenía,  se sentó en el sofá.- Ven.- me levanto me giró y me sentó de espaldas a ella, me tomo de la cadera y comenzó a moverme de atrás a delante, podía sentir su humedad en mi trasero y hacía excitarme más, sentí su mano en mi clítoris jugaba con el a su antojo, yo solo gemía cada vez más fuerte.

Metió tres dedos en mi.- Camilaaa.- gemí su nombre, mientras me penetraba con sus dedos, con la otra mano comenzó a jugar con mi pezón, me dejé caer y podía sentir como seguía frotándose en mi trasero y sentía sus pezones rozar en mi espalda, saco sus dedos de mi y me acostó en el sofá, se acostó sobre mi y comenzó a moverse, lo hacía lento, Volviéndome loca, el roce de nuestros clítoris y el de nuestros pezones me llevaba al borde, ella lo hacía perfecto, aceleró su movimiento, cuando estaba por llegar ella metió dedo dedos en mi y de nuevo comenzaba a penetrarme, lo hacía rápido, acerque su cara y comence a besarla estaba cerca, salió de mi y unió de nuevo nuestros clítoris, la tomé de su perfecto trasero y la ayude acelerar, sentía escurrir mi sudor y el suyo.

- Así Camila, no pares.- le grité.- No trato de hacerlo ahh.- me dijo, y su gemido me hizo llegar, y ella llegó también, nuestros orgasmos se unieron, ella cayó sobre mi.- Lauren eres increíble.- me dijo, ella lo era también.- Tú lo eres, y espero podamos hacerlo alguna vez de nuevo.- levantó la cara y me sonrió.- Pero aún no acabo Lauren.- me sonrió y me levanto del sofá.- Sera una tarde larga para ti Lauren.- eso bastó para excitarme, me tomo de la mano y subimos las escaleras.
Sería una tarde muy movida al parecer...