Siento que en cualquier momento voy a vomitar.
Mi cabeza me da vueltas y estoy muy cansada depronto.
Me recargo en la cama y suspiro frenéticamente, abrazo mis piernas contra mi pecho.
Tengo los ojos llorosos y tengo la nariz roja y me duele de tanto sorberla.
-Bryan- doy un pequeño grito, pero niego con la cabeza al pensar que podría llegar otra persona.
Escucho pasos en las escaleras y maldigo entre dientes por haber gritado.
La puerta se abre ligeramente y veo su cabeza asomarse por el espacio que queda.
-¿Pasa algo?- dice con voz tranquila.
Me volteo de nuevo contra la pared y sorbo ligeramente mi nariz, los párpados me pesan pero no eh podido conciliar el sueño desde que Bryan bajo a hablar con esos idiotas.
Entra lentamente y se pone en cuclillas a mi lado, yo cierro los ojos y hago una mueca de dolor.
-¿Te sientes mal?- murmura preocupado, yo asiento.
Pone su mano en mi frente para tomarme la temperatura, yo abro los ojos poco a poco, el me mira un segundo.
-¿Te duele la cabeza?- asiento- ¿Tienes moco fluido?- vuelvo a asentir, un poco nerviosa.
El me sonríe y yo nisiquiera puedo regresarle la sonrisa, por que me arde la garganta.
-Te esta entrando gripa, creo que tengo unas pastillas abajo, te daré una y te sentirás mejor, ¿Okey?- acaricia mi cabello y le doy una media sonrisa, besa mi frente y se levanta.
Sale de la habitación y deja entreabierta la puerta, yo suspiro aliviada.
Me recuesto boca arriba y observo el techo, no hay nada más que un foco encendido, cierro los ojos y al fin, logro conciliar el sueño.
(...)
Despierto repentinamente y veo que el foco ya esta apagado, supongo que ya es de día.
La puerta se abre y volteo, veo que es Bryan con un vaso con agua, le sonrío pesadamente y el entra.
Camina hasta mi lado, se siente en el suelo, me levanto y me siento frente a el.
Saca una pastilla y me la entrega, yo la coloco en mi lengua, después me pasa el vaso y le doy un sorbo.
Trago con dificultad y hago una mueca de dolor.
El coloca su mano en mi mejilla y la acaricia, yo cierro los ojos absorbiendo su caricia.
-Vine en la noche, pero estabas dormida- dice roncamente, asiento- Los chicos ya se fueron, llegaran pasado mañana, tenemos dos días para nosotros solos- murmura en mi odio y su cercania me estremece.
Cuando abro los ojos, ya no es Bryan el que esta frente a mí, veo a Freddy.
Me separo de golpe y el terror se apodera de mí, intento levantarme pero el me sostiene de la cintura, lo golpeo en el pecho con pánico, pone su mano en mi cabello, yo comienzo a sollozar.
-¡DEJAME MALDITO CERDO!- le grito y pequeñas lagrimas caen por mis mejillas, un sollozo sale de mis labios.
-Alize, soy yo, cariño soy Bryan- levanto la mirada con pánico, y veo fijamente sus ojos, es Bryan, si es él.
Respiro entrecortadamente y cierro los ojos, recargo mi cabeza en su hombro, el acaricia mi espalda.
-Lo lamento, enserio, lo siento- digo con la voz temblandome, el niega.
-Esta bien, todo esta bien ahora- dice y besa mi cabello.
Me separo de el y lo miro a los ojos, el junta nuestros labios en un pequeño beso tímido.
Yo le sonrió y lo beso devuelta, enredo mis dedos en su cabello y el pone su mano en mi mejilla.
Nos separamos unos segundos después, con la respiración agitada.
-¿Quieres darte una ducha? y luego, podríamos comer algo, en una mesa, solos- susurra cerca de mis labios.
-¿Como una cita?- digo tímidamente.
-Como una cita- dice roncamente, deja un beso tímido en la comisura de mis labios- Hay algo de ropa sobre el retrete, estaré abajo- dice y se levanta, me ayuda a levantarme y caminamos hacia la puerta.
Le sonrío y camino hasta el cuarto de baño.
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Aislada; Bryan Mouque.
Teen FictionUna chica que es secuestrada, narra explícitamente cada tragedia que le ocurrío. Pero no sabia que su peor tragedia fue, cuando se enamoro de su secuestrador.