TREINTA Y CUATRO✨

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Taehyung

Me levanto del suelo y limpio mis lágrimas a pesar de que sé que no dejarán de salir. Mantengo mi vista baja. Soy una presa fácil para cualquiera.
Se acaba de ir, hace unos minutos... No lo aguanto.

Camino sin sentido, y sin saber qué hacer, simplemente no puedo pensar con todo esto. Veo una botella de Vodka en la barra de la cocina. Está casi nueva, pero me vale un carajo. La tomo con furia y la estrello contra el suelo con fuerza.
Me lleno un poco del líquido mientras veo como la botella se rompe en mil pedazos. Los pedazos más grandes los vuelvo a agarrar y los estrello nuevamente. Me corto un poco la palma de la mano, pero aún así, comienza a sangrar.
Yeontan ladra un par de veces. Creo que se ha asustado.

—Lo siento, Tannie... No deberías de ver esto.

Me tiro a lado de la nevera como un borracho sin hogar. Estoy cansado y destrozado. ¿Qué más podría definirme en este momento?

¿Qué hice? ¿Qué gran error cometí para que se fuera de mi lado de esa manera? Pude haberle preguntado, pero sé que solamente me ignoraría por completo.
¿A dónde habrá ido? Jungkook... Carajo, esto duele de verdad. ¿Tengo que salir a buscarlo de nuevo?

Justo cuando dos lágrimas salen disparadas juntas el maldito móvil comienza a sonar. Si no mantengo la compostura romperé todo lo que esté a mi paso. Lo saco para colgar la llamada, pero... Es Jimin.
Contesto, pero me mantengo callado mientras él habla.

—Tae... Hyung, ¿en dónde estás? —pregunta despacio.

—¿Qué importa eso? —pongo los ojos en blanco a pesar de que sé que no me puede ver.

—¿Todo está bien?

—No tengo tiempo para esto... —Despego el celular de mi oreja e intento colgar.

«¡Es Jungkook!» Grita Jimin al otro lado de la línea. Sostengo el móvil con la mano temblorosa y miro el nombre de mi amigo escrito en la pantalla. Vuelvo a poner el celular en mi oreja para escuchar, pero por el momento no escucho mucho.

—Yoongi lo llamó, y contestó una tal Han... ¿Cuál era su nombre, cariño? —le pregunta a Yoongi—. Ah, Sook Mi.

Mantengo mis dientes juntos con fuerza, hasta que la mandíbula me empieza a doler. Creo que pronto echaré espuma por la boca...

—Dijo que Jungkook era su novio, que se estaba duchando, por eso él no contestó —sorbo por la nariz y juego con mi pulsera negra.

—Gracias por decirme —digo con un hilo de voz.

—Taehyung, ven a casa. Sé que algo sucede, y no estás para nada bien. Soy tu mejor amigo y...

—Todo está bien. Lo manejaré.

—Pero...

—Adiós —lo interrumpo y cuelgo. Esto no debería de afectar a terceras personas... No.
Ya no sé cómo reaccionar. No quisiera volver a ver la cara de esa mujer tan odiosa. Hija del mismísimo Satanás.
Jamás debí de permitirle a mi padre que dejara que se quedara.
¿Por qué Jungkook estaría con ella?
Y si... ¿En verdad siente algo por ella? Tal vez no lo demostró abiertamente porque sabía que yo iba a enloquecer. Tiene sentido. Con ella lo hizo, con ella pudo ser hombre cuando conmigo no lo pudo ser.
No lo soporto. Me niego completamente a olvidarme de él. Me niego a aceptar que él la ama. No caeré en esta mierda aunque sea verdad. Prefiero engañarme a mí mismo.

La palma me empieza a arder, pero qué más puede doler. Esto no es nada comparado con lo que siento dentro...

***

taekook; sweet skin (달콤한 피부) ✨ EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora