Fugitiva/Jos Canela, 2 Temporada.

∆

Capítulo 30.

Jos:

Llegué a casa de Cameron, me baje y toque su puerta, un Cameron todo fachoso me abrió la puerta, me dejó pasar, me guío a la sala y una vez ahí me miró.

—¿Qué quieres Jos? —(pregunto serio)

—Tú sabes dónde está Lena, dime que sí por favor —(dije y el negó)

—¿Te presentas para buscarla después de 2 meses? —(pregunto serio y yo agache mi cabeza)

—Se que no seré el mejor amigo o la mejor persona, pero de algo estoy seguro es que estoy enamorado de Lena y el hecho de que no haya dejado que me explicara las cosas antes de que le dispararán fue porque estaba cegado por el coraje, Alonso me fue a dejar esta carta a mi casa, dónde dice todo lo que pasó y por qué nunca me lo dijo, no sé si sea demasiado tarde, pero estoy seguro que ella me ama y que yo la amo a ella y no, no hay otro tiempo es ahora o nunca estar juntos —(dije y el suspiro)

—No sé nada de ella —(dijo y asentí un poco decepcionado)

—Gracias —(dije y salí corriendo de ahí, para después irme a mi casa)

Lena:

Habían pasado 2 meses desde que Ricardo me robó del hospital, estuve a punto de morir pero lograron salvarme, durante el tiempo que he estado aquí pensé todo lo que sentía y aclare las cosas, me refugie con mis abuelos en su casa de playa, saben la verdad y me entienden, me apoyan y saben parte de mi historia con Jos, la verdad he evitado pensar en el todo este tiempo pero a veces se me es un poco imposible, a veces me preguntó si seguirá odiándome o ya ni se acordará de mí, me habrá demandado otra vez y la ley me está buscando, muchas preguntas rondaban por mi cabeza, mis abuelos evitaban de hablar del tema de mi padre pues después de lo que pasó, desapareció y nadie lo ha vuelto a ver, mi madre pidió el divorcio y ahora esta oficialmente divorciada, todo esto lo se gracias a Cameron y Carlos quienes saben de mi paradero y saben que estoy viva, ellos me mantienen informada de lo que pasó, hace unos días no he hablado con ellos, pero sé que cuando lo haga me tendrán noticias, según Carlos, mi hermano está saliendo con una chica, hace un mes busco a la chica que rescatamos de la máscara y se conocieron, ahora él está seguro de que son el uno para el otro y por eso le pedio ser su novia, ya tengo cuñada y a mi hermano se le nota feliz, lo sé por Cameron y Carlos pues León les cuenta a todos cómo va con ella y se lo feliz que se siente, también sé que mi hermano sabe que Carlos y Cameron saben algo de mí, pero les he pedido que no digan nada, la razón es simple, no estoy lista todavía, sigo en recuperación y aún no estoy lista para verlo a él, ahora me encontraba mirando el mar, un atardecer se presenciaba en la playa, me encontraba arriba de un columpio, este se encontraba sobre el agua y mis pies tocaban el agua con el movimiento que el aire me daba, escuché como alguien entraba al agua y caminaba hacia dónde yo estaba, Ricardo era el responsable de esos pasos, lo supe cuando se sentó en el columpio de alado.

—¿Estás bien? —(pregunto después de acomodarse en el columpio)

Si, ¿Por qué? —(dije sin mirarlo)

-No sé, como casi nunca sales de tu habitación —(dijo y asentí)

—Solo se me dio salir, caminé a la puerta de la casa y vi este atardecer, los columpios le dan un toque perfecto y el agua tocando tus pies con el aire, simplemente es hermoso —(dije y el suspiro)

—¿Pasa algo? —(pregunté preocupada)

-Cameron hablo, me dijo que Jos había ido a su casa a pedirle que si sabía de ti que le dijera dónde estabas —(dijo Ricardo y ahora yo suspiré)

—Después de dos meses viene a buscarme —(dije y Ricardo río un poco)

—Hasta apenas hoy, supo la verdad, dice que una carta que tú dejaste fue lo que lo hizo escuchar, Alonso se la fue a dejar a su casa, dice Cameron que se veía mal, pareciera que estaba viendo a un vagabundo —(dijo y asentí)

—No creí que fueran a encontrar esas cartas, ya no me acordaba, pero creo que estuvo bien que se las diera, al final, un día Jos tenía que saber la verdad —(dije y Ricardo sonrió)

—¿Lo quieres aún? —(pregunto y yo suspiré)

—Estando aquí, asimilando lo que me pasó, no sé, aclaré muchas cosas, puse en orden otras y creo que si —(dije y reí un poco)

—Reíste —(dijo Ricardo feliz y yo lo mire confundida)

—Desde que saliste de ese hospital no te había visto sonreír y menos reír, veo que él te hace feliz —(dijo y suspiré)

—Posiblemente nos amamos mucho, pero qué tal si no es el momento de estar juntos —(dije y el asintió, pero después negó)

—Este es el momento —(dijo y yo negué)

—Piénsalo, Jos no descansará hasta encontrarte —(dijo y yo suspiré)

Sonreí y mire el sol el cual estaba ocultando, Ricardo sonrió y empezó a columpiarse, sonreí y me columpie al igual que el, años que no hacía esto, me sentía bien, pero sobre todo me sentía viva y mis abuelos salieron un rato más tarde y nos avisaron que la cena estaba lista, me baje del columpió y Ricardo también, caminamos hasta la casa y nos sentamos a cenar.

—¿Pensaste lo que te dije? —(pregunto mi abuelo y yo asentí)

—Y que dices —(dijo y yo sonreí)

—Acepto abuelo —(dije y Ricardo me miro confundido)

—Ricardo, te presento a la nueva jefa de las empresas Holmes Picón —(dijo mi abuela y Ricardo me miro sorprendido)

—Felicidades, mereces esto —(dijo y yo sonreí)

—Prometo cuidar las empresas y hacer el mejor uso de ellas —(dije y mi abuelo asintió)

—Por cierto que lindos se veían afuera, me acordé de cuando estaban pequeños —(dijo mi abuela y yo sonreí pues nos mostró la cámara con una foto mía y de Ricardo hace unos minutos)

—La enmarcare después —(dijo Ricardo sonriendo)

Mi abuelo se había esforzado mucho en sacar a su familia adelante, trabajo y dormía poco para que mi madre y su hermano tuvieran lo mejor, mi abuelo es un claro ejemplo de padre, el sí es un padre ejemplar, el si merece llamarse papá, él nunca nos lastimaría, pero, sobre todo, el daría la vida por cada integrante de la familia, el no daría la tuya a cambio de la suya, el ama a su familia y estoy orgullosa de decir que es mi abuelo.