Aprendiendo Sobre el Amor | Sehun y Tú

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(__)

Aquella noche después de que Sehun se fuera, me sentí extrañamente bien por no decir felíz.
Me era una sensación nueva, pero no me permitiría sentir algo más, no caería en sus juegos, aunque me esté cayendo bien.

A la mañana siguiente desperté tarde como siempre para ir a clase, esta costumbre me estaba trayendo problemas y es que me es todo un caso salir de la cama por más que trato.
Me puse lo primero que encontré en mi armario, tomé mis cosas y salí de casa sin tomar desayuno, sabía que me arrepentiría luego pero era más importante llegar a tiempo a la escuela.
Una vez más iría a pie ya que mi madre había salido muy temprano con el coche.

Durante el camino, me sentí observada, quiero decir, no era una de esas sensaciones normales cuando alguien te observa, esta en particular me asustaba un poco.
Caminé un poco más rápido y al ver la escuela entré corriendo, antes de que cerraran la puerta volteé a ver de quién se trataba y vi que se trataba de una chica, al cual no podía verle el rostro, pero sus ojos... sus ojos me eran conocidos de algún lugar.

Traté de no darle importancia, corrí y tuve suerte de que el maestro de inglés aún no llegara; me senté junto a Tiffany porque Sahara estaba junto a Jong In tratando de sacarle algún tipo de información sobre su súper amor platónico, Jong Dae.

- Esto realmente me va a volver loca (__), cuando acabe la clase no hará más que hablar sobre Jong Dae. De veras que me dan ganas de ir y decirle todo a ese chico -se quejó Tiffany-. No sé cómo la soporto tanto.

- Porque es nuestra loca amiga -reí- Tomemos esto a la ligera.

- Sí, claro -suspiró-. El día que me guste alguien no haré lo que ella, definitivamente no.

- Ya lo veremos -di palmaditas en su hombro.

- Por cierto, al parecer Emme no ha venido hoy.

- ¿Qué?, ¿llevamos la clase con ella acaso? -dije desconcertada.

- Claro que sí solo que no se da mucho a notar.

-Ah ya veo...

En ese momento no sabía que pensar, no pienso que ella sea mala o ¿tal ves sí?

No la conozco lo suficiente como para juzgarla, quién soy yo para hacerlo; juzgar sin base solo me haría una más del montón.
Aún así, el incidente anterior con Sehun solo fue un malentendido.
Pero en fin, salí de mis pensamientos en cuanto llegó el maestro.
Pero la duda aún seguía en mí.