Reencuentro

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No dije nada mas, me fui para lahabitación a buscar algo de ropa.Me puse un vestido ajustado azul yunos tacones negros.Volví al salón y cogí mi teléfono.Salí deledificio y cogí un taxi que me llevó hasta el restante donde habíaquedado con Brandon.

-Te ves hermosa-Dijo Brandon.

-Tu también-Le di un beso yentramos en el restaurante.

-Gracias, de verdad-Dijo y me dioun fuerte abrazo.

-¿Porque?-Dije sorprendida.

-Yo creo que no hubiera sidocapad de encararme a mi familia para romper el compromiso.

-Ah bueno, es que no podíaseguir así, nuestros padres no pueden decidir sobre nuestra vida.

-Ya.

Seguimos cenando durante un rato, ycomo quería olvidarme de lo que había pasado en casa de Juan Luis,le ofrecí a Brandon de ir a alguna discoteca.Estivimos bebiendomucho, bueno en realidad yo, porque Brandon no quiso.Me pasédemasiado de copas, no me mantenía en pie.

-Inna vamos a casa, estas mal.

-No, un rato más.

No me hizo caso y me cogió enbrazos y me metió en su coche, y me llevó a casa de Juan Luis, enel trajecto de coche me quedé dormida.

Narra Juan Luis:

Estabaen la cama pensando en lo que había pasado con Inna cuando escuchoel timbre, así que me levanto y voy a abrir la puerta.Era un chicounos años menor que yo, y tenía a Inna dormida en brazos.

-Quepasó?

-Sepasó de copas-Dijo aquel chico.

-Ven,dejala aquí-Dije guiándolo hasta la habitación.

Ladejó sobre la cama y volvimos al salón.

-Graciaspor traerla-Dije ofreciéndole mi mano-Por cierto soy Juan Luis.

-Nohay de que, yo soy Brandon.

-Quepases buena noche-Le dije.

-Igualmente.

Salióde la casa y yo fui a la habitación, me quedé observando a Inna, sela veía tan indefensa y dulce, pero estaba completamente dormida.Lequité los tacones y el vestido, seguidamente la metí en la cama yla tapé con las sábanas.Después de guardar sus cosas yo tambiénme puse a dormir.

Narra Inna:

Erancomo las doce del mediodía, no recuerdo nada de lo que pasó anochedespués de cenar, cuando volví en si me di cuenta de que estaba sinropa, espero que Juan Luis no haya echo nada.Me levanté y cogí unacamiseta que había tirada por le suelo y fui a coger mi teléfono yaque estaba sonando.

Llamada de Mackenzie:

-Porfin contestas, estaba asustada-Dijo Mack, me había llamado cuatroveces.

-Losiento, estaba dormida.

-Soloquería que te acordaras de que hoy tienes que coger el vuelo a NuevaYork-Suete que me lo recordó, ni me acordaba.

-Si,solo tengo que preparar la maleta, cuantos días eran?

-Unasemana, tranquila ya hablé con la universidad.

-Okay,nos vemos a las siete.

Fin de la llamada.

Colguéy vi que Juan Luis estaba apoyado en el marco de la puerta mirándome.

-Porfin despiertas-Dijo él.

-¿Ayerpasó algo?, ya sabes... estando borracha.

-Nuncaharía nada sin tu consentimiento, así que no-suspiréaliviada-Vamos la comida ya está en la mesa.

-Voy.

Lacomida fue silenciosa, mas bien porque yo no quería hablar.No megustaba enfadarme, y menos con él, pero realmente me dolió lo quedijo, porque aunque él no me amara, yo a él si, y además lo pasétan bien con él en la cama, necesitaba volver a sentirlo, besarlo,sin pensarlo una vez me lancé sobre él a besarlo, este ovio mecontinuó el beso y me llevó a la cama, y como bien había pasado elotro día, volvimos a hacerlo y creo que fue mas placentero que laotra vez.

-Tendrásque llevarme al aeropuerto.

-Lose-Dijo levantándose de la cama y se puso la ropa.

Yohice lo mismo y me puse a hacer la maleta, ya que en menos de doshoras tenía que estar en el aeropuerto y no tenía nada preparado.



No es un capricho [Maluma]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora