Te quiero aquí... (Katsuki Bakugou y tú)

Capítulo 12: Sí

Lo primero que pensé fue en salir corriendo, luego me di cuenta de que él era más rápido que yo, y seguramente me explotaría la cara al momento; después, quise quedarme callada esperando a que el timbre sonara salvándome de esta, pero al girar mi cabeza hacia la izquierda, vi el enorme reloj justo en mitad de la fachada, y aún quedaban unos diez hermosos minutos de "libertad", pero ahora mismo, nunca había deseado tanto que llegara la hora de biología.

Intenté hacerme la dormida, sin embargo sería demasiado estúpido pensar que se lo creería; seguidamente quise reírme, tratando de aparentar que era una broma, pero, Katsuki, al ver que no le respondía, me giró, obligándome a observar su cara seria; por lo que, también descarté esa idea.

-Katsuki: ¿Siempre te callas cuando debes hablar, y hablas cuando no?- Sonrió con autosuficiencia.

Quise quedarme callada, de verdad que quise, pero mi sistema nervioso no obtuvo las señales que le enviaba mi cerebro, por lo que mi boca no procesó la información, dejando por mentirosa a mi capacidad para hablar.

-_____: ¿Eh?-

Y otra vez. ¡Qué lista soy, por Dios!

Empecé a balbucear sin siquiera pensarlo, y no paré hasta que lo vi alzar una ceja, dándome cuenta de lo que hacía.

-Katsuki: A ver, maldita. Sólo tienes que decir sí o no.-

Le faltaba añadir, depende de lo que digas te exploto la cara o no.

-_____: Sí.-

Y otra vez, dejándome en evidencia, mi capacidad para socializar se está obstruyendo, bueno, ya está obstruida.

Katsuki volvió a sonreír, sólo que esta vez sin tanta arrogancia. Me giró y hundió su nariz en mi cuello. Cuando pude relajarme, eché mi cabeza hacia atrás hasta que chocó contra su clavícula, a la vez, dándole más espacio a él. Sus manos rodeaban mi cintura, las mías estaban unidas encima de mis piernas, las cuales estaban estiradas justo al lado de las de Katsuki.

-_____: Entonces...-

-Katsuki: Somos novios.-

Terminó mi frase, hablando roncamente, con su aliento chocando contra mi piel, provocando que esta se erizase. Mordí mi labio inferior levemente, conteniendo una sonrisa. 

Sólo quería escucharlo salir de sus labios, y aunque me hubiera gustado que me lo pidiese de forma, un poco, más romántica, no se podía pedir más; era lo que quería desde hace tiempo, y aunque fuese falso y temporal, por ahora, me conformaba.

Sonó la campana, ahora sí, ¿eh? Antes no, pero ahora que no quiero, sí. Lo hace a propósito, estoy segurísima de que sí. Esto no es normal.

Hice amago de levantarme, pero Katsuki me apretó más contra él. Pegó un largo suspiro contra mi cuello.

-Katsuki: No vamos a ir, nos quedaremos aquí.-

-_____: Pero Katsu... Bakugou, verán nuestras cosas en clase y...- Chasqueó la lengua y se separó de mi.

-Katsuki: ¿Dónde está tu clase?- Me miró mientras se levantaba y se sacudía el pasto de los pantalones.

Me quedé atontada con su pregunta, llevamos tres años aquí, y todavía no lo sabe.

-_____: A dos clases de la tuya.- Intenté levantarme, pero me paró, más bien me tiró del brazo hacia abajo para que volviera a sentarme. Hice una mueca del dolor.

-Katsuki: Ahora vengo, no te muevas.- Se dio la vuelta y empezó a caminar hacia las escaleras. -Ah, y llámame Katsuki.-

Sonreí involuntariamente, una sonrisa de tonta enamorada, pero una sonrisa sincera al fin y al cabo. Me apoyé en la pared y miré hacia mis manos, las cuales se removían nerviosas en su sitio.