No es un capricho [Maluma]

Hora de contarle a mis padres

Nos levantamos bastante tarde, ya que anoche yo no pude dormir casi nada y Juan Luis se quedó en vela por mí, así que cuando yo me desperté no lo desperté también, prefiero que se despierte cuando él ya no tenga sueño, aunque antes de las dos ha de estar en pie.Fui a la cocina ya que me entró hambre, me hice unas tortitas y les puse nutella y trozos de fresas, también me hice un batido de plátano y mango, que por cierto quedó delicioso.Hoy me siento super cansada, y no es por no haber dormido, porque últimamente cada día me siento así.Estaba tan tranquila comiendo cuando siento un cálido beso en mi mejilla, dándome a entender que Juan Luis ya está despierto.

-Juan Luis, tu me vas a seguir queriendo verdad?

-Claro que si bebé, te amaré toda mi vida, porque me preguntas eso?

-Esque ahora con el embarazo, pues me pondré super grande e hinchada.

-Ya, lo se, pero serás la mujer embarazada mas bella del mundo, además aquí dentro-Dice poniendo su mano sobre mi abdomen-Llevas a nuestro bebé, que será igual de bello o bella que su mamá.

-Te amo-Le dije.

-Y yo igual-Respondió.

Le dejé comer algunas tortitas que había hecho y mientras este se las acababa yo le preparé un café.

A cosa de la una del mediodía decidimos vestirnos, yo me puse un mono corto negro con estampado de flores blancas y unas sandalias negras de plataforma, me maquillé y recogí mi cabello en una coleta, Juan Luis iba con unos vaqueros, una polera blanca y por encima se puso una americana negra sin abrochar, por no ir con el pelo suelto él también se lo recogió en una coleta.Cogió las llaves de su mustang y nos fuimos en él hasta mi antigua casa.Antes de bajar al coche, Juan Luis susurró a mi oído "Todo va a salir bien, tranquila", hacia ya mas de tres meses que no veía ni sabía nada de mis padres, tampoco me importaba mucho, ya que ellos tampoco han intentado saber sobre mi, pero si estaba muy nerviosa por saber que reacción van a tener, aunque ya me hago a la idea y no me gusta nada.Con mucho miedo piqué al timbre y a los segundos una mujer nos abrió, era la ama de llaves, nos llevó al salón donde mis padres estaban ya sentados en la mesa,

Nos acercamos y ni siquiera se nos acercaron para darnos un beso ni saludarnos, son demasiado orgullosos, sobretodo mi madre.

-No sabía que "Tu novio" también iba a venir, creí que habías abierto los ojos y lo habías dejado, pero ya veo que no-Dijo mi madre.

-Mi novio tiene nombre y es Juan Luis si?Y lo amo, pero vosotros no queréis entenderlo-Dije subiendo un poco el tono.

-Relájate, no pasa nada-Me dijo Juan Luis.

No dijimos nada más, tan solo nos sentamos en la mesa y esperamos a que nos sirvieran la comida.Hicieron ensalada de pasta y de segundo salmón ahumado con algunas verduras, aunque yo no podía comer el salmón y además estaba medio crudo, con lo que me gusta a mi el salmón.La verdad la ensalada de pasta estaba bastante buena.

-Inna, no has probado el salmón-Dijo mi padre extrañado-Habíamos dicho de hacerlo porque te encanta.

-Ya, pero esque no puedo comerlo-Dije.

-Y porque no puedes?-Dijo mi madre

Mis padres se me quedaron mirando extraño, en plan ¿Porque no vas a poder comer salmón?

-Díselo-Susurró Juan a mi oído.

-Mamá, papá, estoy...-Dios estoy demasiado nerviosa-Estoy embarazada.

Al decir aquellas palabras se me quedaron mirando super sorprendidos, con los ojos como platos y la boca abierta.

-Me estás diciendo que este te ha tocado!-Dijo mi padre super cabreado-Solo tiene 18 años!

-Esque lo sabía joder!-Gritó mi madre-Nunca aprenderás Maria Ignacia! EL primero que te encuentras por la calle, te lo tiras y te deja preñada, eres increible! Yo no te críe para que te convirtieras en una fulana, una fresca.

No podía creer lo que estaba pasando, se que mis padres me odian, pero de verdad creía que me apoyarian o al menos lo intentarían.Mis ojos estaban hinchados y comenzaron a caer lágrimas de estos.

-Mamá de verdad crees que soy eso?-Dije llorando.

-¡SI!-Me gritó-Y ahora los dos fuera de aquí! Y no volváis a aparecer por esta casa, porque tu Ignacia-Me dijo mi madre señalando con el dedo-Ya no perteneces ni perteneceré nunca más a está familia.

Escuchar esas palabras saliendo de la boca de mi madre me dolió demasiado, sin decir ni una sola palabra más salimos de aquella casa y nos montamos en el coche, fue un camino en total silencio no quería hablar de nada de lo que había pasado, y pude ver como Juan Luis me miraba apenado de reojo mientras conducía, pero yo no dije nada.

Al llegar a casa me tiré en el suelo a llorar desconsoladamente, mis padres me odiaban y yo no podía hacer nada para que pensaran lo contrario.Juan Luis no dijo nada, solo se sentó en el suelo y me sentó sobre él, apoyé mi cabeza en su pecho y lloré aún más, él trataba de consolarme, pero estaba demasiado dolida, la mirada de decepción que me habían lanzado mis padres, eso fue lo peor, los había decepcionado.