t r e s

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Tyler había aceptado hacer el trabajo así que esperaron a que fuera el sábado en la mañana ya que ese día el castaño no trabajaba y además tenían información que el dueño de la casa no estaba en el día.

—Pensé que Melanie iba a venir, Dallon.

—Se le presentó algo, así que sólo seremos tú y yo —dijo el alto—, además lo que nos dijeron es que iba a ser algo fácil —Dallon; un alfa demasiado alto y bastante apuesto de tes blanca y mandíbula marcada—. Tu entras y yo te espero en el carro, sólo coges lo que puedas y no te demores.

—Entonces yo soy el que arriesga el pescuezo ¡que emoción! —soltó sarcástico el Tyler.

—Oye no te preocupes, en esa casa no se mantiene nadie según lo que nos dijeron y tu al no tener aroma ni te notas —intentó animar el mayor—. Además eres muy ágil y claro me tienes a mi —concluyó regalandole una sonrisa tranquila al castaño y claro, Tyler confiaba en ese chico alto que en mas de un momento lo ha rescatadoy ayudado—. Bueno, creo que ya estamos llegando —se miró una gran mansión a lo lejos.

—Es grande, seguro que es ahí...

—Si... cualquier cosa sales que yo no me iré sin ti ¿correcto?.

El castaño asintió. Llegaron al lugar y Tyler se alistó con lo que necesitaba; se puso unos guantes y una gorra.

—Te esperaré junto a esos arboles —habló el alto apuntando a su costado.

—Listo, llevo mi celular cualquier cosa marcas —Tyler escaló la reja del lugar y con mucho cuidado se dispuso a entrar a la casa sin saber lo que se acercaba.

[•••]

No muy lejos de ahí iba un tintado de azul eléctrico y su madre en un carro lujoso color negro

—Hijo en verdad no me gusta verte de tan mal humor —la rubia miró a su hijo—. Josh ya deberías acabar con ese matrimonio.

El tintado chasqueo su lengua y habló:— ¿Y dejarles lo que nos pertenece?, ¿a ellos?, claro que no Laura —miró a la ventana—. Todo es culpa del bastardo que elegiste como padre mío.

—Lo sé y sabes bien que yo estuve en contra de ese estúpido testamento. Es que sólo a ese imbécil se le ocurre primero poner como condición para recibir la mitad, que te casaras con Deborah y dos, que para recibir la otra mitad debes tener un hijo alfa —pasó una de sus suaves manos por su rubia cabellera—. Peor aún, si te divorcias ellos quedan con todo y si no hay heredero todos pierden —bramó.

Ya había sido tres años de la muerte del padre de Josh y tres que llevaba casado con Deborah Ryan.

—Ni me lo recuerdes que me dan ganas de revivirlo para matarlo otra vez —el tintado iba enojado ya que venia de una reunión con su "suegro".

—Joshua tenemos que hablar —habló el señor, padre de Debby—, un no has embarazado a mi hija y ya llevan tres años de casados —estaba sentado en frente del escritorio del azabache.

—¿Y eso es su maldito problema por...? —a Josh no le agradaba para nada ese hombre y podía notarse.

—Sabes que un heredero es necesario para las dos familia. Sinceramente creo que eres un alfa ineficiente.

—Vea pedazo de suegro, con todo el puto respeto que se merece ya he llenado a su queridisima hija de tanto semen que está que se le sale por la oreja y no queda preñada así que no es mi maldito problema —su mandíbula estaba tensa del enojo—.  Mas bien vaya a joder a otra parte viejo interesado que no crea que no se que lo que usted busca es mi dinero pero se jodió —sonrió burlón—, lo que pase en mi matrimonio es mi problema y yo veré como lo soluciono.

La mirada que le daba el tintado le causo un escalofrió al señor Ryan.

—Recuerde, Joshua que sólo nos queda un año de plazo para que se cumpla la clausula y si no, los dos perdemos —dijo el hombre como término para retirarse del lugar.

Josh sólo bufó astiado.

—Yo no tengo la culpa que ella no salga en embarazo ya que la he cogido suficiente y en verdad me desespera —soltó con fastifio.

—Además que no sientes el aroma de su celo ni nada por el estilo, sería mejor que buscaras a tu destinado es mas probable que...

El tintado no le dejo terminar:— Sabes muy bien que no creo en eso y menos sabiendo el fallo de nariz que tengo... Ya lleganmos —dijo cuando empezaban a acercarse a la mansión.

[•••]

Dentro de la mansión un castaño había ingresado a una de la habitaciones.

—Vaya que es grande, seguro ésta debe ser la principal —estaba rebuscando los cajones pero cuando estuvo cerca a la cama un delicioso pero leve aroma le llegó—. Huele a menta —canturreó extrañamente tranquilo. Se acercó a una de las almohadas donde se concentraba el aroma—, que rico —por un leve momento se desconectó del mundo para percibir mas ese aroma sin darle mucha importancia a un calorsito que se comenzaba alojar en su vientre.


Miesntras tanto, afuera de la mansión el chico alto vió un auto llegar.

—¡¡Mierda mierda mierda!!  —sacó su celular y comenzó marcar no obteniendo respuesta—. ¿Porqué carajo tienes el celular apagado?... Sal de ahí por favor —suplicaba nervioao hasta los pelos.



—Vamos en el despacho tengo lo que me pediste —dijo el tintado tras haber bajazdo del auto. Ingresaron a la mansión y Josh se detiene en seco—. ¿A que huele?

—¿Pasa algo? —pregunta dudosa la mujer.

—¿No lo sientes? —dijo aspirando hacia el aire—, canela y miel...

La mujer abre los ojos como platos ya que eso le trajo un recuerdo de hace años.
El tintado ingresó corriendo y subió directo al segundo piso siguiendo el aroma mientras la mujer lo seguía.

En la habitación

—Mierda... —Tyler sintió de un momento a otro mas potente el olor pero no venía de la almohada, era un olor como a menta. También se dió cuanta de ese creciente calor que bien conocía pero que no debía presentarse aún— ¿Q-que me está pasando? —a medida que el olor se iba acercando, el calor iba aumentado y el castaño se asustaba más, hasta que la puerta de la habitación fue abierta de golpe.

—Te encontré... —dijo una ronza voz en la puerta.







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Y ya bai kahsbdkdns

ALQUILADO   ||  joshler;omegaverse ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora