03

2.1K 116 120
                                    


–Ah... –suelto un jadeo cuando mi espalda se estrella contra los casilleros, para luego unos labios suaves y carnosos posarse sobre los míos. –mmh, Jung...kook, p-podrían descubri...ah.

–¿Y eso qué? Me importa una mierda.

–C-cualquiera podría pasar y...y v-vernos –no dejaba de besar, morder, succionar y lamer mi cuello.

–Cállate ya –dijo para luego besar mis labios desesperado, morderlos y succionarlos con hambre.

¡DIOS! Podría volverme adicto a éstos, eran suaves y muy carnosos, me encantaban.

–Tae.

Escucho la voz de Jimin a lo lejos pero no le doy importancia.

–Tae, ¿Estás bien?

No es hasta cuando me toma de los hombros que reacciono y me doy cuenta de que estaba imaginando todo, mierda, otra vez no.

–Espera, ¿estabas imaginando con Jungkook? –pregunta riendo.

–¿C-cómo te diste cuenta?

–Vamos Tae, no soy estúpido, tus pupilas están más que dilatadas y Firulais despertó.

–¿Qué? –miro hacia abajo y me encuentro con una erección, que sólo un ciego sería capaz de no notar. Por reflejo me tapo con las manos.

–Camina hermano –dijo pasando su brazo sobre mi hombro. –ve al baño, te espero afuera.

                               •••

Ya estábamos en clase nuevamente, y sí, acabé masturbándome en el baño. Gracias a que Jimin hacía guardia, nadie entró.

Tengo que dejar de fantasear con Jungkook cuando esté en la escuela. Pero vamos, es Jungkook, el chico que me gusta hace dos años y que revuelve mis hormonas.

Doy un suspiro y me dedico a resolver la ecuación que tengo en mi cuaderno. La escribo y me recuesto hacia atrás sobre mi asiento y cierro los ojos.

–Deja ya de imaginar a Jungkook –susurra Jimin. – ¿o quieres quedarte seco de tanto masturbarte?

–Cállate –digo de igual forma.

                               •••

Cierro mi casillero de un portazo y suelto un suspiro.

–¿Vendrás a verme jugar no? –siento una dulce voz sobre mi cuello, que me eriza los vellos de todo el cuerpo.

Me doy la vuelta y me encuentro con el chico que me gusta.

–¿Tienes partido?

–Así es, y quiero verte en las gradas –dice sonriéndome.

Kook es el mariscal del equipo de futbol américano, y era un dios jugando.

Verlo jugar sin duda era un deleite para mí.

–Claro, ahí estaré –digo coqueto para luego salir del establecimiento.

NO LO PUEDO CREER, JUNGKOOK ME HABÍA DICHO QUE FUERA A VERLO A SU JUEGO, EL CHICO QUE ME GUSTA, DEL CUAL ESTOY ENAMORADO, EL CAUSANTE DE MIS ERECCIONES. Okey, no era necesario mencionar lo último, pero es que estoy muy emocionado.

Tengo que encontrar el atuendo perfecto para hoy, debo estar perfecto.

Escucho unos pasos detrás de mí y siento un cuerpo empujarme al suelo, seguido de un grito de emoción.

–¡JIMIN! ¿¡TE VOLVISTE LOCO!?

–¡LO SIENTO! –otro grito. –PERO ESTOY EMOCIONADO.

–¡DÉJAME LEVANTARME! –grito con ira.

–Ups, lo siento –dijo riendo, acto seguido se quita de encima de mí y nos levantamos.

–¿Puedes explicarme TRANQUILAMENTE a que se debe tanta emoción?

–Es que Tae, YOONGI ME INVITÓ AL JUEGO DE HOY.

–¿En serio? Jungkook también me invitó –digo aún sorprendido/sonriente.

–POR FIN NOS NOTAN TAE –gritó aún más emocionado

–Bueno, tenemos que vernos perfectos –lo veo asentir. –así que, ¿nos arreglamos en tu casa o la mía?

–La tuya, pero antes pasemos por la mía así tomo las cosas que necesito.

Jimin y yo nos conocemos desde que nacimos, literalmente. Nuestras madres son mejores amigas, por ende, nosotros igual. Ahora que por fin mi madre dejó a mi padre,vivimos en el edificio de Jimin, a un piso de distancia, pero aún así, siempre pasamos más tiempo en la casa del otro que en la nuestra.

Cuando llegamos a la casa de Jimin, elegimos su outfit. Consistía en una remera blanca que tenía escrito "swag" en negro, una chaqueta de jean, unos jeans negros con unas rupturas en las rodillas y unos converse blancos. Agarró su perfume, cepillo de dientes y... ¿una plancha de pelo?

–¿Pará qué necesitas eso? –digo confundido.

–¿Piensas que esta cabellera hermosa se mantiene así de perfecta sola? Plancho mi cabello, así se ve más hermoso.

Dicho esto, metió todo en una mochila y nos dirigimos al piso de arriba.

Al llegar elegimos mí outfit. Opté por una remera de Nirvana blanca, una chaqueta de cuero negra, unos jeans, algo ajustados con ruptura también en las rodillas y unos botines negros.

Primero se bañó Jimin.

Luego fui yo. Al salir vi planchándose el cabello, así que comencé a ponerme mi ropa.

–Oye Tae, ¿me planchas la parte de atrás?

–Claro.

Comencé a planchar su negro y suave cabello, de verdad lo cuidaba mucho.

Cuando terminé, me puse perfume y ya estábamos listos.

Hoy sin dudas iba a ser uno de los mejores días de nuestras vidas.


http_Yoonmin_

Bind me || KookV +18Onde histórias criam vida. Descubra agora