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El autobús se puso en marcha.
Ella, yo y más personas íbamos de pie.
De pronto el conductor detuvo de golpe el vehículo, todos nos fuimos con fuerza hacia adelante, me sostuve fuertemente con un brazo y con el otro rodeé el cuerpo de (__) para que no cayera.

— ¿Te tengo, te encuentras bien?

— Sí... gracias.

— Y decías que algo como esto no pasaría —sonreí.

— Lo sé y por eso te lo agradezco.

— ¡LO SIENTO, TODOS ESTÁN BIEN ALLÁ ATRÁS! — dijo el conductor.

—¡Sí! —respondimos.

Nos enteramos luego que un niño se había atravezado en medio de la autopista y por poco lo atropellan. Por suerte esa desgracia no ocurrió.

Acompañé a (__) de camino a casa, pasamos un rato por el café de aquella vez y conversamos un poco como si nada hubiera pasado lo cual fue agradable.
Pero además de eso ella habló un poco del chico ese, el tal Kyunsoo que había conocido. Al parecer le cayó bien pero eso no importaba mientras ella y yo hablemos como siempre.

◇◇◇

Fuimos a su casa luego pero antes de entrar ella comentó que le dolía la cabeza mucho, aún así me invitó a pasar y ya dentro ella se desmayó, la tomé rápidamente en mis brazos y la coloqué en el sofá, corrí por un poco de alcohol y traté de que recibiera suficiente aire.
Luego de unos largos minutos ella despertó, coloqué paños fríos sobre su cabeza para calmar su dolor en tanto traía algún analgésico.

— Sehun... gracias por cuidar de mi
—dijo con un hilo de voz— sé que no es la primera vez que lo haces así que te compensaré esto concediéndote un deseo —continuó débilmente dedicándome una sonrisa.

— Uhm,  ya que lo dices.... qué tal si salimos este fin de semana.

— ¿Salir?, ¿a dónde iríamos?

— ¿Qué tal al cine?

— De acuerdo vayamos, pero ya no me besarás verdad.

— No lo haré sin tu permiso pequeña, lo prometo porque... te quiero
—respondí sin pensar en lo último— oh cielos no, yo...

— Descuida, de igual modo aunque no lo crea, también te aprecio —sonrió y besé su frente— gracias una vez más Sehun, ahora solo quiero descansar. ¿Me podrías ayudar a ponerme de pie para ir a mi habitación?

— Sí pequeña —la ayudé y la llevé a su habitación, la cubrí bien y le llevé una taza de té con miel y limón— bebe esto y descansa.

— Bien — lo bebió— ve a descansar tu también, nos vemos mañana en la biblioteca.

Dicho eso ella cerró los ojos, era como una muñeca de porcelana, hermosa y delicada cuando dormía.

Me fui luego a casa donde ya me esperaba mi madre con la cena lista y aunque estaba lleno por el pollo, no podía decirle que no a su comida. Además ella cocinaba delicioso.

La acompañé a ver un poco de televisión, charlamos sobre mi padre quién supuestamente vendría en una semana. También me pregunto sobre (__) que por cierto recien hoy le dije su nombre y hablé muchas cosas de ella a lo que mi madre quedó encantada.
Creo que le agradó el pequeño iceberg aunque no la conociera, confesé que estoy confundido con lo que siento a lo que ella dijo que es una tontería pero que aún así me daría cuenta de verdad de lo que siento aunque ella deducía de por si que (__) me gustaba mucho.
Y de tanto hablar caí en la cuenta de que lo que mi madre decía era verdad, que mi confusión es solo una tontería, porque me di cuenta que (__) realmente me gusta.

Estaba feliz por eso y preocupado de que ella no lo note o de no ser correspondido, pero vale la pena intentar y si me rechaza alguna vez, sabré que di lo mejor de mí.
Fui a descansar después de pensar todo eso, aunque de tanta emoción creo que conciliar el sueño era una tarea difícil.

Aprendiendo Sobre el Amor | Sehun y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora