『❀』 "I lied
⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀ ⠀Because the is no reason
⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀ to love someone like me.
『❀』No copias, ni adaptaciones.
『❀』 La historia cuando acabe la voy a sacar para editarla y luego la subiré.
『❀』 Empezada: 6 de abril del 2018.
『❀』 Ter...
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Sus manos trabajaban a la par acariciando la suave tela de forma uniforme y viendo como caía al suelo confundiéndose con la alfombra que decoraba el lugar. Con el ceño fruncido y las líneas de concentración en su frente, pudo lograr algo maravilloso y hermoso. Se levantó del suelo y recobró la compostura. En su rostro nació una sonrisa de satisfacción.
—¿Te gusta el vestido? —le preguntó a Irene. Era el décimo cuarto vestido que se había probado y todos en aquel estudio se encontraban realmente exhaustos.
Sus ojos llegaron hasta la imagen que se reflejaba en el espejo, observó como Irene asentía contenta por su elección mientras atisbaba su silueta. Ella se volteó con nerviosismo a ver a las personas que había escogido para que la acompañasen a escoger su vestido de ensueño y éstos no se veían de por sí contentos. Jimin enseguida notó como los rostros querían expresar mil y una críticas, pero prefirió seguir la corriente antes de utilizar sus dotes.
—¿Les gustaría opinar algo? —se dirigió a la mamá junto a sus dos hermanas menores.
La mamá de Irene fue la primera en asentir con el rostro pintado en decepción mientras acomodaba los mechones de cabello que caían en su frente mostrando la frustración que canalizaba en su interior. Jimin conocía a los Bae desde hace algún tiempo, sabía que era una familia conservadora y muy cuidadosa con los escándalos. Las ultimas bodas de sus hijas fueron intachables y fuera del ojo de la prensa, pero la boda de su hija mayor por algún motivo y por no decir que contraerá matrimonio con un ente político, querían hacerlo del todo muy esplendida, incluyendo a todos los medios de comunicación del país.
—Considero que este vestido es de muy mal gusto y poco sutil para una boda —soltó con dulzura, pero de lejos se podía ver que quería quemar el vestido o arrancar cada una de las perlas que caían de él.
Jimin asintió escuchando las palabras de la madre de Irene, pero no pasó por desapercibida la tristeza en el rostro etéreo de la chica, así que, se acercó a ella con rapidez.
—Irene, ve a cambiarte, ¿sí? —le pidió y le ayudó a bajar de la grada con delicadeza—. Éste es tu vestido, convenceré a tú mamá —dijo en un susurro provocando que la chica solo se limitara a asentir, pero por dentro estaba realmente emocionada. Jimin le entregó una sonrisa y le pidió a una de sus asistentes que ayudasen a la novia con la enorme cola que hacía juego con el piso prensado en mármol de la tienda.
Las vio desdeñarse del salón de prueba, de repente tomó una bocanada de aire, echando su cabello hacia atrás, pensando en cómo lidiar con la situación. No sabía que tan difícil podría llegar a ser convencerla, pero al menos lo intentaría. Calmándose un poco y entrando en su papel, acomodó su traje y se giró dándole su mejor sonrisa a la madre de Irene.
