Simplemente tú.

Revelación de la verdad: Te sigo amando

Después de un año, Serena decidió recibir la visita de su mejor amigo Andrew, ya que este insisto en varias oportunidades, pero no había querido hacerlo por miedo a que este llegara con Seiya

―Hola Andrew. ―Lo abrazo.

― Es bueno volver a verte después de tantos meses.

― ¿Cómo están mis padres? ―Fue lo primero que dijo.

―Bien al igual que tu hijo, recién va a entrar a la escuela. ―Dijo entregándole una carta de su pequeño.

― ¿Y el? ¿Aun sigue con Laura? ―Hablo indiferente.

―Si. Dentro de poco se casará con ella, a pesar de que no ha podido olvidarte, ve diariamente a tu familia, te envía saludos cada que le digo que intentare verte.

―Ojalá sea feliz con ella. ―Suspiro llena de celos.

Andrew noto que esta se sentía mal ya que no podía ocultar su ira.

―Oye Serena, solo quería saber si conoces esto. ―Saco aquel frasco.

―Si, era el sedante que usaba para dormir a los imbéciles que me querían tocar. ―Lo ignoro de inmediato, no deseaba recordar aquellos días nunca mas.

― ¿Entonces nunca te acostaste con ellos? ―Pregunto aun sabiendo ya la respuesta.

―No Andrew, jamás lo hice, tenia miedo y desconfiaba de todo hombre hasta que el apareció. ―Ya estaba cansada de responder sus preguntas.

― ¿Seiya? ―Contesto el chico.

―Si, ahora es tarde para arrepentirme de no haberle dicho la verdad, se va a casar con ella y lo perderé porque no puedo hacer nada. ―Hablo desesperada.

― ¿Ella te tiene amenazada? ―Respondió el joven al verla tan decaída.

― ¿Que? ―Melissa estaba anonadada.

Le paso el papel de la investigación y esta se dio cuenta aterrorizada de todo lo que había descubierto por su cuenta.

― ¿Qué es esto? ―Dijo petrificada.

―Después de que me pediste que no te volviera a ver; empecé a investigar cada detalle de tu caso, mas cuando le dijiste a Miguel que eras la sirena de Jedite. ―Respondió.

―Y si lo soy. ―Sus nervios estaban a flor de piel.

―No es cierto Melissa, tu eres una victima de esa mujer porque se que vino a verte antes del juicio. ―Andrew le recalco mostrándole la evidencia.

Serena estaba en shock, no podía ser cierto, ahora temía que algo les pasara.

―Esa mujer es nada mas y nada menos que Michiru Kaioh, la ex novia de Seiya, aparenta ser una famosa violinista, pero es una desalmada mujer, es la cabeza de la organización criminal. Ahora tu quedaras libre y la atraparan.

―No puede ser. ¡Los van a matar! ―Serena se desespero ante aquella revelación de su amigo.

―No lo permitiré Serena.

Seiya apareció abriendo la puerta del lugar, ella no lo dudo y corrió a sus brazos, momentos después los tres salieron rumbo a un auto custodiados por los guardias de la cárcel y sin que nadie los notara fue llevada a su casa.

― ¿Es verdad que estas con ella solo por esto? ―Dijo Serena después de un rato de viaje.

―Sabes que jamás me acercaría a ella con esa intensión, no sabes las cosas que descubrí, lo bueno fue que te conocí. ― Seiya le tomo las manos y la beso.

― ¿A donde iremos? ―Serena se sentía muy tranquila al lado de Seiya

―El mismo juez que te sentencio, me pidió que te investigara ya que no quedo tan convencido de tu culpabilidad, así que en cuanto le di las evidencias me dijo que fuera por ti.

―Debemos darte protección por un largo tiempo ya que esto se pondrá feo. ―Seiya

― ¿Como? ―Serena hablo impresionada.

―Te darán una nueva identidad y junto a tu familia se irán lejos de aquí, es la orden del juez. ―Andrew

― ¿Lejos? ―Serena miro a Seiya con tristeza en su mirada.

―Así es mi Melissa. ―Seiya beso su mano.

― ¿Tu, no iras? ―Serena.

―Quisiera, pero debo estar al tanto de esto, pero recuerda que te estaré esperando siempre. ―Seiya

Serena le dio un beso y continuaron su camino a casa para preparar todo para marcharse antes de que todo ocurriera.