Despierto repentinamente y enseguida, mi cabeza da vueltas.
Sigo atada, y en mi rostro aún siento la sangre seca.
Intento moverme pero todo mi cuerpo me duele, mis muñecas también tienen sangre seca, junto las piernas a mi pecho como puedo y comienzo a llorar.
Mis sollozos se escuchan en toda la habitación y mis ojos junto con mis labios me duelen.
Desearía estar en mi casa, es un infierno estar aquí, desearía poder regresar a los brazos de mí papá y poder jugar fútbol con mi hermano Zac, desearía poder salir de este maldito lugar.
La puerta se abre lentamente y el pánico regresa a mí, tengo miedo de que sea Freddy, de que me golpe tan bruscamente que rompa cada hueso de mi cuerpo, le tengo tanto miedo y tanto asco a la vez.
-¿Tienes hambre?- escucho la voz de Navarro desde la puerta.
No respondo, mi cuerpo no reacciona, me siento tan hundida en la miseria.
-Bryan regresara en un rato, ayer salio a comprar algunas cosas por que una tubería se rompió, y esto es estúpido, ¿Tienes hambre o no?- dice con fastidio.
Sigo sin responder, solo escucho un bufido de su parte y después, como cierran la puerta.
Escucho murmurós afuera de la habitación, sin embargo, no soy capaz de saber que dicen.
La puerta se vuelve a abrir de golpe y una carcajada fría sale se los labios de Freddy.
No hago el intento de moverme, sí, si siento pánico, terror y asco, pero si me mata, sería mejor que esta mierda.
Se acerca hasta mí y se sienta a mi lado, acaricia cínicamente mi cabello, unas lagrimas golpean mi rostro y el dolor de cabeza regresa.
-¿Ya aprendiste la lección?- dice riendo, la furia entra en mí y sin pensar, digo;
-Vete al diablo, maldito idiota- murmuró con enojo, nisiquiera puedo moverme cuando siento una patada en mi rostro.
Un sollozo sale de mis labios cuando comienza a golpearme bruscamente, después me toma del cabello y me levanta la cabeza.
-¿Como me dijiste?- dice con rabia.
Le escupo en la cara, el me deja caer de golpe y mi espalda duele, comienzo a llorar.
Regresa a golpearme, y después de varios golpes, se detiene.
-Si quiero el maldito dinero, no debo de matarte, así que comportate- grita con furia.
-Pudrete- le digo entre sollozos, no puedo aguantar el dolor de mi rostro, la sangre seca se cubrió por sangre nueva, y mis músculos me piden libertad, es algo estúpido sabiendo que es lo mínimo que tengo ahora.
La puerta se cierra de un golpe y respiro hondo.
Muevo desesperada mis muñecas y mis tobillos pidiendo que las cuerdas se rompan,pero no pasa.
Suelto un grito de frustración y seguido, comienzo a llorar fuertemente, quiero irme de aquí, es lo único que quiero, quiero irme de aquí.
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Aislada; Bryan Mouque.
Teen FictionUna chica que es secuestrada, narra explícitamente cada tragedia que le ocurrío. Pero no sabia que su peor tragedia fue, cuando se enamoro de su secuestrador.