El CLAN MALDITO.

La llegada.

Desde que se fue Jack no pude volver a dormir... mis ojos ya estaban cansados de llorar.

Mi móvil sonó, lo tome. No era una llamada era un recordatorio.

-Recoger a los chicos en el aeropuerto.

Si no lo hubiera programado me habría olvidado de ellos, mi cabeza no se encuentra bien en estos momentos además de la cruda, el no haber dormido bien y los problemas, hacen que mi mente ande completamente pérdida.

Me levanté de mi cama sin muchas ganas y me fui a dar una ducha, mi cuerpo estaba realmente sucio y no era para menos si me había remolcado en medio bosque.

Entre al baño hice mis necesidades, lave mis dientes y me di una ducha ligera en la regadera.

Llegue hasta mi closet y tomé una ropa sencilla.
Me miré al espejo y me veía realmente faltal, tenía ojeras bastante notables y mis ojos se encontraban hinchados, tome unas gafas de sol y problema arreglado.
Me puse desodorante y loción, peine un poco mi alborotado cabello.

Tome mi movil, mis llaves y mi cartera y salí de la casa.

Subi a mi chica y me dirigí hacía el aeropuerto, no obstante tuve que hacer una parada en la gasolinera, llené el tanque y seguí mi camino.

Estacione mi coche, tome mis cosas y sali de él.
Dejé todo cerrado y me adentré en el aeropuerto, no faltaba mucho para que llegarán los chicos.

Tome asiento en una de las salas de espera, mientras tanto estuve revisando mis redes sociales, contestando algunos mensajes por un largo rato, hasta que escuché voces conocidas.

- Te dije que era para el otro lado.- escuché la voz de Will.

- Que no idiota, ¡es por acá!.- habló Andy.

- Chicos dejen de pelear por el amor de Dios.- dije, mientras llegaba con ellos.

Ellos voltearon la mirada.

- ¡¡Alex!!.- gritarón, sin importar las miradas de las demás personas.

- ¡¡Chicos!!.- respondí casi de la misma manera, mi cabeza dolía.
Pero era un dolor soportable además eran mi chicos no me importaria ser aplastado, si es por ellos lo que sea.

Nos dimos un abrazo grupal 

- Ya extrañaba estos abrazos.- confesé.

- ¡Y nosotros a ti!.- dijo Luck.

- ¿Te encuentras bien Alex?.- preguntó Jeremy, ese tío tenía mejores instintos que el hombre araña.

- Si, lo estoy.- respondí con una sonrisa, pero Jeremy no se la creyó.

- Bueno chicos vamos por las maletas para ya irnos de aquí.- les dije.

- Si claro.- dijeron, mientras se adelantaban.

- No se me a olvidado nuestra charla pendiente.- dijo Jere, mientras me pasaba el brazo.

- Ni a mi, créeme. Ya tendremos tiempo de hablar.- respondí devolvíendole el gesto.

-¿Por cierto por que traes gafas de sol?.- pregunto.

- ¡Oigan, ayuden!.- grito Tomy, mientras abría y cerraba sus brazos para llamar la atención.

Me salvo la campana.

Nos dirigimos hacia ellos, y cada quien tomó un par de maletas y comenzamos a caminar hacia la salida.

Los dirigí hasta mi pequeña.

- Vaya al último cambiaste a cherry.- dijo Luck mientras negaba con su cabeza.
Antes de mi pequeña había tenido un auto deportivo rojo, Luck lo bautizo como Cherry. De ahí el nombre.