Raisha sale del baño y se mete en la cama refugiándose en los brazos de Serkan. El que la conoce mejor que nadie sabe que algo le pasa, su mirada triste y pensativa la delata y es que su Raisa es totalmente transparente para el, dos corazones que siente lo que sucede con el otro.
- Que te preocupa Raisha- le pregunta apretándola contra su cuerpo, ella se delita en sentir sus latidos y es que aun hasta el día de hoy no ha podido superar del todo haber estado a punto de perderlo.
- Es Khaled y esta situación que puede hacerle daño-suelta finalmente- esa rabia que hay en su interior y los enfrentamientos con Hessa. Sabes que ha tenido la presión alta y tengo miedo no puedo evitarlo.
- Temes que el stress afecte su corazón, ¿puedes estar exagerando?,- trato de tranquilizarla restándole importancia al hecho- aun no has superado lo que paso conmigo y lo proyectas en el.
- Puede ser- concedió- y tienes razón no he superado lo tuyo, no del todo.
- Raisha voy religiosamente a mis chequeos médicos, todo esta bien. No dejes que el miedo te robe la paz- deposito un dulce beso en la coronilla de su cabella y le aseguro- Nada va a pasar a tu hermano ni a mi.
- Tratare de no pensar en eso-acordó- solo quiero seguir ayudando a Aastha y que esa situación por lo menos se solucione, ya quedara de parte de Khaled olvidarse de su resentimiento, para aspirar volver a estar con Hessa.
- Así es todo depende de ellos, yo aprendí por experiencia propia que siempre hay que decir la verdad, tu y yo estuvimos a punto de perdernos y para siempre así que jamás dejare que ningún secreto bien será con buenas intenciones me aleje de ti. Aclarado esto, Sra. Boran demando toda su atención, es posible.
- Eres mi prioridad y sabes que logra disipar mi mente de todo pensamiento.
Su mirada coqueta la lee perfectamente y acuerda
- Lo se.
Asi como sus mentes se leen perfectamente, sus cuerpos también y estos siempre sabrán cuando el otro lo necesita.
Serkan devora su boca con excesiva dulzura, sus labios suaves, pacientes toman los suyos, a el le encanta darse su tiempo, llenarla de besos húmedos, tocar cada centímetro de su cuerpo, buscar primero el placer de ella, sentirla al limite.
Son los momento que ella siente sin palabras que el le dice "aquí estoy y jamás te voy a dejar".
El se posiciona sobre ella mientras ella introduce sus manos debajo de su franelilla y tocar su abdomen bien trabajado por el ejercicio, sus pectorales hasta terminar despojándolo de ella para luego hacer lo mismo con su chándal y tocarlo hasta que lo siente tensarse de puro placer anticipado.
Ella sabe que el se complace en que tome la iniciativa en ese sentido y cada noche esto se vuelve una experiencia única.
Su cuerpo ahora desnudo se arquea dispuesta a recibirlo como siempre con deseo que no se apaga, con necesidad de unir sus cuerpos pero también sus almas.
Ese momento especial que sabe a eternidad juntos.
Al dia siguiente, como todas las mañanas comparten su desayuno en la cocina con sus tres hijas, el bebe duerme, mientras ellos dos se preparan para ir ese día a sus empresas.
Raisha acompañara a Aastha a las empresas de su padre porque le ha ido enseñando todo el manejo de las mismas, y Serkan ha logrado equilibrar su tiempo, de modo que aunque va dos o tres veces pro semana a la empresa, prefiere llevar el negocio desde su casa.
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Destinados II Volveras a Mi
RomanceKhaled y Hessa no estaban destinados Pero asi como un príncipe no elegía con quien casarse El corazon si lo hacia y sus corazones y sus almas habían elegido amarse Pero la desconfianza y los celos, la inmadurez arruino sus vida y los sumio en el dol...