XIV

502 27 2
                                    


Entré a mi oficina con Hanji detrás.

- Mírate la cara... -Hanji me miraba con una sonrisa burlona, con las mejillas rojas miré los documentos que tenía que ordenar en mi escritorio. – Cuéntame todo, nena. –se sentó en el sofá mirándome atentamente.

- Umm... Bueno, fue... -jugué con mis manos recordando cada caricia y palabra. – Intenso. –enarcó una ceja. – Teníamos diez condones y todavía nos faltaban... –esta abrió su boca sorprendida con un ligero tono rosa en sus mejillas.

- ¡WOAH! –exclamó con una sonrisa de oreja a oreja. – Es muy atento, fue a consultar conmigo que sería bueno regalarte, quería sorprenderte. –la miré atontada ¿Puede ser más mono? –Claro que, yo le di la idea de la comida y dijo que lo tendría en cuenta. –abrí mis ojos.

- ¿A-Ah? –negué con la cabeza tratando de apartar mi fantasía. – B-Bueno, c-cambiando de tema... -Hanji gimió llamando mi atención.

- ¡Oh! ¿Has llamado a tu madre? A ver sí me avisas temprano y cuadro a Levi para que pasemos navidad juntos. –le dediqué una dulce sonrisa antes de agarrar mi móvil.

- Deja la llamo. –busqué en mis contactos hasta encontrar el nombre de mi madre.

Llamé y luego de un par de tonos atendió.

- ¿_tn?

- Hola mamá.

- Hola cariño ¿Cómo estás? –miré a otro lado con una sonrisa tonta.

- Perfectamente. –hubo un corto silencio. – Mamá, quería preguntarte... ¿Esta navidad vienes?

- Ouhg, respecto a eso... -hice una leve mueca, mientras que Hanji frunció sus labios. – Puede que solo me pase un rato para verte, y te presentaré a Jason. –miré el techo.

- Umhg, claro, me avisas entonces... -colgué sin esperar respuesta.

- Pero cari, tu también tienes alguien que presentarle. –mis ojos brillaron ante la idea.

- C-Cierto...

Toc, toc, toc

Ambas miramos la puerta, permití el paso y Mike asomó con una pequeña sonrisa, tenía una chaqueta de cuero negra seguramente para ocultar el hecho de que traía la misma ropa de ayer.

- ¿Permiso? –disculpó con voz ronca.

- Uh, bueno. – Hanji me miró con una sonrisita. – Ya le avisaré al enano y también hablaré con Erwin a ver que dice ¿Va? –asentí sonriéndole.

- Vale, nos vemos en el almuerzo. –esta me guiñó un ojo antes de marcharse. Mike se acercó a mí una vez la puerta estaba cerrada.

- Uh, ¿Almorzarás con Hanji? –hice una leve mueca.

- Emhg, no, bueno, p-puedo ir a decirle que no y-... -este negó con la cabeza recargándose de sus brazos en el escritorio, acercando su rostro al mío.

- Está bien, no hace falta, amor. –besó suavemente mi frente, atontándome. – Eso sí, te reclamó antes que nadie para ir a cenar... -sonreí.

- Por supuesto. –sostuvo mi barbilla alzando mi rostro para depositar un dulce beso en mis labios.

- Pasaré por ti a tu casa, quiero que te pongas cómoda, espero que no te moleste ir a cenar a mi casa. –negué con la cabeza ahogando mi euforia.

Office Game (Mike Zacharius)Where stories live. Discover now