Capítulo 11

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-¡¿Mantendrás la cafetería cerrada por tres días?! - Pregunté sorprendida.

-Claro, un montón de rumores corren al rededor... - Dijo Namjoon mirándome de reojo.

-¿Estás enojado conmigo? -

-¿Por qué debería estarlo? -

-Es por mi culpa que mantendrás cerrada la cafetería... - Mordí mi labio inferior - De verdad lo siento, prometo no volver a meterme en problemas -

-No te preocupes, yo me aseguraré de que eso pase -

-¿Eh? -

-Ya no serás camarera, ahora te encargarás de la cocina junto con los chicos - Añadió señalando hacia aquella lujosa e impecable cocina.

-¡Pero yo no sé preparar café! -

-¿Quien dijo que aquí solo servimos café? - Me ofreció una sonrisa.

-Como sea... - Bufé estando desilusionada de mi nuevo cargo.

-¿Quieres acaso seguir siendo camarera? - Preguntó mirándome fijamente a los ojos.

-¿Tu que crees? - Sonreí para intentar convencerle.

-Vale... Entonces hagamos un trato - Dejó de limpiar los vasos que se encontraba limpiando para caminar hacia mi, quedando a tan solo escasos centímetros de mi rostro - ¿Que tal una noche de películas? -

-No me gusta el cine - Sonreí mirándole fijamente.

-A mí tampoco - Pasó la mirada a mis labios - Siempre hay mucha gente allí -

-¿A sí? - Tomé con la punta de mis dedos, un mechón de cabello que caía frente a sus ojos - ¿Me llevarás a tu casa entonces? -

-Puedo llevarte a donde quieras -

Ese chico definitivamente estaba muerto por mí, cualquier persona podía verlo a leguas. Pero aunque fuese así, yo no le tenía en mente de la misma manera en como él me tenía a mi; para mi era mucho más interesante el hecho de que Min YoonGi hubiese regresado a Corea.

-¿Entonces, a donde quieres ir? -

-Déjame pensarlo - Le ofrecí un guiño y me aparté de él dispuesta a buscar mi cartera para regresar a casa.

Y justamente, cuando logré recoger mi cartera, un chico abrigado con un chaleco negro, pantalones de jean negros y tenis negros junto a un tapabocas y una gorra que cubría casi por completo su rostro; ingresó a la cafetería sin decir una palabra.

Al principio pensé que era un asaltante, por lo que me alarmé un poco.

Pero luego, aquel misterioso chico se deshizo del tapabocas para luego mirar directamente hacia mí ofreciéndome una preciosa y radiante sonrisa. Aquel apuesto muchacho, era nada más y nada menos que el mismísimo Min YoonGi.

-¡Hola! - Me saludó caminando sin reparamientos hacia mi.

Yo ni siquiera estaba segura de si podía respirar, el maldito lucía endemoniadamente sexy y encantador. Ahora sabia con seguridad cual era la razón por la que sus fans babeaban sin parar al ver a ese chico que ahora se encontraba frente a mi.

-Supuse que podía encontrarte aquí - Volvió a sonreír él - ¿Estás trabajando? - Añadió mirando a su alrededor.

-No... La cafetería no abrirá el día de hoy - Logré decir.

-Entiendo, debe ser complicado abrir luego de lo sucedido ayer - Regresó su mirada a mi rostro - Escuché por las noticias que una camarera de aquí apuñaló a un hombre -

Obligandote a Amarme  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora