Me metí al salón de música, donde sabría que nadie me molestaría en se momento.
Prácticamente desaparezco cuando estoy ahí, es decir, nadie me nota, además entro cuando está vacío.Encontré unas partituras de piano con la 9° sinfonía de Beethoven y empecé a tocar para calmarme, sentía como la paz en mi interior aumentaba. Ese pequeño momento en mi vida es felicidad para mí.
De pronto la puerta se abrió, vi entrar a un muchacho de mediana estatura, obviamente más alto que yo de cabello oscuro y grandes ojos, que temblaba ante mi prescencia. Alzó la vista hacia mí, lo noté demasiado nervioso, intentaba decirme algo pero no entendía.
— Habla claro, ¿qué haces aquí? —dije seria— ¿se te perdió algo acaso?, puedes decirme no te mataré; no soy homicida.
— Si señorita, y-yo, dejé unas partituras por aquí —bajó la vista— pero veo que las está utilizando así que... no quiero molestarla.
—No descuida son tuyas, ten toma, aquí las tienes —tendí sus partituras—gracias de todas maneras.
—Usted... toca muy bonito el piano
—dijo recibiendo sus partituras.— ¿Eres nuevo cierto? No me hables con formalidad, de seguro tienes la misma edad que yo en la escuela, me presento, mi nombre es Kim...
—Kim (__), conocida como el Iceberg Kim, la chica que todo chico debe temer y no debe estar cerca... pero y-yo creo que no es así señorita.
O sea, sí es de temer pero creo que hay calidez en su interior, además toca hermoso. Oh lo siento, no me he presentado, mi nombre es Kyunsoo y es un gusto conocerla —hizo una reverencia y me dedicó una sonrisa— bueno debo retirarme ahora, espero volver al verla sin duda alguna. Es usted una chica muy bonita como para ser llamada iceberg sabe, pero bueno son cosas que uno no sabe por ser nuevo. Me agrada.—Gracias Kyunsoo —sonreí— adiós.
A decir verdad ese chico me cayó bien, creo que mi alma de hielo se está ablandando, puede que sea bueno o puede que no.
Tal vez darle oportunidad a estas cosas y tener amigos sea divertido.
¡Pero no! Claro que no, aunque el chico nuevo es diferente.
Aun sabiendo todo eso de mí no salió corriendo y tampoco se me dió por hacerlo correr.
Cielos, pensar de este modo es culpa de ese tonto, ahora me desconozco.No dejo de pensar en él por mucho esfuerzo que estoy haciendo y, recordando lo de las chicas creo que tienen razón, pero aún así, seguiré esforzándome por no caer, aunque ya mis esfuerzos están siendo en vano.
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Aprendiendo Sobre el Amor | Sehun y Tú
Fanfiction¿Puede alguien que no cree en el amor y que detesta que cualquier chico se le acerque, aprender a amar? ¿Pueden sus sentimientos cambiar con el tiempo? Veamos que pasa con (___) cuando llegue a conocer a Oh Sehun, el chico más popular y apuesto de l...