Capitulo Sesenta y Siete

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A Luke le habían sudado las palmas de las manos desde que había salido de Dallas.
Casi veinticuatro horas después de que ________ hubiera dejado caer la bomba, estaba preparado para hablar con ella. No, tenía que hablar con ella. Así que había conducido hacia el oeste, a través de la oscura noche, con las entrañas retorciéndose como si estuvieran conectadas a un cable de alta tensión.
Ash le había dicho un montón de verdades. Doce años antes, Luke había sido culpable de muchas cosas. De hacer el amor con una chica emocionalmente inestable. De no pensar bien las cosas. De permitir que las turbulentas emociones de Felicity—y las de su familia— ahogaran por completo su lógica.

Pero lo que no había hecho, tal y como su primo y ________ habían señalado, había sido obligar a Felicity a tragarse las pastillas. Era duro de aceptar, pero cierto. Había sido ella quien había escogido aquel camino por razones que él jamás comprendería, pero que no tenían por qué estar relacionadas con el embarazo.
Enfrentarse a su pena de nuevo había conducido a Luke al origen de su culpa, y por fin estaba preparado para comprender en qué momento lo había fastidiado todo con Felicity. La había abandonado antes de saber cómo podían haber ido las cosas entre ellos. Primero porque sólo tenía diecisiete años y estaba aterrorizado por el embarazo, luego porque había estado furioso con ella por haberse acostado con otro chico sólo para hacerle daño. No se habían hablado en casi tres semanas. Y después, ella había puesto fin a todo aquello de manera permanente, dejándole lleno de preguntas y remordimientos.

¿Había amado a Felicity? Quizá había sido demasiado joven para saber lo que era el amor, pero no había estado preparado para que su relación se terminara de aquella manera, en especial por el suicidio de ella. Mirándolo retrospectivamente, sólo había sido culpable de ser demasiado mierda y estar demasiado asustado para luchar por lo que podría haber sido.

No volvería a cometer ese error con ________, sobre todo amándola como la amaba.
Si finalmente ponía fin a la relación, sería por elección de ella.

Por desgracia, Luke no se hacía ilusiones; se había comportado como un imbécil después de que ________ hubiera anunciado su embarazo. Como Ash había apuntado, la había tratado peor de lo que había tratado a Felicty. La revelación del secreto de su primo tampoco había contribuido a mejorar las cosas. Pero ahora ya había tenido tiempo para procesar todas las emociones y de decirse a sí mismo que había llegado el momento de hacer las cosas de manera diferente. O por lo menos de intentarlo.
Buscar la dirección de ________ en Internet había sido muy fácil. Tendría que hablar con ella sobre cómo proteger mejor sus datos personales. Pero eso sería más tarde.

Se metió en el aparcamiento del complejo de apartamentos, tratando de encontrar el edificio de ________ en la oscuridad. No estaba bien señalizado, maldita sea. Luke miró a su alrededor con el ceño fruncido. Los edificios estaban distanciados unos de otros, y había zonas de recreo entre ellos. Muchos árboles por todas partes. Muchas esquinas oscuras. Ningún puesto de seguridad.
¿Por qué ninguna mujer —el sexo más vulnerable— pensaba jamás en la seguridad antes de elegir un lugar para vivir?

Quizá tras esa noche, ________ dejaría aquel lugar y se iría con él; entonces la falta de medidas de seguridad no sería un problema. Él era un experto en eso. Demasiado.
Pero antes tenía que descubrir si ella quería tener algo que ver con él.
Encontró el edificio de ________ al final del complejo, al lado de un solar vacío y rodeado de grandes árboles que arrojaban sombras bajo la luz de la luna. ________ vivía en un apartamento de la planta baja. Y cuando pasó por delante de él observó que una de las ventanas estaba abierta de par en par.

Con una imprecación, aparcó el Hummer, preguntándose por qué mierdas ella no había cerrado la ventana y conectado el aire acondicionado. ¿Por qué Logan y Hunter habían permitido que viviera en un lugar tan desprotegido? ¿Por qué no le habían advertido sus hermanos sobre el peligro que suponía para una mujer que vivía sola dejar las ventanas abiertas a expensas de cualquier pirado que consideraba la violación y la tortura puro entretenimiento.
Tras cerrar el vehículo, Luke llamó a la puerta de ________, y esperó en el silencio de la noche apenas roto por el chirrido de los grillos.

«Nada».

Frunció el ceño. Quizá estaba profundamente dormida. O quizá ni siquiera estaba allí. «¿No se te había ocurrido pensar en eso, imbécil?».
Había escuchado en la radio que ella había sido vista en un pequeño restaurante almorzando con el gilipollas de la voz de falsete. ¿Volvería _______ a sentir algo por Harry de nuevo? Luke no podría culparla después de la manera en que la había tratado, pero Dios… sólo de pensarlo le hacía querer golpearlo.

Sacó el móvil y la llamó. No hubo respuesta. Debía de haber visto el identificador de llamadas y decidido ignorarlo. Tenía que ser eso.
Luke quiso estrellar el teléfono contra la jodida puerta. La frustración hervía en su interior, a punto de ebullición, como si fuera algún tipo de experimento científico en un tubo de ensayo a punto de explotar. Pero no pensaba darse por vencido. Hacía mucho calor esa noche, tal vez incluso lloviera. Pero no le importaba. Pensaba quedarse esperando delante de su puerta toda la noche —días, si fuera necesario— hasta que ella volviera a la casa.

Luke hundió los hombros. No podía fingir que no le dolía que ella no quisiera hablar con él. Y si no dejaba de recorrer mentalmente aquel camino de nuevo, comenzaría a llorar como un bebé. Otra vez. No quería perder la compostura cuando se enfrentara a ella, quería mirarla de frente y prometerle que haría todo lo posible para ser el hombre que ella necesitaba.
Pero ¿sería realmente ese hombre? Su inseguridad en sí mismo lo azotó como un látigo cruel.

Apoyando la frente en la puerta, Luke luchó contra sus demonios interiores que seguían empeñados en disminuir sus esperanzas. Cerró los puños contra la puerta, deseando que ella estuviera allí para poder abrazarla. La amaba con todo su ser… Amaba su sensatez y su agudo ingenio. Aquella vena traviesa que nunca dejaba de sorprenderle. La manera en que afrontaba la vida. Todos aquellos sentimientos y emociones que había compartido con él cuando estaba con ella… dentro de ella. Dios, ojalá volviera con él.

Un ruido —¿un gruñido?— lo arrancó de sus pensamientos. Aunque débil, aquel sonido estaba completamente fuera de lugar. Un gruñido masculino había salido del apartamento de _______.
Luke frunció el ceño y se acercó a la ventana. Oyó otro sonido que no conseguía ubicar. Un choque, como algo golpeando contra la pared.
«¿Qué coño estaba pasando allí?». La ansiedad se enroscó en su estómago. Era ella… ¿habría llevado a otro hombre —quizá a Harry— a su cama? No. No podía creerlo… no, no de _______. Ella no era Felicity.

Pero Luke todavía no sabía a qué se debían esos sonidos. Sólo sabía que estaban fuera de lugar.
Colándose por la ventana, Luke sacó su SIG Sauer por si las moscas. Rodeó el sofá, pasó por delante de la cocina y recorrió el pasillo con el arma apuntando hacia delante. Contuvo el impulso de lanzarse a la carga como un toro. Tenía que proceder con tiento hasta saber qué diablos estaba pasando.
Un chillido agudo rasgó la noche, y un escalofrío le recorrió la espalda. «¡_______!». Maldición.

Precipitándose por el pasillo hacia el origen del sonido, llegó al dormitorio. Estaba oscuro y vacío, con la cama deshecha.
Los sonidos de una lucha en el cuarto de baño le hicieron girar la cabeza en esa dirección. Venían de detrás de la puerta cerrada dentro del cuarto de baño. ¿Del vestidor?

Si ese hijo de puta había dañado un solo pelo de la cabeza de _______, iba a comer durante el resto de su vida por una pajita después de que recibiera el primer puñetazo. Si recibía otro más, aquel mierda no necesitaría ni pajita ni comida ni nada.
Acercándose sigilosamente hacia la puerta cerrada, Luke intentó escuchar. No quería poner a _______ en peligro por precipitarse como un imbécil.

—Pon el bate de béisbol en el suelo —gruñía el hombre—, no quiero hacerte daño.

A continuación se escuchó un golpe sordo y un gruñido.

—¡Perra! Me has hecho daño.

_______ le había acorralado. Bien. Aquel bastardo no era demasiado hábil y ella todavía estaba viva. Aquellas eran buenas noticias. Luke no sabía si volvería a conquistarla, pero sí sabía que iba a salvarla.
De repente, _______ soltó un grito.

—Maldita sea, muere como una buena chica.

«¡No!». El grito de terror de _______ atravesó las paredes y desgarró las entrañas de Luke.
Luke destapó la botella de sus emociones —miedo, culpa, frustración, rabia— y las dejó volar mientras echaba abajo la puerta del vestidor e irrumpía en el pequeño cuarto. Allí no había más que oscuridad, pero vio el contorno del cuerpo de _______ en el suelo, y cómo se golpeaba su cabeza contra la pared. La sangre resbalaba por su torso.

«Oh, no. ¡Demonios, no! Dios…».

Embargado por la furia, Luke se giró con rapidez, agarró al extraño por el cuello y lo empujó contra la pared. Un destello metálico llamó su atención. Esquivó el filo y cerró los dedos en torno a la garganta del hombre. Con la otra mano, acercó el cañón de su arma a la frente de aquel hijo de perra.

—Tira el cuchillo al suelo.

El extraño vaciló. Luke podía oír sus ásperas boqueadas, podía oler su miedo, sentir sus temblores. No era suficiente. Quería ver cómo aquel bastardo se desangraba, cómo se retorcía de dolor, cómo se estremecía bajo sus manos mientras rogaba piedad.
Liberar a su salvaje interior.
Apartando aquéllos pensamientos a un lado, Luke le dirigió al hombre una mirada letal.

—No necesito más razones para acabar contigo, mierda. Tira el cuchillo.

El extraño vaciló indeciso. Luke apretó el arma, y presionó la palma de la mano contra la traquea del hombre. Aun así éste no cooperó.
Y Luke no tenía ni idea de si la vida de _______ estaba escurriéndosele entre los dedos en ese momento.

—Voy a acabar contigo. —El dedo de Luke comenzó a apretar el gatillo.

El extraño debió sospechar que Luke hablaba en serio y soltó el cuchillo. Cayó sobre la bota izquierda de Luke.
Pisándolo para que no pudiera cogerlo de nuevo, Luke contuvo las ganas de agredir al hombre, pero _______ necesitaba su ayuda ahora.

Justin señaló la esquina más alejada del vestidor.

—Siéntate ahí con las manos donde pueda verlas. No te muevas. Si se te ocurre mover un solo dedo, mi buena amiga SIG Sauer y tú vais a llegar a conoceros muy bien, ¿me has entendido?

Bajo la palma de la mano, Luke sintió que el hombre tragaba aire. Luego asintió con la cabeza.
Resistiendo el impulso de aplastarle la tráquea por puro placer, Luke retrocedió, apuntó con el arma al asaltante, y observó cómo su sombra se acercaba a la pared y se hundía en el suelo. Sin apartar la mirada, Luke guardó el cuchillo y encendió una luz.

El intruso llevaba una careta. Como en un programa de televisión.
Pero fue lo único que pasó por su cabeza antes de dejarse caer de rodillas al lado de _______, buscando el origen de la sangre con una mano mientras sostenía el arma que apuntaba al hombre en la otra.

«Oh, maldita sea. Oh, Dios… deja que viva».

Se sintió invadido por el pánico de nuevo, pero lo apartó bruscamente a un lado. «Piensa. Contrólate, razona».
Luke la examinó con rapidez. _______ había perdido el conocimiento, pero su corazón palpitaba con un ritmo constante. Respiraba. Tenía un corte profundo en el antebrazo.

Tendrían que darle unos puntos en cuanto fuera posible. Luke cogió una camisa de una percha y presionó la herida con ella. Lo más probable es que hubiera sido causada por el cuchillo del extraño al levantar el brazo para defenderse de él. No quería ni imaginar el terror que debía de haber sentido al ver venir el cuchillo hacia ella…

Le dirigió al hombre una fría mirada de furia.

—Como se muera, te mato. ¿Has entendido?

La cabeza bajo la careta asintió temblorosa.
No encontró ninguna otra herida, pero el pánico creció en él. ¿Por qué demonios seguía inconsciente? Se había golpeado la cabeza al caer. ¿Habría sido grave?

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Fantasía Prohibida - Luke Hemmings y Ashton IrwinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora